—No lo entiendo... ¿Por qué Minho hyung es así? ¿Acaso no tiene corazón?
Jisung preguntaba cosas que Seungmin no podía responder, quién también limpiaba las lágrimas de Jisung con un pañuelo, mientras sentía el dolor de su mejor amigo como si fuese el suyo.
—Sunggie, lo lamento tanto... quizá hacer esto no fue buena idea...
—Sabía que sería difícil, pero no sabía que ese animal no tenía sentimientos —espetó.
Seungmin frunció sus labios y se dispuso a abrazar al pequeño mientras acariciaba su sudado cabello. Hacía mucho calor y en donde estaban ocultos para que él pudiera llorar en paz, la temperatura era mucho más alta.
—Tranquilo, ¿sí? Sabes que puedes parar cuando quieras, y si lo haces ahora tal vez sea bueno para ti. Puedes olvidarte de él y no sé... ¿fijarte en alguien que si te quiere?
—No me fijaré en Sanha, él no me gusta y punto —y volvió a lloriquear en el pecho de su amigo.
—¿Sabes? Hoy es viernes, Jeongin y yo no tenemos nada que hacer, sabes que puedes venir a nuestra casa y podemos también hacer una pijamada y ver muuuchas películas de terror —inquirió.
Jisung trató de respirar, aunque lo hizo con dificultad, aún así respondió:
—A Innie no le gustan esas películas, es mejor que miremos otra cosa.
—Está bien. Si quieres puedo cocinarte algo... no soy muy bueno pero puedo ver algún tutorial, incluso puedo ir a la casa de mi abuela a que me enseñe la receta de su pastel de chocolate. No me gusta verte llorar, tu siempre tienes una sonrisota en tu rostro. Lo odio, lo odio, lo odio.
Jisung sonrió y salió de su pecho. Miró hacía arriba ya que Seungmin estaba parado y dijo con entusiasmo:
—¡Pijamada con pastel de chocolate, si!
Y ambos rieron.
Jisung siempre era uno de los últimos en irse de la escuela, no sabía por qué siempre se quedaba solo, hasta Seungmin y Chan, incluso Jeongin que iba a los cursos menores por tener un año menos que ellos, se retiraban apenas tocaba el timbre. Pero no, Han Jisung tenía que calcular qué materias tenía el día siguiente, porque si, su memoria para eso, no era tan buena –lástima que para otras cosas se iba a acordar toda la vida.
Pues allí estaba, colocando algunos libros en su mochila o devolviendo algunos a su casillero, así tenerlos listos para mañana y hacer alguna que otra tarea antes de la pijamada. Cerró el mismo cuando vió que tenía todo y estaba a punto de dar un paso para irse pero alguien tomó su brazo.
—¿Por qué lo haces, Han? ¿Por qué gastar dinero en regalos para personas que ni conoces?
Y Jisung reconoció enseguida esa voz, a pesar de lo poco que habían hablado en el día de ayer. Sin embargo, esta vez era más profunda y rasposa. El rubio se dio la vuelta y consigo, Minho retiró su mano de la muñeca contraria.
—Porque me gusta, hyung. Sé que suena ridículo, así como dijo, pero me pareció una... linda forma de acercarme —Sunggie bajó la cabeza, un poco tímido ante la confesión—. Antes, con su actitud ruda y los rumores de... —abrió en grande sus ojos, arrepintiéndose de sus palabras—. ¡Quiero decir! No creo en los rumores que lo rodean, pero... pero...
—Me importa una mierda en lo que creas o no. Ya has contestado mi pregunta, no hables demás —tras esas palabras, el menor ascendió su cabeza—. Ya me has dado una razón.
Minho lo esquivó y amagó con seguir con su camino, pero la manito de Jisung, aferrándose a su muñeca, logró que se detuviera.
—¿Razón para qué, hyung? —preguntó con su corazón a punto de salirse de su pecho.
Minho lo miró a los ojos. Aquél color café era más claro de lo común, con un brillo en especial, algo que Lee jamas había visto.
—Eso no te incumbe —espetó y apartó la mano del menor, retomando su camino.
Sin siquiera ver la sonrisa en el rostro de Jisung.
ESTÁS LEYENDO
━ 20 𝑟𝑒𝑔𝑎𝑙𝑜𝑠 𝑑𝑒 𝑛𝑎𝑣𝑖𝑑𝑎𝑑 ✧ 𝑀𝑖𝑛𝑆𝑢𝑛𝑔
Fanfiction❝ 10 𝘥𝘪𝘢𝘴, 10 𝘳𝘦𝘨𝘢𝘭𝘰𝘴. 𝘌𝘴 𝘴𝘶𝘧𝘪𝘤𝘪𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘮𝘱𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘏𝘢𝘯 𝘑𝘪𝘴𝘶𝘯𝘨 𝘤𝘰𝘯𝘲𝘶𝘪𝘴𝘵𝘦 𝘦𝘭 𝘤𝘰𝘳𝘢𝘻𝘰́𝘯 𝘥𝘦 𝘓𝘦𝘦 𝘔𝘪𝘯𝘩𝘰. 10 𝘥𝘪𝘢𝘴, 10 𝘳𝘦𝘨𝘢𝘭𝘰𝘴. 𝘌𝘴 𝘴𝘶𝘧𝘪𝘤𝘪𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘮𝘱𝘰 𝘱𝘢�...