Capitulo X. Realidad

153 19 2
                                    

A la mañana siguiente cuando el sol comenzaba entrar por la ventana, Mix intentó ponerse de pie para ir al baño, sin embargo se vio impedido por un fuerte dolor en la parte baja de la espalda, giró con mucho cuidado hacia el otro lado de la cama en donde se encontraba el pelinegro; lo contempló dormir plácidamente y con un rostro tan apacible que parecía casi angelical.

— ¿Cómo puedes tener un rostro tan encantador y dormir tan tranquilo luego de dejarme en esta penosa situación?— murmuró Mix sin dejar de contemplarlo, incluso acarició suavemente el rostro del mayor quien de manera sorpresiva tomó su mano y la besó aun teniendo los ojos cerrados y luego contestó la retórica pregunta del castaño.

— ¿Acaso te estás quejando? creo recordar que fuiste tú el que pidió que yo fuera un poco más rudo— abrió los ojos para encontrar la cara sonrojada de Mix y lo acercó a él tomándolo por la cintura.

— ¿Yo? no lo recuerdo, ¿no estarías ebrio? nunca pediría algo así— dijo aquello tratando de evitar el contacto visual con Earth pero con una evidente sonrisa en su rostro, el mayor por su parte se pegó al Castaño y acurrucó su cabeza en el cuello de este.

— Earth debo darme un baño antes de bajar a mi departamento...— dijo en un tono de inconformidad pues realmente no quería hacerlo, sin embargo lo más probable era que su abuela se hubiese quedado a dormir allí para esperarlo; tampoco sabía con certeza qué excusa le daría pues el supuesto era que sólo iba al teatro con el mayor.

—Mmm...— se quejaba el mayor mientras seguía estrujando al otro y luego con un tono mimoso le sugirió — ¿quieres que le mande un mensaje a tu abuela?— se separó de Mix y luego mirándolo continuó — Puedo decirle que te obligué a celebrar y que luego me sentí algo de culpa por dejarte solo y te traje hasta acá conmigo.

El menor paso sus brazos por el cuello de Earth y lo abrazó suavemente dejando un beso tierno en sus labios — suena bien pero aun así debo bajar al departamento y no puedo llegar oliendo a sexo, así que levántate y ayúdame o mejor aún llévame, estoy demasiado adolorido por tu culpa—dijo eso ultimo como si estuviese indignado pero el mayor solo pudo reír.

Complaciendo las demandas de Mix el pelinegro le dio un beso y luego se levantó, intento cargar al castaño sin embargo le ganó la risa pues él tampoco tenía fuerzas para hacerlo estaba demasiado cansado de la noche anterior, al final solamente le ayudó a ponerse de pie y que se recargara en él para que le fuera menos difícil caminar, aquella escena fue demasiado graciosa para ambos y duraron bastante tiempo riéndose.

Tomaron un baño rápido, Earth se quedó solo con la toalla y mix tomó prestada una playera del pelinegro se dieron un último beso y mix bajó a su departamento pero mientras iba escalón por escalón su felicidad se convertía en ansiedad, sacó las llaves y cuando estuvo a punto de abrir la puerta fue tirada por alguien, era su tío el cual le miró despectivamente.

—Vaya, se te ocurrió aparecer estaba a punto de irte a buscar en el quinto piso, tu abuela estaba preocupada de que estuvieras molestando a su inquilino ¿no te da vergüenza ser tan confianzudo? O ¿acaso heredaste el descaro de tu madre?— Mix deseó haberse encontrado con su abuela en vez de ese hombre, sus palabras siempre eran inadecuadas y sabía que era lo que más podría dolerle, sin embargo esa mañana el castaño lo tomó muy tranquilo quizás ser el cansancio o tal vez la embriaguez de amor que le dejó el mayor.

— sí estuve en el quinto piso con P'Earth— entró al departamento casi empujando al tío quien se fue azotando la puerta y se dirigió a la cocina donde estaba la abuela tomando un té, se inclinó ante ella y antes de que fuese interrogado comenzó a hablar — perdóname abuela, los padres de P'Earth insistieron en que fuera a cenar con ellos sin embargo luego de que se fueron los amigos del superior y él me invitaron a tomar unos tragos yo le dije que podía quedarme solo en el apartamento pero él dijo que quería hacerse responsable por haberme embriagado así que pasé la noche en su sillón y hoy en la mañana no me dejó salir sin tomar una ducha para que no me vieras con resaca en caso de que te hubieses quedado a esperarme.—

La abuela lo escuchó mientras daba pequeños sorbos a su taza, parecía estar muy tranquila ante aquella información y cuando terminó de oírlo, asintió con la cabeza y dijo pacíficamente — me alegra que el joven Pirapat y tú se llevaran bien, tu tío quería reñirte anoche y fue una suerte que te quedaras fuera de casa— hizo una pausa para dar un último sorbo a su té y se levantó de la mesa acercándose al muchacho que no se había movido de la entrada de la cocina.

— Por favor aprende mucho de él e intenta mejorar tus notas, tus tíos ya no quieren que te de dinero e incluso me piden que deje de apoyarte con el alojamiento, que mejor debería rentar este departamento, estoy convencida de que si tus notas suben ellos dejaran de lado esa idea— la abuela le dio unas palmaditas en el brazo y salió de la cocina, tomó su bolso y se acercó a la salida y se giró para comentarle otra cosa antes de irse—Voy al hospital con la esposa de tu otro tío, ayer por la tarde nació tu primo, mándales un mensaje felicitándolos.—

Sin decir nada más la mujer salió del departamento; Mix sintió algo de enojo ante su último comentario, pero se alegró de que la familia tuviera a alguien más en quien cargar sus frustraciones y expectativas, pero muy en el fondo también se compadecía de aquel recién nacido y deseaba que no tuviera que sufrir lo que el en todos esos años.


*nota: agradezco mucho a todos los que han llegado hasta aquí, perdón por tardar unos días en actualizar, mi carga de trabajo aumentó un poco pero intentaré no perder el ritmo para que sigan disfrutando :)*

HAY UN GATO EN EL TEJADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora