Capítulo No.878

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Capítulo 878

ʺNo me mientasʺ.
Dijo Saeng, abriendo los ojos como platos. En realidad no estaría tan asustado si esa cosa no lo estuviera tocando, pues en el pasado había matado a muchas serpientes en la selva tropical, sin embargo, no quería que estuviera tan cerca de su cuerpo.

ʺTe estoy diciendo la verdad, te lo prometoʺ.
Dijo Hyun, con una sonrisa irónica. Era raro que su esposo se asustara tanto, así que él estaba muy divertido.

ʺ¿Querido, qué es esto? ¡Es tan hermoso!ʺ
Preguntó Saeng sorprendido cuando bajó la cabeza y vio un collar con un fénix. Después estiró la mano y lo tocó; se sentía frío. Aunque generalmente no le gustaba usar joyas, le parecía que ese collar era muy agradable a la vista. Él y el fénix tenían algo en común: ambos habían resucitado de las cenizas, para renacer.

ʺSe llama collar de granizo. ¿Te gusta? Es un obsequio por haber sido ascendido".
Le dijo Hyun. Sabía que a su esposo le había gustado el collar cuando vio su sonrisa, pero necesitaba escucharlo de su boca.

ʺSí, me gusta mucho. Y el nombre es muy poético. ¡Gracias!ʺ
Contestó Saeng, luego, se puso de puntillas y lo besó en sus suaves labios. Disfrutaba mucho besar a su esposo.

ʺ¡Qué bueno! Me preocupaba que no fuera a gustarteʺ.
Contestó Hyun. Ese día pudo darse cuenta de que su esposo se había vuelto cada vez más dependiente de él. Lo había besado furtivamente, y su sonrisa era tan dulce como la de un chico que probaba el chocolate o el amor por primera vez.

ʺ¿Cómo no iba a gustarme? Es muy bonito. ¿Sería posible que a alguien no le gustara? Por cierto, ¿te escapaste para irlo a comprar hoy?ʺ
Preguntó Saeng apoyando las manos sobre sus caderas y levantando la cabeza para mirar a Hyun, al tiempo que una sensación de felicidad se apoderaba de él.

ʺSí, lo vi en una ceremonia de inauguración hace un par de días y pensé; apuesto a que a Saeng le gustará este collar. Pero algunas situaciones se interpusieron y tuve que posponer su compra. Apenas hoy tuve tiempo de ir por élʺ.
Comentó Hyun. Por supuesto que no estaba dispuesto a contarle toda la historia, incluida la discusión con Shaun en el centro comercial.

Cerró los ojos y percibió el aroma a jazmín de su esposo; le encantó la sensación. De pronto se acercó y lo besó en la frente.

ʺ¿Cuánto te costó?ʺ
Preguntó Saeng frunciendo el ceño, pues sospechaba que una pieza tan hermosa debía ser extremadamente cara.

ʺNo estoy seguro, la compañía pagará la factura. Por cierto, ¿sabías que ya hay una joyería en la planta baja de MY Mall?ʺ
Dijo Hyun. Pensaba que su esposo ya se había enterado.

ʺNo, no sabía. Ya sabes que no me gusta ir de compras. ¿Además, crees que puedo darme el lujo de ir a MY Mall?ʺ
Dijo Saeng haciendo un puchero. Incluso la ropa más barata que ahí se vendía costaba casi todo su salario mensual, por lo tanto sabía que lo mejor era mantenerse alejado de ese lugar. Antes de que él y Hyun volvieran a estar juntos, nunca se imaginó que algún día viviría con él, así que trataba de ahorrar dinero para KyuHyun. Se hubiera sentido culpable si gastara mucho en ropa, además le encantaba su uniforme militar y lo usaba casi todos los días.

ʺNo quiero escucharte decir que soy un usureroʺ.
Interrumpió Hyun antes de que su esposo comenzara a quejarse. Pues cada vez que criticaba los precios elevados de los productos en MY Mall, Hyun se sentía culpable, como si hubiera hecho algo malo.

ʺ¡Jajaja! Ahora ya sabes lo que eres. No está nada mal, cariño. Pero creo que puedes hacerlo mejorʺ.
Bromeó Saeng mientras le pellizcaba la mejilla. Sentía envidia de su piel, así que pellizcó más fuerte de lo que había planeado en un principio.

ʺ¿Cariño, estás celoso? Si es así, por favor no aprietes tan fuerte. Me gusta cómo luce mi piel pegada a mi caraʺ.
Se quejó Hyun con el ceño fruncido, mientras retiraba la mano de su esposo de su mejilla. Después relajó sus músculos faciales, temiendo que le hubiera hecho daño por no haberla detenido a tiempo.

ʺ¡Qué vergüenza! ¿Por qué tu piel es mucho más tersa que la de un doncel? ¡Esto es ridículo!ʺ
Gritó Saeng. Sonó como un niño haciendo berrinche, pero aún con suficiente ánimo de pellizcar el suave rostro de su esposo.

ʺ¡Jajaja! ¡Ya vi que estás verde de la envidiaʺ.
Dijo Hyun mientras sobaba su mejilla, convencido de que su piel era más suave que la de él. Probablemente la de Saeng había la lozanía por pasar largos períodos de tiempo bajo el sol ardiente.

Así que hizo una nota mental de que debía encontrar un experto que le ayudara a su esposo a recuperar la tersura de su piel. Aunque la belleza de Saeng era natural, no contar con una rutina para el cuidado de su piel no era nada bueno, pues algún día pagaría la factura. Para ese entonces ya no habría nada que se pudiera hacer.

ʺTienes razón, estoy celoso. ¿Qué pasaría si algún día mi belleza desapareciera y tú siguieras luciendo tan increíblemente guapo? ¿Seguirías siendo fiel a tus votos y aún me amarías? ¿O me cambiarías por un joven modelo?ʺ
Saeng temía que algún día su matrimonio se derrumbara. Miró a su esposo con horror, esperando una respuesta.

ʺA ver, trata de adivinarʺ.
Contestó Hyun divertido, mientras sostenía a su esposo en sus brazos. En raras ocasiones podían hablar con tanta franqueza y honestidad, pues siempre estaban ocupados y pasaban poco tiempo en casa. Además, casi no tenía vacaciones, ya que los accidentes ocurrían todo el tiempo, y tenía que estar en servicio para atender las emergencias.

ʺCreo que me abandonarías y buscarías a un chico hermoso y joven. Los hombres hacen eso todo el tiempoʺ.
Contestó Saeng ofendido. Aunque Hyun pensara que era paranoide y pesimista, quería escuchar su respuesta. Se preguntaba si lo engañaría, si lo echaría de su vida, o si se mantendría fiel a él por el resto de sus días. Cuanto más pensaba en eso, más ansioso se sentía.

ʺAdmito que me he pasado la vida adquiriendo cosas hermosas para no tener que mirar nada feo; así que si quieres que nuestro amor dure para siempre, cuídate, mantente joven y hermoso, y te aseguro que seré tuyo para siempreʺ.
Contestó Hyun. Pero la verdad era que si algún día Saeng ya no fuera tan hermoso; ya sea por la edad o desfiguración, su esposo nunca lo abandonaría.

Hyun estaba más seguro de eso que cualquier otra cosa en el mundo, sin embargo, no quería perder la oportunidad de burlarse de él.

ʺ¿Entonces me odiarías?ʺ
Preguntó Saeng, mientras se tocaba el rostro y sentía su piel deshidratada, probablemente debido al clima seco de otoño. Sabía que lucía mucho mejor y más fresco durante primavera y verano.

Un Verdadero Amor. 5a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora