"Elizabeth, & Susana"
Relata Elizabeth:
Con la mirada fija en la puerta, y oprimiendo una y otra vez el botón de mi bolígrafo pensaba en lo imbécil que había sido. No había un segundo en el que no recordara su mirada cuando le dije que no lo amaba, que no era importante para mí. Sentí las lágrimas escurriendo por mis mejillas, en estos días ya me estaba acostumbrado a sentirme de esta manera, llevaba dos semanas sin parar de llorar y preguntándome ¿A qué vine a este mundo de mierda?. Ya no podía dejar de ocultar que estaba mal. Cada vez se me hacía más difícil, era una tortura no habían pasado más de 16 días y ya no aguantaba su ausencia, y para colmo Amelia se había largado y me había dejado todo su trabajo. ¿De verdad tenía tan poca dignidad como para seguir aquí?.Miss Brown, los proveedores acaban de llegar.
Me dijo la secretaria de Amelia y yo asenti pidiendo que los dejara pasar a la oficina. Como cada final de Agosto era necesario ver a los proveedores y aún sin ganas de nada estuve con ellos. Cuando se retiraron volví a mi momento de nostalgia dentro de aquella oficina. Sabía que había echo mal, había roto las ilusiones de una persona que de verdad me quería como nadie lo había echo antes.
¿Se puede?.
Escuché la voz de Zen, y la miré escabullirse a mi oficina, pero no tenía ni ganas de verla, no me sentía digna de nadie.
...¿te encuentras bien Lizzie?.
Me preguntó acercandose a mí.
Sí, ¿Que quieres?.
Le pregunté negandole la mirada.
¿Segura? Es que te e notado muy distante estos días ¿No sé? Dime ¿Te hice, o dije algo que te molestará?.
Me preguntó y revire los ojos.
No Zendaya, vuelve a tu trabajo.
Le contesté volviendo la mirada al computador porque la verdad no quería que notará mi miseria.
Ok, pero si necesitas hablar recuerda que somos mejores amigas y quiero estar para ti en cualquier situación que se presente, no me hagas aún lado.
Dijo y escuché la puerta cerrarse, aquí iba una vez más, me sentía tan mal pero no quería hablarlo con nadie no me sentía digna de absolutamente nada. La puerta se volvió a abrir y ahora se trataba de la secretaria de Amelia.
Miss Brown, la busca miss Vargas.
Exclamó y me quedé pensativa, no conocía a ninguna miss Vargas.
¿Es una proveedora?.
Le pregunté y ella nego.
Dice que es una amiga, ahm ¿quiere que le diga que vuelva después?.
Me preguntó y yo negué.
Hagala pasar.
Le pedí pero me quedé pensando de quién se podría tratar porque no me venía nadie a la mente.
Fue de sorpresa cuando ví a Susana Isaza entrar a mi oficina y me levanté de inmediato, con solo verla sonreír sentí que se me olvidaban las penas, abrió sus brazos extendiendolos a mí y nos abrazamos fuertemente. Me dieron ganas de llorar, los brazos de Susana se sentían como los de una persona que brindaba mucha paz y protección.
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"𝑆𝑖𝑚𝑝𝑙𝑒𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑝𝑎𝑠𝑎𝑛" (𝐿𝑎 𝑐ℎ𝑖𝑐𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝑙𝑎𝑡𝑒)
FanfictionJuan Pablo Villamil trasladado a NY por su trabajo, él es destacado no solo por su buen desempeño si no también por su discreción y humildad al tratar con los demás. Aún que a sus 32 años hay algo que lo tortura y es que no ha podido tener una relac...