Capítulo No.894

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Capítulo 894

ʺ¡Por favor, YunJae! ¿Por qué te enojas? Solo estaba tratando de hacerme amigo del joven, así que no tienes por qué ponerte celosoʺ.
Le explicó Shaun a su amante para tratar de tranquilizarlo, mientras le pellizcaba suavemente una mejilla, como muestra de su afecto.

ʺ¿Que no escuchaste lo que te acaban de decir? Él no quiere ser tu amigo. ¿Acaso estás sordo?ʺ
Contestó YunJae, visiblemente molesto por el comportamiento frívolo de Shaun, quien en su opinión era un sinvergüenza, pues mostraba interés en otros, sin importarle que  estuviera presente.

Pero lo que más la había hecho enfurecer fue que uno de esos era Young Saeng, a quien tanto odiaba, con quien había competido durante mucho tiempo y siempre terminó perdiendo.

YunJae estaba harto de esa situación, y en esa ocasión las cosas no le salieron mejor, de hecho, le fue peor, pues Shaun había tratado de ligarse a su peor enemigo, en su cara y sin el menor disimulo, lo cual le pareció una humillación.

ʺ¡Estoy totalmente de acuerdo! Lo mejor será que ya se vaya, señor Gao, pues se ve que su novio ya está muy enojado".
Dijo Yesung, con una sonrisa burlona. Ese hombre era el jefe en Kompass Group, y por ende la persona más poderosa dentro de esa compañía, pero eso no significaba que fuera el hombre más poderoso del mundo. Yesung sabía que esa empresa era más pequeña que FX International, y que Shaun Gao no le llegaba ni a los talones a su cuñado.

ʺ¿Cariño, por qué no le dice a este chico que se tranquilice un poco?ʺ
Preguntó Shaun de nuevo, poniéndose de puntillas para poder ver detrás de Yesung, pues al parecer no estaba dispuesto a rendirse tan fácilmente.

Saeng lucía despreocupado; ni siquiera se había molestado en voltearlo a ver, pues estaba muy ocupado admirando las joyas que estaban junto a él. Evidentemente no le interesaba tener nada que ver con ese hombre.

ʺ¿Señor Gao, dónde están sus modales? Será mejor que atienda a su novio y que deje en paz a mi hermano".
Dijo Yesung, quien se sentía muy molesto con la insistencia de Shaun. Había sido muy descortés al seguir acosando a Saeng, después de que él ya le había demostrado no tener ningún interés en conocerlo.

ʺLe pregunté a tu hermano, no a tiʺ.
Espetó el hombre, visiblemente irritado, al darse cuenta de que no había nada que pudiera hacer para evitar que Yesung interfiriera con sus intentos de acercarse a Saeng.

ʺ¿Disculpe? He de decirle que a mi esposo no le gusta que esté cerca de otros hombresʺ.
Dijo Saeng sin pensarlo dos veces, con un tono frío e indiferente, como si estuviera tratando de deshacerse de un insecto molesto. No había actuado de esa forma porque temiera que Hyun se fuera a enojar con él, sino simplemente porque ese hombre no le había agradado y le disgustaba su actitud insistente.

Definitivamente su comportamiento no había sido el de un caballero, lo cual había logrado incomodarlo, puesto que no había dejado de molestarlo desde el primer momento en que lo vio.

Shaun era un hombre desagradable, incapaz de dejar ir a un joven bello, una vez que se cruzara por su camino.

ʺ¡Qué pena...!ʺ
Dijo el hombre con un suspiro, mientras sacudía la cabeza. Había sido una desgracia para él que Yesung estuviera con su hermano en ese momento, pues parecía una gran roca, que bloqueó completamente su camino para llegar hasta Saeng.

No había podido acercarse a él y mucho menos entablar una conversación, todo debido a la oposición deliberada y continua de su hermano.

ʺ¿Shaun, te vas a ir o no? ¡Si quieres quedarte, está bien! ¡Me iré solo!ʺ
Gritó YunJae, después se dio la media vuelta y salió furioso de la tienda. Si hubiera sabido que las cosas saldrían así, jamás habría entrado a ese lugar, además al parecer tenía mejores cosas que hacer.

ʺ¡YunJae, espérame!ʺ
Gritó Shaun, luego volteó hacia Saeng y le dijo: ʺDisculpe, jovencito; como sabe, todos los chicos son así. Tengo que decirle adiós por ahora, pero nos volveremos a ver, si ese es nuestro destinoʺ.
Su última opción para tratar de impresionar a Saeng fue despedirse con palabras dramáticas y cursis, aderezadas con una sonrisa de disculpa. En cuanto terminó de hablar salió corriendo de la tienda para tratar de alcanzar a YunJae.

ʺ¡Qué gente más chiflada! ¡Ven, hermano, pruébate el brazalete!ʺ
Dijo Yesung mientras lo levantaba para mostrárselo a Saeng y luego añadió: ʺNo le hagas caso a esos bichos rarosʺ.
Afortunadamente no les dio mayor importancia a YunJae o a JaeJoong, ni mucho menos a Shaun Gao; de hecho, ya se había olvidado casi por completo de ese incidente.

Pero Saeng, en cambio, no estaba tan relajado ni indiferente como había fingido, pues sabía que algo andaba muy mal, y no pudo sacar a JaeJoong y a Shaun de su mente tan rápido como lo había hecho su hermano.

ʺ¡De acuerdo! Me lo probaré, ya que insistes tantoʺ.
Dijo Saeng, en tono de broma, mientras estiraba el brazo para que Yesung le pusiera el brazalete. No sentía como si estuviera aceptando el regalo de otro hombre, pues era su hermano quien quería comprárselo. Además había sido un gesto muy amable de su parte.

ʺHas herido mis sentimientos; parece que no quieres que te lo regaleʺ.
Respondió Yesung con aparente tristeza y fingiendo que estaba sollozando, pero en el fondo sabía que su hermano solo estaba bromeando y le siguió el juego. Se llevaban muy bien, por lo que este tipo de bromas entre ellos era muy común, de tal forma que Yesung no estaba triste en lo absoluto. Momentos como ese fortalecían su relación de hermanos. Hacerse bromas era parte de su día a día; sin sentimientos heridos, solo un mutuo amor fraternal.

Yesung colocó cuidadosamente el brazalete en la muñeca de Saeng y lo abrochó; le quedó perfecto. El tamaño era el adecuado y no era demasiado ostentoso ni llamativo, como si hubiera sido diseñado para resaltar la belleza de quien lo usara. Y a Saeng se le veía muy bien.

ʺ¡Muchas gracias! Está muy bonitoʺ.
Dijo Saeng contento, mientras giraba la muñeca hacia la izquierda y hacia la derecha para poder ver el brazalete desde diferentes ángulos. Parecía satisfecho pues no le gustaban las joyas de colores muy vivos ni brillantes, ya que siempre evitaba llamar la atención de la gente. Y como ese brazalete era sencillo pero elegante, había sido la elección perfecta para él.

Un Verdadero Amor. 5a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora