Capítulo 28.

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ᴅɪɴɢ ᴅᴏɴɢ... ¿ᴍᴇ ᴇxᴛʀᴀɴ̃ᴀʀᴏɴ?

Siento como alguien me da golpecitos en la cabeza, abrazo los ojos y ahí está Oliver con una gran sonrisa en su rostro, frunzo el ceño al ver que me despertó, justo cuando voy a gritarle el me interrumpe.

- Shh.- Dice y señala a mi lado, veo a Harrison durmiendo con tranquilidad.

Ayer los quedamos dormidos en el sofá después de haber aceptado salir con el, le agradecí por todo, porque la verdad no esperaba ningún regalo y sin duda su carta y los álbumes de fotos son lo mejor que he podido recibir, las cadenas también son hermosas pero el valor sentimental que tienen esas fotos y esa carta son incomparables.

Quito el brazo de Harrison de mi abdomen y me levanto para ir con Oliver a otro lugar en el que podamos hablar. Tomo mis muletas y caminamos hasta la cocina.

- ¿Qué pasó anoche?

- Me pidió ser su novia.- Digo sonriente, fue una manera hermosa de pedirme ser su novia y juro que no me lo esperaba.

- ¡¿QUÉ?!

- Shh.- Lo callo y el se ríe.-Vas a despertarlo.

- Es que no puedo creer que de verdad lo haya hecho...

- Ni yo, fue demasiado bonito.

- ¿Cómo fue?

- Me escribió una carta...

- Son demasiado tiernos, cuando me dijo que lo haría pensé que sería de otra forma.

- ¿Tú ya lo sabías?- Pregunto con incredulidad y Oliver asiente.- ¿Y no me dijiste nada? ¿Y si no quisiera ser su novia?

- Por favor, Stella, es más que obvio que amas a ese hombre.

- ¿A quién?- La voz grave de Harrison me hace pegar un grito y Oliver ríe.

- A Jared.- Dice mi amigo riendo y yo abro los ojos a más no poder, ¿Cómo se le ocurre?- Retiro lo dicho, la mirada asesina de Stella empieza asustarme.

- Y ganas de matarte no me faltan.

- Mujer, Blake sabe de sobra que lo amas.

- Me ama, me desea... Debemos hablar más seguido Oliver, me entero de muchas cosas...- Dice Harrison soltando un par de carcajadas.- Pero es mutuo, reina, así que no te preocupes.

- Asco, que empalagosos son.- Dice la voz de Nick a nuestras espaldas. Los tres reinos por lo que Nick a dicho y este nos mira mal.

- Te falta amor en la vida, Nick.- Digo y este hace una mueca de asco.

- El único amor que necesito ya lo tengo, así que no me hace falta nada.- Dice tomando una rebanada de pizza que quedó de ayer.- Y ese amor es la comida.

- Te entiendo a la perfección.- Dice Harrison.

- Uy esto huele a problemas.- Dice Drew entrando a la cocina.- Iré por mi cámara.

Todos nos quedamos viendo a Drew el cual sale de la cocina y empezamos a reírnos.

- Ya pueden pelear.- Dice Drew entrando a la cocina de nuevo, pero esta vez con el teléfono en sus manos.

El gran engaño (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora