Irila es una joven de 26 años cuenta con un pasado oscuro lleno de dolor el cual desea enterrar y nunca más volver a vivir, escapa de su país natal buscando una nueva vida en Inglaterra con la ayuda de su vieja amiga de la infancia.
Luego de mucho...
Hola a tod@s! ¿Cómo están? Espero muy bien ❤️ les agradezco a todooos los que siguen leyendo mi historia, son increíbles ¡Gracias, Gracias, gracias! Bueno ahora un anuncio importante que debo decir en este espacio porque después ya sería muy muy tarde, apartir de este capítulo la historia comenzará a cerrarse nos quedan sólo el capítulo 36,37,38,39. Los cuales obviamente estarán más que conectados. Espero los disfruten y bueno nos leemos en ellos! Me van comentando que les parece que amo sus mensajitos jajaja Besos 🦋
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Tom
Han pasado unas semanas de nuestra pequeña escapada de prófugos a la isla, sin ser notícia en ningún canal, medio o red social, sólo sabiendolo nosotros y nuestras leales cómplices. Irila ha estado muy animada luego de la pequeña aventura, imprimió cada foto en Polaroids entregandome la mitad a mí, mientras las suyas ahora descansan en su gran pared junto a las de Minerva.
Empezamos a trabajar otra vez, prepara mis pendientes y yo reviso los nuevos guiones que Jenne me envía de posibles trabajos, algunos relacionados al teatro, al cine excepto por uno el cual es casi un anticipo navideño lleno de promesas.
Me siento en el sillón con el libreto pero apenas puedo abrirlo sintiendo los brazos de Irila enredados a mí pidiéndome una y otra vez.
—Por favor, por favor déjame verlo ¿Si? ¿Sí? Di que si por favor.
—No tendra gracia si te lo enseño después sabrás lo que ocurrirá.
—Si, pero veré la segunda temporada igual sólo quiero saber que pasará con Loki y Sylvie, además es tu responsabilidad. Me sorprendo preguntándole indignado.
—¿Mía?
—Si, me hiciste su fan, ahora tendrás que aguantarlo. Me besa el cuello y no puedo contra sus influjos.
—De acuerdo, ven aquí.
—¡Sí!—salta por encima del sillón sentándose a mi lado, mientras abro el guión viendo sus ojos chispeando de alegría.
—¡No puedo creerlo! Será genial.
—Veremos, solo al final podremos decidir eso.
Mi teléfono suena y lo busco en la pequeña mesita de la sala, viendo en la pantalla un número que hace tiempo no veía.
—Hola ¿Rayle?
—Buenos Días primo ha pasado tiempo que gusto me da escucharte ¿Cómo te encuentras?—Apenas puedo procesar estar escuchando su voz luego de tanto tiempo.
—Bien, trabajando en casa ¿Cómo estás tú? Hace tiempo no he sabido nada de tí.
—Estuve trabajando bastante primo, estoy involucrandome en un nuevo ruedo bastante lucrativo, sólo hace falta mover las herramientas correctas, por eso estoy llamando a mi queridisimo primo.
