Historia de Dánica.
La primogénita ruso-mexicana marca con rapidez una tecla en su teléfono.
Rusia- Privet?
Danica- Papa!!! Tienes que venir a la escuela, rápido.
Rusia- ¿Qué sucede?
Danica- ¡TRAJERON UNA PIÑATA!
Rusia- y eso... oh no.
Danica- Oh, si.
Tan rápido como lo permite su vehículo llega al lugar. El caos ya gobierna. El gran hombre se coloca al lado de su hija, que ve la escena desde lejos.
Rusia- Tu mamá...
Danica- да.
Varias personas, en especial mujeres siguen a la tricolor mientras esta corre en el terreno.
Mujer- Señora, entregue la piñata.
Mex- Yo me la gane, es mía.
Mujer- Señora, era para los niños.
Mex- ¿Quién lo dice? No hay límite de edad para arrojarse a una piñata.
La tricolor ve al ruso.
Mex- Ruru, piensa rápido.
Le avienta la piñata. Ahora la multitud va tras el hombre. Rusia por inercia empieza a correr.
Mujer- Señor, dennos la piñata.
Rusia- Dejen de perseguirme primero.
Mujer- Primero deje la piñata.
Danica- Mami, sabes que papá te va a regañar al rato.
Mex- Va a quedar tan agotado que se le va a olvidar.
Felipe- Dani, ¿quieres ir por un aguinaldo?
Danica- Bueno.
La pequeña se va con su amigo, mientras Rusia sigue corriendo con la multitud tras de sí.
