—¿Adkin qué haces? —suelto entre risas mientras entramos a otro cuarto.—No me causa gracia que llegaras aquí con este tipo ¿Acaso te gusta? —me deja con cuidado en el sillón mirándome cruzado de brazos.
—Si. —subo los hombros— ¿A quién no le gusta? Es muy guapo.
No habla y su semblante se torna ligeramente molesto. No contengo más mis ganas de reír celoso se ve jodidamente bello causando que se incline sobre mí atrapando entre sus brazos al dejarlos sobre cada extremo del sillón en el que estoy.
—¿Crees que vendría al RED vestida así a follar con otro en el cuarto que diseñaste para mí?
—No. Pero eso no quita el hecho de que estabas con la boca abierta viendo como lo desnudaban y el se tiraba a otras. Una cosa es que te guste ver extraños en situaciones eróticas y otra que lo hagas con alguien cercano a ti.
—¿Cuál es la diferencia?
—Bimba lo sabes perfectamente. —Acerca más su rostro al mío dejándome disfrutar de su aliento cálido.— Solo a mi debes mirarme así no quiero esas confianzas ni con él ni con nadie.
Enarco una ceja y sonrío, es imposible tomar su reclamo en serio cuando se ve tan jodidamente sexy y celoso. Me inclino ligeramente hacia adelante y uno de mis labios a los suyos en un beso tierno y tranquilo que no me corresponde.
—Si quieres que te vea solo a ti porque no me muestras lo que tiene oculto bajo ese traje. —hablo sobre sus labios por fin sacando una sonrisa de su parte.
—¿Qué quieres, bimba?
—Un baile erotico sería sexy.
—Ok. —suelta sorprendiéndome.
Se aparta ligeramente camino al bar del dormitorio busca mi vino favorito y lo abre con gran habilidad para luego darme una copa. Busca una canción en el reproductor de música la cual llena la habitación dándole un toque candente dejándome a la expectativa. Le doy un sorbo al líquido rojo que moja mis labios y me quitó el abrigo mirándolo.
Me muero de emoción al saber que Adkin Tiziano el arquitecto elegante y serio esta preparandose para bailar desnudandose frente a mi. Eso es lo que más amo, la complicidad que tenemos porque nadie sabe ni se imagina lo bien que encajamos solos.
Me da un guiño con coquetería y mueve su cabeza en círculos lentos relajados, ¿Que si Adkin baila bien? Bien es poco maneja una sensualidad que podría darme un orgasmo solo con un baile. Al ritmo de la música empieza a deshacerse de su ropa con movimientos calientes dejando que disfrute de ese fabuloso cuerpo del que presume. Su camisa blanca cae sobre mi regazo y grito emocionada tomándola sin despegar mis ojos del hombre que baila para mi.
No espero mas y camino hasta él con mi copa de vino en las manos. Paso mi palma izquierda por sus abdominales dándole una mirada fija, rodea mi cintura acercándome a él y ríe cuando dejo caer mi bebida en su pecho para que mis labios recorran su cuerpo pasando mi lengua por las gotas de vinotinto que caen hasta su boxer, la única prenda que tiene puesta.
—Bimba... —jadea.
—¿Si? —pregunto bajando despacio hasta que me deshago del incómodo boxer que estorba. Intento seguir mi juego pero es más hábil y me quita la copa para aventarla lejos.
—Mi turno.
En un ágil movimiento me toma de los glúteos cargándome hasta la cama donde me deja caer con delicadeza. Busca la botella de vino y regresa conmigo dejándola de lado mientras me quita la ropa con notorio desespero. Muerdo mi labio mirándolo mientras la piel se me eriza al contacto con las primeras gotas del líquido rojo sobre mi abdomen. Arqueo mi espalda ligeramente cuando sus labios chupan mi vientre y su lengua viaja por el centro de mi cuerpo hasta llegar a mi barbilla.
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𝑳𝒂 𝑨𝒅𝒊𝒄𝒄𝒊ó𝒏 𝒅𝒆 𝑻𝒊𝒛𝒊𝒂𝒏𝒐 [Completa]✔️
Lãng mạnBilogía Tiziano. Libro ll. Existen lazos que son imposibles de olvidar, huellas que quedan marcadas en la piel como si fuesen un tatuaje. Danella creyó que alejarse e intentarlo con otro la ayudaría olvidar a Adkin, Pero de nada sirve alejarse cua...