Fuiste Tu | Draco Malfoy |

Capitulo 35

Narra Madison

No he podido dormir bien en las últimas noches, lo único que logro es horas y horas de desvelo y lágrimas caer sobre mis mejillas adoloridas hasta quedarme dormida por el cansancio.

No he intercambiado palabra con Draco. Solamente miradas significativas, llenas de tristeza y nostalgia.

He decidido concentrarme en el torneo, ayer tuvimos una reunión con una señora medio rara y sapa que nos preguntaba hasta el color de nuestra ropa interior. Realmente desagradable.

Hoy tenderemos la reunión dirigida por Dumbledore para hablar sobre la primera prueba.

Me dirigía hacia el salón designado cuando una mano tomó mi brazo.

-Mady - Me tense al reconocer su voz y loción característica.

Volteé mi mirada y me encontré con unos ojos azules.

-No tengo tiempo - Espete sin amabilidad.

-Por favor, solo quiero decirte algo - Draco suspiro.

Lo mire unos segundos y acepte con mi cabeza.

-Que sea rápido.

El me soltó afortunadamente y me miró directamente a los ojos - Escuché que la primera prueba será en dos días.

Me limite a asentir con la cabeza hacia aquel rubio.

-Solo... quiero desearte buena suerte, sabes que eres importante y... - Lo interrumpí fastidiada.

-No tienes que tomarte la molestia de darme esa típica charlita motivadora - Lo mire frunciendo el ceño - Gracias pero, tengo que irme.

Decidida a marcharme, intenté alejarme, sin embargo, Draco tomó mi brazo nuevamente. Haciendo que me tensara ante su toque.

-Por favor, no me hagas esto.

Lo mire furiosa - ¿Qué no te haga esto? ¿Y lo que tú me hiciste que?

-Sabes que no fue mi culpa.

-Lo fue desde el momento en un decidiste dejar las cosas así y no hacer nada.

Ambos nos mirábamos con tristeza y furia, Draco me soltó y avanzó.

-No me digas esas estupideces Madison - Escupió acercándose mucho más a mi cuerpo - No me vengas con esa mierda.

Reí sin gracia - ¿Qué no te lo diga? Es la verdad.

Tensó la mandíbula y yo retrocedí chocando con la pared a mi espalda - Quiero que me veas.

Sin obedecer, aparte mi mirada a un lado. Draco tomó mi mandíbula entre sus dedos y me obligó a verlo. Sus anillos se marcaban en mi pálida piel.

-Te amo, te amo con locura y a veces me odio por eso - Espetó decidido y con una pequeña sonrisa.

No dije nada, estaba petrificada al sentir su tacto nuevamente. Parecía una estúpida.

Sin querer apartar mi vista de la suya, eleve la comisura de mi labio y dibuje una sonrisa en mi rostro - Lástima que el amarme no te funciono para nada.

El no se vio afectado por lo que dije, al contrario, su sonrisa se amplió más.

-Para algo debe servir amarte tanto - Inclino su cabeza hacia un lado - Como por ejemplo para esto.

Quise replicar, sin embargo, antes de que pudiera hacerlo, sus labios ya estaban aplastados a los míos.

Luche al principio, mis labios intentaron evadir lo más rápido posible de los suyos, el por el contrario me besaba con efusividad y deseo que demostraba en la forma en cómo sus labios abrazaban los míos.