INEVITABLE//FINALIZADA

XXXVIII

CHLOÉ:

El siguiente día no vi a Luka, no conteste sus llamadas ni abrí la puerta cuando me busco. No tenía nada en contra de él, pero no me sentía con ánimos para afrontarlo ahora.

Y tampoco quería que se diera cuenta que me la pase llorando como patética enamorada con el corazón roto.

No me rompiste el corazón Luka, yo lo hice.

Adrien se casaría dos días después de que yo lo hiciera, pero no quería ir a su boda, o sí iba le echaría en cara todas sus verdades y no me convenía tampoco hacer una escena delante de todos.

Él único que me preocupaba era Luka, no quería que se viera involucrado en una situación que lo pusiera incómodo.

Por eso yo me estaba encargando de los preparativos sola con un organizador, y hoy, un día antes de mí "gran" boda, estaba sentada en el suelo frente al televisor viendo una película de ciencia ficción mientras comía un tazón de cereales.

Llevaba una camisa amplia y el cabello sujeto en un moño alto, ahora más tranquila que ayer. O bueno, estaba tranquila hasta que escuche pasos desde la cocina que me pusieron en alerta. Me levanto del suelo para ver de qué se trata, quedándome helada al ver como Luka se acerca con pasos cautelosos a donde estoy.

Actúa normal Chloé.

−No sabía que eras allanador de día y músico de noche.

Bromeo, volviendo a sentarme en el suelo mientras llevo otra cucharada de cereales a mi boca.

−La puerta trasera estaba abierta, así que no allane nada –deja en claro, sentándose a mi lado en el suelo −¿Por qué no contestabas mis llamadas?

Ay Dios mío, no me prepare para esto.

−¿Sabes lo difícil que es organizar una boda en menos de tres días? No he tenido tiempo ni para respirar.

Espero que me crea, y parece hacerlo ya que apoya su cabeza en mi hombro mientras mira el televisor.

−Pensé que estabas evitándome por lo que paso.

−¿Evitarte? –bufó, como si fuese lo más absurdo que haya dicho. –Sí es en lo que más he estado pensando.

No era del todo mentira pero sospecho que debí guardarme ese comentario para mí.

Él ríe por lo bajo y levanta su cabeza para mirarme.

−Me alegra saber que todo está bien entre nosotros.

Sujeta mis mejillas con sus manos y me plata un beso en la frente, algo más amistoso que romántico y, que a pesar de ser así me hace sentir bien y consigue que una sonrisa boba se instale en mi rostro.

Quiero decirle que no todo está bien, que sé todo el contexto detrás de esa ex novia que dejo de ser misteriosa y que sepa que ella no lo merece.

Pero no soy quien para decirle eso.

Así que mordiéndome la lengua permito que apoye su cabeza sobre la mía mientras vemos el televisor.

[...]

Después de que Luka tuvo que irse, no quise quedarme sola en casa porque por más absurdo que suene, su ausencia se notaba más y llegaba a asfixiarme.

Decidí salir a caminar, llevaba mucho que no lo hacía y creo que me vendría bastante bien para despejar mi mente.

Sin embargo el clima no ayudaba mucho a subir mi ánimo. Las nubes eran grises ocultaban al sol, que de vez en cuando traspasaban débiles rayos.