Un Verdadero Amor. 5a Parte.

Capítulo No.869

Capítulo 869

ʺ¡Jajaja! ¡Kyucito, eres genial!ʺ
Dijo JungMin riendo a carcajadas. Ver a su amigo quedarse sin palabras lo había hecho muy feliz. Hyun seguramente se sentía bastante indefenso y molesto después de escuchar a su propio hijo expresarse así de él.

ʺ¿Tío Min, de qué te ríes? ¿Dije algo malo?ʺ
Preguntó KyuHyun visiblemente confundido y ladeando la cabeza, tratando de adivinar qué había dicho que causó que JungMin se riera de esa forma.

ʺ¡No! Definitivamente tienes razón, Kyucito; tu papi es atrevido e insolente. Pero en cuanto a su personalidad... no creo que esta sea muy agradable, ¿sabes? Después de todo, ¿alguna vez has conocido a un sinvergüenza con una personalidad agradable?ʺ
Dijo JungMin, conservando la misma sonrisa mordaz. Él aún no había formado su propia familia, así que solo en casa de Hyun podía sentir el calor de este.

"JungMin, te voy a patear el traseroʺ.
Dijo Hyun, quien efectivamente se había quedado indefenso y sin palabras después de escuchar a su hijo, pero no permitiría que JungMin se burlara de él. Lo miró de reojo, con absoluta frialdad; todo indicaba que su amigo estaba en serios problemas.

ʺ¡Maldita sea, Hyun! ¿Por qué siempre tengo que pagar los platos rotos? ¡Yo no dije nada, fue Kyucito!ʺ
Dijo JungMin, pues sentía que su amigo lo estaba acusando injustamente. Sabía que cuando se enfrentaba a Hyun siempre estaba en desventaja.

"Min, sabes perfectamente a lo que Hyun se refiere, así que deja de preguntar que 'por qué tú'. Lo único que te puedo decir es que estás jodidoʺ.
Dijo PolPruk mirándolo con desdén y sacudiendo la cabeza.

Todos se preguntaban por qué JungMin no podía entender que nunca iba a ganarle a Hyun. Ese tipo de situación pasaba todo el tiempo y al parecer no aprendía la lección. Después de todo, Hyun era su jefe y nadie podía tener ventaja sobre un jefe. Así exactamente eran las cosas para JungMin.

ʺBueno, creo que no tiene nada de malo preguntar, ¿verdad? ¿Y qué haces aquí, Pruk? Todos estamos de vacaciones, pero tú eres médico. ¿No deberías estar en el hospital ahora mismo? ¿Que no hay pacientes durante las vacaciones?ʺ
Preguntó JungMin con falsa curiosidad, sin embargo la expresión de su rostro era de desafío. Estaba molesto por lo que PolPruk le había dicho y no estaba dispuesto a quedarse de brazos cruzados.

ʺNo soy el único médico en el Hospital Kim's Memorial y mucho menos en toda la ciudad. Si tú piensas eso, entonces eres un idiota. A veces eres...ʺ.
Contestó PolPruk torciendo la boca y sacudiendo la cabeza. Ante sus ojos, JungMin no era tan burro, pero tampoco podía comprender entonces por qué siempre hacía esas preguntas tontas.

ʺ¡Por supuesto que no creo que seas el único médico! Pero eres la columna vertebral del hospital y en estos momentos deberías estar ahí, ayudando a otros, en lugar de estar aquí de holgazán. Da un buen ejemplo a tus colegasʺ.
Dijo JungMin mientras se sentaba en una silla, reclinándose perezosamente sobre el respaldo. Parecía un hábito en él; cada vez que se sentaba, lo hacía de la misma manera. De hecho, era un tipo bastante perezoso.

ʺ¿Entonces quieres decir que como columna vertebral del hospital, no debería descansar en lo absoluto, ni siquiera en días festivos? Por cierto, no olvides qué hora es en este momentoʺ.
Contestó PolPruk aún más enojado, después de escuchar las palabras de su amigo. ¿Acaso quiere que se muera trabajando?

Las palabras de JungMin habían sido muy egoístas, pues al parecer él sí podía tomarse un día libre, pero no soportaba que otros también descansaran. ¡Eso estaba muy mal de su parte!

ʺSon las 4 de la tarde. Creo que todavía es hora de trabajar, ¿a eso te refieres?ʺ
Contestó JungMin. PolPruk jamás iba a ganar cuando bromeaba con él.

De hecho en su pequeño grupo de amigos siempre se burlaban de PolPruk, y sucedía lo mismo cuando conversaba amistosamente con Hyun. Nunca les había ganado... nunca. Y al parecer nunca lo haría.

ʺ¡Hoy es el Día Nacional! Merezco al menos medio día libre para relajarme, ¿no lo crees?ʺ
PolPruk estaba casi sin palabras, ya no sabía qué decirle a JungMin. No quería ni verlo, así que giró la cabeza para mirar las piezas de ajedrez blancas que estaban frente a él.

Estaba jugando una partida con Jonathan. Para sorpresa de PolPruk, el padre de Hyun no había dicho ni una sola palabra mientras esos jóvenes bromeaban. Simplemente se quedó ahí, sentado en silencio, esperando pacientemente.

ʺ¡Vaya! Todo indica que soy el tipo más patético. Si quiero tomar un día libre, tendré que pedirle permiso a alguien, a ver si me lo daʺ.
Dijo JungMin molesto, mientras miraba de reojo a Hyun, quien estaba sentado a su lado, pero él, como siempre, tenía esa expresión fría en el rostro y no le importaba en lo absoluto el estado de ánimo de su amigo. Ni siquiera se había tomado la molestia de voltearlo a ver o de decirle algo, pues sabía que estaba de dramático como siempre.

ʺ¿Tío Min, por qué dices que eres patético? ¡No lo eres! Si alguien es patético aquí, ese es mi papá, por tener un empleado tan inútil como tú. ¡Ya debe estar muy cansado de ti!ʺ
Dijo KyuHyun, mientras lo miraba con ojos inocentes.

JungMin ni siquiera podía creer que ese pequeño lo acababa de insultar de esa manera. Ya estaba harto de la misma basura todo el tiempo. Además siempre tenía la misma mirada inocente cuando decía algo particularmente ofensivo.

ʺHas dicho la verdad hijo; así es mi vida con empleados como Min. Ven aquí, papá quiere darte un besoʺ.
Dijo Hyun levantando una ceja y mirando a JungMin triunfante. Después se agachó y besó la mejilla de KyuHyun. Por su mirada complacida cualquiera podía darse cuenta de que estaba bastante orgulloso de su pequeño hijo.

ʺ¡Gracias papá! ¡Yo también quiero darte un beso!ʺ
Después de decir esas palabras, KyuHyun se puso de pie, se inclinó hacia su padre y le plantó un beso en la mejilla. Los dos estaban de cursis, pero también compartían una risa a expensas de JungMin.

ʺ¡Guacala! Dejen de estar de asquerosos, ¿quieren? Hay más gente aquí, ¿que no ven? ¡No soporto a ninguno de los dos!ʺ
Dijo JungMin y después hizo un sonido de náuseas. Aunque actuó como si estuviera asqueado por las muestras de afecto entre ellos, en el fondo de su corazón se sentía conmovido.

Estaba feliz por ellos, pero al mismo tiempo tenía que admitir que también estaba celoso pues se preguntaba cuándo experimentaría ese tipo de felicidad.

ʺEstás celoso, Min. ¡Eso es todo! Es tu culpa por haber dejado ir a HyungJun. Ya es muy tarde para arrepentimientosʺ.
Ante los ojos de Hyun, él era un buen chico. Aunque al principio le parecía demasiado inquieto, con el paso del tiempo se había vuelto bastante maduro y tranquilo. De hecho era muy encantador; no podía entender por qué JungMin había sido tan exigente con él.

Los resultados de su mala actitud ahí estaban. ¿Acaso era eso lo que JungMin había querido para sí mismo? ¡Definitivamente no! Pero por el momento no podía hacer nada más que admitir su error y seguir con su vida.

ʺ¡Qué idiota eres! ¿Por qué traes eso a colación ahora, Hyun? No es el momento, déjame en paz aunque sea esta vez, ¿quieres? ¡Muchas gracias por hacerme sentir triste y solo!ʺ
El rostro de JungMin reflejaba la tristeza infligida por el cruel hecho que Hyun había mencionado.

Su sonrisa se había esfumado de su apuesto rostro. Parecía que no importaba el tiempo que pasara, nunca podría olvidar a HyungJun.

ʺFue solo un recordatorio amistoso. Para que la próxima vez no lo dejes ir... claro, si hay una próxima vez. Todavía no puedo entender por qué hiciste una tontería así. ¿Qué estabas pensando?ʺ
Desde que Hyun se había vuelto a encontrar con Saeng, había puesto muchas cosas en perspectiva y finalmente obtuvo el amor que siempre anheló. Había decidido vivir su maravillosa vida al máximo.

Por primera vez se sentía verdaderamente feliz con todo lo que tenía, así que no pudo evitar desearles la misma felicidad a sus amigos. Esperaba que todos encontraran el amor verdadero y pudieran ser tan felices como él.