Solo una firma

Capítulo 34

TODO SE ACABA

Volver a Londres es confirmar nuevamente que este es sin lugar a lugar a duda el sitio donde quiero pasar mi vida.

La primera vez que vine todo lo veía con gran sorpresa y admiración, no creía de verdad estar aquí. Ahora lo observo con un gran anhelo, esperando el día en que viva aquí.

No creo que alguien sea capaz de ser infeliz viviendo aquí.

Incluso ser pobre aquí debe de ser algo agradable.

Si yo tuviera que elegir entre ser vagabunda en mi hogar o ser vagabunda en Londres elijo Londres.

Volteo a ver al desconocido que está llevando las maletas a un taxi y me hace una seña para que me acerque.

—Su vehículo —abre la puerta y señala el interior—, ¿falta mucho para alcanzar a Edward?, esto de abrir puertas se está volviendo cansado.

—No te imaginas cuantas más necesitarías abrir para llegar a ser Edward.

—Seguiré abriendo puertas, entonces. Tal vez y deje la fotografía para volverme portero.

—O podrías encontrar a un vampiro y que te convierta, así podrás alcanzar a Edward.

—Mmm —sube al taxi y cierra la puerta—. Me gusta más la opción del portero.

—Aburrido.

—¿Tú me estás diciendo aburrido? —enarca una ceja—, la chica cuyo método de diversión es dormir.

—Dormir es divertido —replico— y mucho.

—Claro, así como es divertido ver comedias románticas.

—Sí lo es.

—No lo es.

—Tú dices que es más divertido ver películas de asesinos.

—Te motivan a vivir.

—Sí claro.

—Te das cuenta de que no quieres ser descuartizado para posteriormente darte de alimento a un cocodrilo.

Me río.

—Creo que confundes las películas de mafiosos con las de asesinos. ¿Cuál mafioso es tu favorito? —rueda los ojos y yo me río.

—Seguro no lo conoces —contesta con una mirada retadora.

—Tienes cara de ser fan de 365 —me comienzo a reír y el rueda los ojos girándose para que no vea su sonrisa.

El taxi estaciona y miro por la ventana el edificio al que Jackson me trajo con los ojos vendados.

Se preguntarán, entonces ¿cómo lo vi? Pues es sencillo, cuando salí del edificio, obviamente me detuve a mirar el lugar que no había observado al llegar.

—¡Llegamos! —exclamo viendo el edificio.

Jackson comienza a subir las maletas con ayuda del taxista y yo lo veo desde el auto apreciando el entorno.

El departamento está en una zona muy urbanizada, hay edificios a los lados y al frente con departamentos.

El lugar es increíble sobre todo por la ubicación, queda cerca del centro pero también cerca de la universidad de Londres, siendo el lugar perfecto tanto para estudiantes como para trabajadores.

Jackson me da la mano para bajar y ambos caminamos al interior del edificio. El lugar es bonito. Pero sigue dando aires de descuidado.

A diferencia del departamento en el que estaba viviendo Jackson, que gritaba dinero, este es un poco más al estilo friends.