TITANIC
Jackson reparte caricias sobre mi cabello y yo cierro los ojos escuchando su corazón latir, es tonto, pero me encanta hacerlo. Me hace creer que en algún momento su corazón latirá solo pa...
Okay fuera cursilerías de la mañana hola hambre.
—¿Qué vamos a desayunar? —Jackson se eriza al escuchar mi voz y yo suelto una carcajada.
—¿Cuánto llevas despierta? —inquiere dándome un beso en la frente.
—Lo suficiente para escucharte decir que soy la chica mas perezosa con la que has salido.
—Y lo eres —confirma. Clavo mis ojos en su boca y me levanto para darle un corto beso en los labios—. Macarrones con queso —responde a mi pregunta con una sonrisa burlesca.
—Se me antoja más un pastel de cajita.
Siento una almohada llegar a mi cabeza y escucho las carcajadas de Jackson.
—Auch —me quejo.
—¿Quieres hotcakes? —pregunta mientras se para.
—¿Los harás tú? —pregunto sorprendida.
—Te dije que no soy malo cocinando.
Lo sigo hasta la cocina y me siento en la barra teniendo los ojos fijos en Jackson, esto no me lo perdería nunca. Bostezo con aburrimiento cuando hace los primeros dos sin quemar la cocina y pruebo uno para quejarme de su sabor.
No están mal.
Jackson se da cuenta de mi cara de sorpresa y comienza a reírse.
—¿Algún error que tengas que admitir?
Me quedo callada.
—Jackson —lo llamo unos segundos más tarde y el se acerca—. ¿Qué tan obligatorio es lo del estilo Titanic?
Jackson se carcajea y apaga la estufa. Camina hasta quedar frente a mí y su expresión se torna seria al ver mi cara de preocupación.
—Bueno... no haré nada que tú no quieras —toma un pedazo de hotcake y se lo mete a la boca—. Pero no entiendo que es lo que te apura. No será nada que no haya visto antes.
Lo empujo por el hombro y el se atraganta.
—No es eso —suspiro—. Es que es diferente.
Jackson me mira con inquietud e impaciencia. Esperando a que hable, pero yo no encuentro las palabras para decirlo.
—¿Por qué sería diferente? —pregunta alentándome a decirlo.
Me muevo nerviosa en mi lugar y desvío la mirada cuando nuestros ojos se encuentran.
—Alguna vez te has tomado una foto que te gusta muchísimo.
—¿A mi mismo? —asiento—. Nope.
Ruedo los ojos cuando manda al bote de basura mi ejemplo.
—¿Nunca te has tomado una foto? —cambio de tema—. Pero eres fotógrafo.
—Fotógrafo no modelo.
—Bueno...
Miro a mi alrededor y se me ocurre una idea. Sin embargo mi idea se va a la basura.
—Y las que te tome —inquiero mirándolo.
—Eran terribles Anne, sin ánimos de ofender.
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Solo una firma
RomanceQué se siente estar enamorado? Es una pregunta que Anne se hace continuamente, solo se puede cuestionar las tonterías que las personas hacen por amor y llegar a la conclusión de que quiere lo mismo. Anne vive con una idea del romanticismo perfecto y...