Capítulo 38

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Jonás de Tirania estaba molesto la conquista de Prilev se estaba tardando más de lo debido pensó que quizás haciendo ese tipo de estrategia de peleas rápidas y continuas agotaría a los soldados que se encontraban en ese momento en la frontera sin embargo no consideró que todas las casas nobles del país que además se había convertido en un gran territorio junto con la ayuda de la pequeña nación de Govan habían hecho que el reconsiderara la conquista, habían demasiadas bajas en sus tropas que no previó y pensó que las cosas no estaban funcionando, así que pasaría de una guerra hablar de forma diplomática con el gobierno.

Sabía que ellos tampoco no podían tener tantos recursos ni gente y que también preferirían detener esa guerra y parar por lo menos unos años en lo que regresar a su fuerza militar y económica, así que él decidió mandar un mensajero a la frontera para poder hablar con el rey de Prilev, él fue entregar una carta en donde Jonás de tiranía pedía llegar a un acuerdo con el rey.

Aquello emocionó a los diferentes soldados que se encontraban en la frontera ya que eso significaba que iban a parar los enfrentamientos en dicho lugar, así todos podrían volver a casa felices y velando a aquellos que habían perecido en los mismos enfrentamientos. Sin embargo a Grace no le daba buena espina el asunto ya que aquel hombre que comandaba a las fuerzas enemigas era una persona que militarmente hablando era muy poderosa e ingeniosa, así que quizás aquella era otra de sus estrategias para poder aplastarlos.

La carta llegó a toda velocidad a la capital en donde el rey ya había tenido la selección de Emperatriz y había sido la que era la Duquesa de Willow la nueva Emperatriz, quién escucho junto a su esposo el rey el contenido de la carta haciéndoles emocionar y él decidió responder de inmediato con otra carta que llegaría a la misma velocidad con la que se había ido desde un inicio.

Jonás de Tirania al ver el contenido y las cosas que pedía el rey simplemente se rio y acepto sin ningún remordimiento pero incluso con aquellas solicitudes sabía el nivel emotivo que esas cosas que el rey le estaba dando podría usarlas a su favor e incluso poder solucionar todos los problemas de frente así que con la respuesta que el brindó regreso al palacio la princesa Tessa siendo escoltada por Grace, Levi y Gregory.

Los soldados se despidieron con tristeza de la princesa, quién en ningún momento había sido grosera con ellos ni había mostrado un nivel de superioridad que solían tener los nobles con la mayoría de las personas que se encontraban allí que eran mercenarios o plebeyos que se encontraban sirviendo por órdenes del Rey. Aquellos soldados se llevarían en sus corazones el recuerdo de haber combatido junto a la princesa quién jamás hizo distinción entre un general de un soldado usual por sus clases sociales.

El viaje fue relativamente corto sin embargo Grace se sintió tan cómoda de estar en casa que se dejó caer en aquella cómoda y frondosa cama que era de su habitación sintiéndose aliviada de estar de regreso en el Palacio y poder ver a su hermano con quién debía hablar acerca de la respuesta que había dado Jonás de Tirania.

Fue la princesa que al cerrar la habitación comenzó a besar apasionadamente a Grace quién simplemente se dejó llevar por las acciones de la princesa, quién la deseaba, había pasado tanto tiempo alejada de su toque, que incluso se sentía molesta por haberse privado de él, pero no deseaba que nadie se enterase en el frente, en donde no había ningún tipo de movimiento por parte del enemigo.

Grace se sentía extasiada por la adrenalina a de la situación, había olvidado como se sentía estar entre los brazos de la princesa, y agradecía que el estar en el palacio le ayudaba a qué sí sintiese más cómoda con ella. Incluso si Grace no deseaba parar fue por unos toques en la puerta de la habitación que se detuvieron. Una de las sirvientas hizo una reverencia al ver que la princesa era quién abría la puerta de la habitación y le transmitió la orden que le había dado el rey Andrew que fuese directamente a su oficina ya que tenía cosas que discutir con ella.

La princesa se dirigió a la oficina del rey la cual estaba custodiada por fuera por dos miembros de la guardia real así que la princesa le solicito a Grace que fuera a buscar a Levi para que se tomarán el día libre o que al menos disfrutas en el resto del día que quedaba.

—¿Qué dice la carta?—. Le pregunto con curiosidad la princesa a su hermano quien simplemente no dijo ninguna palabra y le extendió la respuesta que había dado el líder enemigo y a leerla poco a poco su rostro dejó de mostrarse alegre y paso a no comprender la situación—. ¿Me convertiré en su concubina?

—Me duele con el alma pero ya he llegado a una resolución con él y un tratado de paz para que esta situación ya no afecte al reino—. Le trato de explicar el rey a la princesa Tessa quién simplemente lo empujó con rabia por la decisión que él estaba tomando—. No te comportes de esa forma aprende el lugar que te corresponde.

—¿El lugar que me corresponde?—. Le pregunto en forma de respuesta y con sarcasmo la princesa mientras ese sentía molesto porque su hermana estaba tratando de invalidar su poder—. Esto era justo lo que quería evitar, ser enviada a otra nación a formar parte de un arreglo matrimonial para solucionar los problemas que tú como rey tienes con otra nación.

—¿Y que se supone que querías que hiciera?¿el bienestar de una persona contra el bienestar de miles de mis súbditos? Creo que la respuesta es muy simple—. Le respondió Andrew, quién no pudo terminar de hablar, ya que una cachetada dada por la princesa no se lo permitió.

— He estado al frente de esta guerra mientras tú—. La princesa señaló a su hermano en su pecho —. Te mantenías encerrado desde la comodidad del palacio. Así que lo mínimo que podías hacer era conseguir este arreglo de otra forma, incluso si priorizas al bienestar de otros miles de personas a quién dices llamar tus súbditos recuerda que yo soy tu hermana, no puede ser posible que todos estos años que hemos vivido juntos y nos hemos incluso criado juntos sean nada para ti y estoy molesta por esta situación.

—Pues la decisión ya ha sido tomada y es lo que tú vas a aceptar y te irás a la frontera y serás parte ahora de una de las concubinas de Jonás de Tirania para dejar esta guerra por la paz y ya no tener más enfrentamientos que solo muertos y tristezas han dejado en mi reino.

La princesa Tessa entendió así que salió en modo de resignación de aquella oficina que no era la primera vez que salía llorando por tontas decisiones que tomaban los monarcas de su país curiosamente eran sus familiares más cercanos y a las personas con quién se encontraba relacionada de sangre, decidió entonces que al menos pasaría una última noche sintiéndose amada.

Al llegar a su habitación mandó a llamar a Grace, quién llegó a los pocos minutos con una botella de vino, se encontraba extrañaba ya que la princesa le había dado otra orden, que en ese momento se contradecía así que decidió ver qué era lo que estaba ocurriendo se percató que la princesa había estado llorando ya que sus ojos se encontraban húmedos, sin embargo sabía que si ella no mencionaba nada ella no debía de preguntarle, ya que no deseaba que la princesa se enojara con ella en estos momentos. La princesa le invito una copa de vino recién abierto a Grace y en la bebió toda de un solo sorbo.

—¿Me amas?—. Le pregunto la princesa a la ojiverde la cual asintió con efusividad haciéndole reír un poco y simplemente colocó su mano en la mejilla de la otra mientras la miraba enternecida mente sin que la ojiverde comprendiese la razón de sus acciones.

— Siempre se lo he dicho estoy a su merced Alexa—. Le respondió Grace mientras tomaba una de las manos de La princesa y besaba el dorso de la mano—. Usted puede ordenarme todo lo que quiera y yo lo haré.

— No me hagas pensar nada esta noche, te lo pido ni tampoco te apartes de mí—. Le dijo ello mientras comenzaban a besar el cuello de su escolta para finalmente susurrar unas palabras que dejó a Grace perpleja, pero con una emoción que recorrió su cuerpo entero—. Tu eres y siempre serás mía Grace.

Grace comenzó a besar todo el cuerpo de la princesa quién simplemente arqueaba su cuerpo por el contacto que aquella ojiverde le ofrecía, aquí el contacto que ambas estaban compartiendo en ese preciso momento no dejó que ninguna de las dos pensará sobre las consecuencias que ocurrirían en la mañana siguiente solo se centraban en este momento, en el presente.

Fue en un instante, en dónde sus ojos de ambas coincidieron y la princesa se sorprendió de ver aquellos ojos verdosos que le miraban como si fuese la cosa más bella que pudiese existir en este momento en el universo, incluso si sabía cuál sería su futuro y cómo pasaría el resto de sus días siendo una persona infeliz, llevaría en su corazón el recuerdo de aquella noche.

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