𝑳𝒂 𝑨𝒅𝒊𝒄𝒄𝒊ó𝒏 𝒅𝒆 𝑻𝒊𝒛𝒊𝒂𝒏𝒐 [Completa]✔️

Capitulo 28-Mi Adkin

Raquel Boss nos lleva por la ciudad mientras hace un par de llamadas para el jet privado que nos sacará de este infierno. Esta madrugada salí casi corriendo buscando la dirección que Katharina me dio, después de una conversación tediosa con la mano derecha de Katharina finalmente llegamos a un acuerdo. Por suerte el encanto de mi marido fue el pilar que realmente convenció a la rubia para que decidiera dejarlo tranquilo, como si el destino se hubiera puesto de mi parte, Zakharova le dio su palabra a Adkin donde le decía que si yo venía por él ella lo liberaría.

En las pocas semanas que llevo en este lugar he sido testigo de cosas horribles. Robert Boss es un pervertido de primera, oculta su gusto por las mujeres menores que él con esa pose de elegancia y corrección, pero en las noches no duda en escabullirse para buscar e incluso me atrevería a decir que forzar a las empleadas más jóvenes. También fui testigo de como asesinan personas con sus propias manos. Lo curioso de todo esto es que a Maksym jamás lo vi haciendo algo malo pero el miedo y respeto que todos le tienen.

Suspiro recordando que la tal Camil prometió que llevaría a mi marido a la pista de despegue de manera segura. La ansiedad que me consume el cuerpo no me deja siquiera respirar con normalidad, estos meses han sido los peores de mi vida sin saber nada de él pero al menos conocer a Katharina me dio cierto aire de alivio porque aunque parezca una mujer desalmada en el fondo de su mirada se puede ver que no es una sádica.

—¿Confías en los mafiosos? —pregunta Dominick. Es la primera vez que me dirige las palabras desde que llegamos aquí. —Son criminales y no deben saber que es cumplir una palabra.

—Los mafiosos como nos llamas tenemos honor —habla Raquel—. De lo contrario todo el mundo conocería sobre el gemelo de mi sobrino.

—¿Su sobrino? El era mi hermano, un Tiziano que ustedes diseñaron y crearon como un monstruo.

—Dominick.

—No Danella, si acepto guardar tal secreto ante mi familia es por el bien de Adkin y porque Maksym Boss no es más que un criminal de la peor calaña. Ya quiero largarme de aquí con mi hermano y borrar todo.

—Así será —intento tranquilizarlo—. Nos iremos con Adkin y los Boss no nos volverán a buscar.

Raquel asiente estacionando el auto en la pista de despegue. Bajo del auto casi corriendo cuando veo a Camil Edwards sola en medio del rayo de sol del día.

—¡¿Dónde está mi marido?!

—Danella Boss tu marido está en el jet, pero necesito un favor de tu tía.

Dominick y Raquel se acercan, detallo a la chica de cabello negro frente a mi su rostro muestra una notoria preocupacion.

—¿Qué sucede? ¿Dónde está el clon? —pregunta Raquel

—Raquel, Camil necesita un favor tuyo por mi y el aprecio a mi padre te pido que lo hagas.

Mi tía niega y cruza los brazos. —Yo no ayudo al enemigo.

—Me ayudaras a mi, Raquel de no ser por ellas no tendría a mi marido.

—Quiero que le diga a mi reina que Koraline la traicionó intento asesinarnos y tuvimos que huir.

—Ok le diré pero eso no servirá de nada ya que ahora es la muñeca de mi sobrino.

—Usted solo dígale a mi reina. —me da una mirada— Lamento mucho lo que sucedió con el arquitecto es un hombre de admirar que nos enseñó mucho en este mundo.

No respondo y subo al jet seguida de Dominick, inmediatamente el piloto prepara todo para el despegue. Caminamos a la zona de asientos y los ojos se me llenan de lágrimas cuando lo veo. Tiene los ojos vendados y las manos atadas a los brazos del asiento, viste una camiseta sin mangas blanca y unos jeans desgastados, su cuerpo está cubierto de golpes, su cabellos es largo y la barba es más espesa.