Unos cuantos días habían transcurrido tranquilamente, todo dentro de la rutina. Los siete cumpliendo con sus horarios rigurosamente y dejando el edificio hasta tarde. En cuanto al otro tema, nada había cambiado en absoluto, todos seguían siendo igual de amables con ellos y viceversa, cosa que llenaba a Yoongi de tranquilidad.
El brillante reloj del salón de prácticas marcaba las nueve con cincuenta. Por fortuna hoy no tenían nada más que hacer, así que mientras todos se alistaban para irse, Namjoon se acercó hasta Yoongi y sigilosamente lo tomó del hombro para llevarlo a un lugar más apartado.
—Ya tengo lo que me pediste —susurró, haciendo al pelinegro esbozar una enorme sonrisa—, esperemos a que se vayan todos para ir a tu estudio.
A los pocos segundos, Jimin no tardó en acercarse al verlos hablando lejos de los demás, suponiendo que estarían discutiendo aquello.
—¿De qué hablamos? —preguntó risueño, uniéndose.
—Namjoonie tiene lista la letra —contestó el mayor con una sonrisa.
—¿De verdad? —aplaudió tiernamente— ¿Entonces nos quedaremos?
Asegurándose de que nadie escuchara, Yoongi asintió disimuladamente y lo tomó del hombro para reincorporase con los otros.
—¿Quieren trabajar ahora? Entiendo si están cansados, podemos hacerlo otro día —sugirió el pelinegro.
—Por mí está bien, es temprano aún —rió Namjoon.
—Yo tampoco tengo problema —aseguró el rubio con una sonrisa.
—Entonces corran al estudio antes de que alguien los vea y comience a preguntar —bufó con gracia.
—Bien, te vemos ahí —susurró Jimin entre risitas y en cuanto los cuatro abandonaron el salón, el par salió corriendo hacia el estudio.
Definitivamente no habían pasado tan desapercibidos como creían. Desde que la práctica había terminado, Taehyung había estado cazando a Yoongi en busca de un momento oportuno para hablar con él, pero habían estado ocupados. Para su suerte, mientras caminaba por el enorme pasillo, pudo darse cuenta de que alguien venía caminando tras él, así que se giró para encararle.
—Hola —dijo meloso, escondiéndose en sus brazos de inmediato.
—Hola —contestó Yoongi risueño, corriendo sus dedos por aquel suave y ondulado cabello— ¿Qué pasa?
—Sólo quería preguntarte algo —sonrió— pero ¿me das un beso primero? No me has dado ninguno hoy —se quejó tiernamente con un puchero.
Yoongi no se resistió ante aquel gesto y acunando su rostro entre sus manos, acortó la poca distancia con un beso. Aquel reclamo no era del todo falso, ahora que lo recordaba, sólo le había dado un pequeño pico en la mañana al saludarse, y claro que el castaño no lo permitiría.
Aquel sonido lleno de conformidad que Taehyung había dejado escapar en medio del beso cuando éste había comenzado a intensificarse, hizo a Yoongi separarse. No había sido su intención, pero el castaño se lo hacía inevitable.
—¿Satisfecho? —preguntó burlón, pero Taehyung negó entre risas.
—Nunca —dijo, arrugando la nariz.
El pelinegro resopló divertido y no hizo más que tomarlo de la cintura, pegándolo suavemente hacia él.
—Bueno, ¿qué querías decirme?
—Ah, es verdad —rió—. Bueno... no sé si quieras, pero había pensado en que tal vez sería buena idea, no sé. En verdad no pasa nada si no, pero pensé que...
ESTÁS LEYENDO
𝐅𝐚𝐤𝐞 𝐛𝐨𝐲𝐟𝐫𝐢𝐞𝐧𝐝.
FanfictionLo que comienza como un juego, podría terminar en una inesperada realidad.