CAPÍTULO 14

135 17 1
                                    

   6 días después...

   Era de mañana cuando todos se reunieron en la base. Sato tenía algo que decir.

–Como saben, no hay muchos recursos, los últimos incidentes han agotado reservas importantes de combustible, de agua y refacciones -comenzó dando una mirada de comprensión a todos los presentes-. Por eso vamos a mandar a tres escuadrones por esos esenciales suministros.

    Los presentes se lanzaron miradas de gusto. Siempre era bueno un poco de acción.

–¿Quiénes iremos? -Cuestionó un joven con entusiasmo.

–Usted no, por supuesto teniente Rogh -todos rieron por la calma del mayor, quien sonrió por escuchar las carcajadas, al joven no le quedó de otra que bajar la mirada avergonzado-. Usted tendrá una tarea importante una vez que todo llegue.

   El joven teniente Rogh asintió con más confianza.

–A continuación, les daré sus tareas.





Terminado aquello:


–Por último. Equipo fantasma -lo observaron expectantes-. Pueden seguir en reposo.

–¡¿Qué?! -Gritaron a la vez. Excepto por dos. Sonia, quien no quería ir y Sabine, quien no se sentía lista.

–Comandante Sato, no es porque no nos guste estar aquí, pero ya descansamos suficiente -argumentó Hera decepcionada y apartándose con él un poco para que el resto no los escuche-. ¿No podría darnos una misión? Por más pequeña o insignificante que sea.

–Admiro su entusiasmo, capitana Syndulla, pero, sin duda puede ser más útil aquí. En especial con la joven que está en su nave.

–¿Iara? -vuelve a contestar ella- Ahora que lo dice, olvidamos la prueba por lo que pasó con Ezra y su accidente.

–Efectivamente. El chico dijo que no hizo nada sospechoso a parte de hacer que la nave volara por accidente. Pero ninguna nave se enciende solo porque le pongan algo encima.

–¿Dice que Ezra está mintiendo? -Observa con algo de molestia.

–Posiblemente -los demás espectros regresaron a su nave.

Ezra volteó de lado levemente al escuchar su nombre. Con curiosidad y algo de nervios siguió su camino.

–No le permito que se exprese así de él -reprende con severidad después de ver al niño irse-. No tiene ninguna necesidad ni motivos para mentir. Nunca lo ha echo.

–Discúlpeme si me expresé mal -aclara su garganta-. Pero entiendo que el chico a veces es... muy ingenuo. Entonces, tal vez ella lo engañó.

La twi'lek se queda pensando esas palabras. Era cierto que el joven no era muy avispado cuando se trata de desconocidos, pero también que es muy inteligente y siempre termina con la mayor de las ventajas.

Aunque, ahora recordaba que esos dos siempre estaban juntos y a veces se escondían para hablar.

Intentó no pensar en algo sucio entre ellos dos, pero lo prefería a una traición.


–Porque la prioridad es esta base y la rebelión, le sugiero que investigue personalmente el asunto.

–Sí... lo comprendo. Veré todo lo relacionado.

Star Wars Rebels: La nueva historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora