Miedo

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La puerta se cerraba detrás de sí. Sentía sus pies pesados y sus ánimos por los suelos. En cuanto dio dos pasos al interior se dejó caer de rodillas.

¿Por qué todo me sale mal?

Pensaba la tricolor. Un maullido llama su atención.

-Beny, dime porque tienes un ama tan idiota. No debí de haber ido. Debí de dejar las cosas como estaban. –acaricia al gato, este se baja de sus brazos y se aleja.

-Hasta mi gato se aleja.

Sigue en el suelo. Se escucha el arrastre de algo por el suelo. Su mirada ladea un poco. Beny trae con mucho esfuerzo un gran abrigo. Lo lleva hasta la latina.

-¿Dónde lo encontraste?- Beny lo suelta. Le mira directamente dando un maullido.

México toma la prenda. Es el abrigo de Rusia. La braza fuertemente.

-Tengo miedo, miedo de que me esto haya sido todo, de que lo eche a perder. No quiero dejarlo, pero que hare si él decide que se acabó. Que voy a hacer.

Le gato trepa hasta ella, le da una lamida en la nariz.

Los teléfonos de las naciones sonaron: Junta urgente. Así llegaban a la sede las distintas representaciones. Algunos se saludaban alegremente y otras ni volteaban a mirarse. Dos en específico esperaban en la entrada.

-Brother. ¿Crees que venga?-el americano rojiblanco con hoja como escudo caminaba impaciente de un lado para otro.

- Quiet, ella nunca falta.

-Pero y si... ¡Mexique!-extendía sus manos en alto. Corrió hacia la tricolor latina.

-Canada, no tan fuerte.-sonreía ante el abrazo del mayor.

-Sorry.

-Ey petty, ¿Cómo sigues? ¿Has tenido otro ataque?

-¡Canadá!

-Sorry, but él es muy persistente, quiso saber porque te habías ido así de Europa.

-No fue nada.

-Mexique, tus espasmos fueron tal que tus colores casi se fueron. Estaba muy asustado.

-Ya chicos, ya me estoy recuperando. El estar en mis tierras me ha hecho mucho bien.

-Sí, pero gracias a tu viaje retrasaste tu recuperación. God, que chica tan terca nos tocó. Les't go. La junta ya va a comenzar.

El trio camina abrazados al salón. A sus espaldas, Rusia había escuchado la conversación. Se baja en cuclillas al suelo. Abraza sus hombros, de manera que su cara baja queda completamente cubierta por estos.

Ella tuvo un ataque después de nuestra pelea. Eso ni siquiera fue una pelea, solo le insulte sin dejarle hablar siquiera. Aun cuando su salud es delicada ella viajo solo para explicarme las cosas. La lastime demasiado. ¿Y si esta vez no me perdona? ¿Si decide que todo se acabó? Tengo miedo.

Dentro del salón las naciones están en sus asientos. México busca con la mirada al eslavo, le observa platicar con Alemania.

Tal vez siga enojado. Piensa México.

Rusia le ve de reojo. Ve como está platicando con los americanos.

Se ve tensa. Tal vez siga molesta. Piensa Rusia.

Tengo miedo de hablar con él/Tengo miedo de hablar con ella.

Y se evitan el uno al otro.

Ruso y latinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora