𝐅𝐚𝐤𝐞 𝐛𝐨𝐲𝐟𝐫𝐢𝐞𝐧𝐝.

Lovey dovey.

Sólo un par de días habían pasado para que la atmósfera se percibiera totalmente distinta a millas. Desde que Yoongi y Taehyung insistieron en compartir una van al salir del edificio, la atención de los demás había caído sobre ellos, aunque prefirieron observar al par desde lejos.

Al llegar a la estación de radio en donde se les haría una entrevista, los siete fueron recibidos con café y un pequeño muffin, dándoles un poco de tiempo y espacio para que se prepararan. Con un puchero, Taehyung vio el café en su mano con cierto disgusto y bufó rendido.

Yoongi no tardó en notarlo y rió entre dientes antes de tomar el vaso y caminar hacia el staff. Todos se percataron de esto y atentamente lo siguieron con la mirada, observando como había iniciado una conversación con una mujer. Los cinco regresaron a lo suyo al ver que no había ningún problema, menos Taehyung, quien con una dulce mirada esperó hasta que Yoongi volviera junto a él, sabiendo lo que estaba haciendo.

Al cabo de unos minutos, el pelinegro caminó de vuelta hasta Taehyung y le entregó un nuevo vaso, ganándose nuevamente la atención de los demás.

—Lo cambié por té —dijo con una sonrisa, y en un rápido movimiento plantó un casto beso en sus labios.

Una cuadrada sonrisa no tardó en adornar el rostro del castaño y de inmediato se acunó bajo el brazo de Yoongi. Al salir de su pequeña burbuja, ambos se percataron de los ojos atónitos sobre ellos. Menos Jimin, él sonreía tan grande como era posible.

Namjoon tenía la mandíbula en el suelo al igual que Hoseok, mientras que Seokjin no dejaba de pasar saliva con dificultad. Jungkook estaba asombrado aunque, con una traviesa mueca, tiraba del brazo de Jimin con emoción.

Claro que nadie dijo nada. De la misma forma en la que aquella interacción había sido ejecutada con extrema sutilidad, pues nadie más que ellos se había percatado de aquel beso, no era el lugar indicado para hacer preguntas y debían mantenerse profesionales.

Faltando un par de minutos para iniciar con la entrevista, todos fueron llamados a sus posiciones mientras sus atuendos eran retocados. Para la buena suerte del rubio, Taehyung se había sentado a su lado y sin más tiempo que perder, dio tres golpecitos en su rodilla para llamar su atención.

Al voltear, Jimin no decía nada, simplemente lo veía con una sonrisa cómplice que sólo ellos dos conocían. Taehyung rió ante esto pero, relamiendo sus labios, negó.

—Te contaré después —susurró, viendo a Jimin asentir inconforme.

Después de unos interesantes veinte minutos, la entrevista se había dado por terminada. Desde que llegaron al establecimiento hasta que se fueron, a Yoongi y Taehyung pareció no importarles nada más que no fueran ellos dos.

Mientras que los demás habían escuchado atentamente las preguntas y hacían su mejor esfuerzo para contestarlas, mostrándose bastante ecuánimes, el par se habían perdido en su pequeño mundo y, cual imanes, no se habían separado ni por un momento.

El staff se había cansado de pedirles que se comportaran, pero juguetear con las manos, piernas, susurrarse cosas al oído, compartir miradas y risas cómplices había sido su prioridad. Incluso se hizo un pequeño corte para llamarles la atención, pero la entrevista había quedado en segundo plano para ellos de todos modos.

—¿Qué pasa con ustedes dos? —preguntó Namjoon acercándose a ellos con una mueca indescifrable. No parecía molesto pero tampoco se veía particularmente feliz—. Alguien me acaba de regañar por su culpa —se quejó con un puchero.

En ese momento, todos se acercaron hasta ellos, usando la espalda de Namjoon como soporte y escondite.

—Lo siento, no fue intencional —dijo Taehyung apenado, tratando de esconder su sonrisa—. Pero a nosotros también nos regañaron.