Reporte de misión: Operación Pangea

15- ¡Quiero ir a la escuela!

Decidimos subir a un edificio mirador para observar a la gran Ciudad Férrica desde las alturas, pudiéndose ver la costa y el mar desde lejos. Compré unos binoculares baratos y me puse a observar la ciudad en busca de algún movimiento sospechoso, pero no encontré nada. Toda la ciudad estaba en calma o al menos eso es lo que podía ver desde allí.

El lugar se encontraba lleno de turista y era una habitación alta circular, teniendo todo el edificio ventanas transparentes en el exterior en vez paredes, siendo sostenido por varias barras de metal. Las paredes del interior eran amarillas y habían varias bancas blancas que tenían a los lados macetas con pequeños árboles.

-¡Sorprendente!- dijo May sorprendida.

-¡Qué hermoso!- dijo Max mientras veía el paisaje.

-Una ciudad muy bonita, pero no se compara con Londres- dije mostrando un poco de mi orgullo nacional.

-¿Es cierto que en Londres llueve todo el tiempo?- me preguntó May.

-No llueve todo el tiempo, pero la mayoría del tiempo suele tener un clima húmedo y en promedio llueve en más de 100 días al año- le explique.

-Eso sí que es mucho- dijo May sorprendida.

-Si pero luego te acostumbras- le dije.

-Bueno, creo que ya pasamos mucho tiempo aquí- dijo Max.

-Sí, es momento de irnos- dije.

-Pero primero pasemos a la tienda de recuerdos, había algunas cositas muy bonitas- dijo Meloetta.

-Sí, buena idea Meloetta- dijo May entusiasmada.

Fuimos a la tienda de regalos, la cual se encontraba en ese mismo piso, en donde compramos diversos cachivaches como playeras y llaveros, la mayoría con algún dibujo o forma de palmera o del propio edificio. Guardamos la mercancía comparada y nos dispusimos a salir pero fuimos detenidos por los chillidos de un pequeño Pokémon con temor.

-¿Poliwag?- dijo un Pokémon.

-¿Escucharon eso?- preguntó Max, deteniéndonos de golpe.

-¿Poliwag?- volvió a decir el Pokémon.

Volteamos a varias partes y entonces encontramos a un Poliwag temblando de miedo debajo de una banca. Tenía una banda blanca en la cola con el logo de una Pokébola en rojo. Al verlo rápidamente Max corrió hacia él y se agacho.

-Hola- dijo Max.

El Poliwag se asustó aún más y se volteó.

-Si te pasa algo tal vez podamos ayudar, ¿está bien?- le dijo Max.

-¿Poli?- dijo Poliwag volteándose para ver a Max, un poco más confiado.

Entonces Poliwag salió de la banca y Max lo tomó en sus brazos.

-Hola Poliwag- le dijo Meloetta.

-¿Acaso estás perdido pequeño?- le preguntó Max cuando vio la banda en su cola -¿Qué es eso? ¿Es alguna clase de símbolo?-

-¡Poliwag!- dijo una mujer viniendo hacia nosotros -¡Por fin, andábamos buscándote!-

La mujer se veía como una chica de 17 años de ojos rojos y cabello castaño que tenía recogido en dos coletas con un lazo rojo, con una pequeña raya en U negra. Usaba medias rosas y una pequeña bufanda rosa en forma de corbata alrededor de su cuello. Vestía una falda de uniforme escolar gris sin mangas con un estampado rectangular, que es blanco por dentro. También usaba una camiseta blanca, con mangas cortas, dentro de su falda hay una enagua blanca y un par de zapatos negros.