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- No sé cómo lo haces, Mina..., supongo que quedarse en casa concentrada en una actividad es mejor que salir y perderse en la calle.

- Bueno... no sólo es eso Wonpil... he de confesar que de un tiempo para acá no me he sentido... como... como si fuera yo misma.

- ¿Uhm? ¿Cómo?

- A veces tengo..., ejem, experimento episodios de pánico sin razón alguna y me paralizo... cuando luego soy capaz de reaccionar termino llorando y andar por las calles de Seúl hace que mi pánico se active... no sé... es extraño.

- ¡Ah!, creo que sé de qué hablas. Te daré la tarjeta del terapeuta de Jae... creo que es útil hablar con alguien que pueda guiarte a sobrellevar esos episodios... no sé, talvez sirva de algo.

- ¡Gracias, Wonpil Oppa!

Mina pidió al chico que la llevara a un centro comercial para comprar unos nuevos tenis de lona para Chaeyoung tras haber escuchado lo del accidente de Somi. Talvez intentando reponer las zapatillas le haría sentir menos culpa de la que y cargaba haciéndole sentir aún muy mal.

Algunos curiosos en el centro comercial los reconocieron y sacaban  fotos, Mina mantenía la mirada en el piso con el cabello cubriendo la mitad de su rostro. Se inmóvil parada frente al aparador de una tienda, de repente se sintió incapaz de dar un paso más... Wonpil notó que éste podría derivar en uno de esos episodios que le acababa de confesar así que con mucha delicadeza Wonpil logró sostener unos dedos de la mano de Mina y la guió hacia el interior del lugar.

Mina se sentó queriendo recordar el número de calzado de Chaeyoung pero cayó en un momento de amnesia temporal, veía a Wonpil frente a ella preguntándo si estaba bien pero Mina solo percibía a éste chico frente ella, no podía escuchar claramente lo que hablaba y sentía que perdería el conocimiento de un momento a otro.

- ¿Señorita? ¿Podría ayudarnos? Mi amiga no se siente bien, ¿nos regalaría un poco de agua? - la chica de inmediato sacó un par de botellas y se las ofreció al chico. - Mina, bebe un poco, te hará bien. ¿Te quieres ir?

Wonpil era de lo más dulce pero era también muy penoso y sentía que había llamado más atención de lo que pretendían, sin embargo no iba a dejar a Mina a su suerte. Luego de que la joven diera unos tragos a la botella de agua, sacudió su cabeza volviendo en sí, tenía la mirada perdida y poco a poco recobraba el sentido, miró al jóven a los ojos intensamente, éste desvió la mirada sonrojado.

- Lo siento... lo siento... he tenido un mareo, me sentí... ufff... no sé, no puedo pensar con claridad.

- Bueno, ya estamos aquí, veamos los zapatos y vayámonos antes de que la publicación "Kitchspatch" nos case y nos impute 3 hijos.

- Hehe... Won... eres gracioso... - dijo amargamente luego de su episodio, - Gracias.

- Y bien, ¿qué medida los buscas? O ¿prefieres regresar otro día?

***
- ¡¡Hey!! ¡Las chicas han vuelto! - Dijo Dahyun brincando del sillón con una sonrisa de oreja a oreja mientras Sana se abrazaba a ella para pellizcar nuevamente sus suaves mejillas bajando hasta su culo.

Momo no podía ignorar esa dinámica, tampoco le hacía sentir celos, era Dahyuni después de todo... Un fugaz pensamiento pervertido pasó por su mente hasta que Nayeon le empujó por detrás para hacerla a un lado.

- ¡Aaahh... mi cabeza! - gritaba la mayor mientras entraba.

- Podrían no gritar tanto... - irónicamente pedía Jihyo con un suave susurro mientras se masajeaba la sien.

- Hahahaha, gracioso viniendo de tu parte, señorita voz de bocina... - se burlaba Jeongyeon.

- Unnies... ¿acaban de llegar? - dijo Chaeyoung buscando a Mina, aunque aún estaba algo somnolienta fallaba sus ojos... - ¿Mina, viene con ustedes?

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