𝑳𝒂 𝑨𝒅𝒊𝒄𝒄𝒊ó𝒏 𝒅𝒆 𝑻𝒊𝒛𝒊𝒂𝒏𝒐 [Completa]✔️

Capitulo 08-Sin Mascaras

Le doy otro sorbo a la copa de vino que tengo en la mano mientras no dejo de mirar a Adkin vistiéndose. Desde que le dije "No" ha mantenido el silencio total. Termina de arreglar su cinturón y arrastra la silla del tocador hasta acomodarse frente a mi.

Me quitó la melena negra dejándola a un lado y liberando mi cabello claro sobre mi espalda. Le doy otro trago a mi copa y lo miró fijamente.

—Mi bimba es la única que me dice no bajándome la calentura en un segundo.

—Creo que antes de pedir matrimonio tenemos temas que aclarar.

—¿Temas? Creí que lo único que se necesitaba para ser esposos era amor.

Niego y dejó la copa a un lado.

—El amor no es suficiente cuando hay tantos líos y confusiones.

—Significa que si aclaro tus confusiones puedes repensar el rotundo No que me dijiste hace unos minutos.

—Tal vez —suelto en tono tranquilo—. ¿Hace cuanto y como sabias que era yo?

Echa la espalda hacia adelante abriendo sus piernas para dejarlas a cada lado de las mías, deja sus manos sobre mis muslos y me da una mirada fija.

—Desde que me besaste "ebria" en mi departamento.

Abro los ojos sorprendida. Ríe por lo bajo y niega.

—¿En serio me crees tan idiota de no notar que eras tu? Bimba, tus labios, tu cuerpo y principalmente tus ojos son una adicción para mi, la cual se me marca en la piel como si despertara en mí un nuevo sentido el cual enciende su alerta cuando te tengo cerca. Sea con melena negra, antifaz y capa siempre te voy a reconocer.

—¿Por qué no me lo dijiste?

—Te daba tu espacio —se encoge de hombros—. Esperaba que confiaras en mí y me lo dijeras.

Detalló su rostro en silencio. Celosa de mi misma y sin saber que mi secreto estaba al descubierto hace mucho tiempo.

—Y me pediste matrimonio aquí porque te gusta esta versión de mi y no yo misma —afirmó.

—Te pedí matrimonio aquí porque este es nuestro lugar, aquí nos entregamos por primera vez —toma mis manos—. Aquí me enloqueciste en cuanto a lo sexual y Danella me enamoro con su personalidad complicada de entender.

Asiento.

—Te dije que solo seríamos amigos.

—Amigos, marido y mujer, amantes, enemigos, tú mi fuerza yo tu amor, podemos ser todo lo que quieras.

Cuando se trata de ser romántico nadie le gana a Adkin Tiziano. Tiene una habilidad para las palabras de las que pocas personas gozan ya que no teme soltar lo que siente dejando el temor de ser rechazado o sonar muy cursi al hacerlo.

Esa es la cualidad que más me gusta, a pesar de tener y parecer un bad boy o galán adonis, es más valiente que yo sin perder oportunidad de expresar lo que siente, cosa que yo no sé hacer.

—No te quedes callada bimba. Dime que piensas.

—Tengo miedo —confieso—. No quiero ser herida de nuevo y prefiero seguir en mi zona de confort a lanzarme a tus brazos dándote el poder de lastimarme.

—No puedo prometer que seré perfecto y es imposible jurar que no tendremos diferencias y discusiones, pero mi amor la única manera de que nos mantengamos seguros es viviendo una vida aburrida y conforme y mi mujer es todo menos alguien que se conforme con lo que la vida le dé.