Sloras

Capítulo 15

Boris se encontró con la reina Laura comiendo sola en el gran salón de Banquetes ya que sus hijos habían salido de compras con sus debidas escoltas y el rey se encontraba trabajando arduamente en su despacho, por lo que el ambiente del salón estaba silencioso incluso teniendo a Boris allí.

La reina Laura tenía un porte que era capaz de darle miedo a la servidumbre del palacio a pesar de haber estado por mucho tiempo, Boris se percató que la que se encargaba de recibir a los diferentes emisarios y nobles era la reina, quien tenía mucha capacidad en esos asuntos. Ese día llegarían los líderes de cada familia o sus emisarios a aceptar el trato que el rey les había dicho de unirse al país de Prilev.

Aunque el rey se mantuviera ocupado, en la torre de invitados se encontraba un joven muy parecido a la reina, lo que había escuchado de Cayden mientras espiaba a las sirvientas que iban a aquella torre, era que aquel muchacho era el sobrino de la reina, el heredero de la nación de Govan, que se encontraba al sur de Prilev y lugar de origen de la reina Laura.

—¿Extraña Govan su majestad? —. Preguntó Curiosamente Boris al verla observar a su sobrino practicar el entrenamiento matutino de espadas con el príncipe Tessa.

—Algunas veces—. La reina tenía su vista enfocada en su hijo quien reía con su primo —. Todo era cómodo hasta el día que tocó casarme.

Aquella frase le hizo darse cuenta de que incluso si la reina era seria su vida era desdichada, posiblemente vivió como sus hijos sin preocupaciones de alguna sucesión o casamiento hasta el día que ocurrió, Boris se preguntaba si acaso la reina Laura era igual que sus hijos a sus respectivas edades.

Mientras la reina seguía desayunando, entró un sirviente miedoso a informarle a la reina que los emisarios de Dalriada habían llegado y se solicitaba la presencia de ambos en el salón del trono en donde se encontraba el rey, el sirviente tan pronto dio su mensaje se retiró lentamente y se escucharon las zancadas al correr al cerrar la puerta que hizo que una sonrisa se dibujase en el rostro de Boris quien ayudó a la reina a escoltarla hasta el salón en donde estaban los dos tronos y los chicos a los costados de los tronos.

—Si tienes dolor en la espalda dímelo—. Boris le susurró a tan pronto estuvieron juntos en el salón del trono, mientras ella se encontraba a su lado con los murmullos en la sala estaban presentes.

—La herida ya está mejor—. Dijo Grace con una sonrisa en el rostro que hizo que más de uno en la sala se fijase en aquella bella escolta que tenía el cabello corto a la altura de su cuello.

Boris prestó atención a la gente que había venido a la zona del trono, en su mayoría eran emisarios que solían venir a la casa Beaufoy incluso cuando ellos se encontraban limpiando el exterior de la mansión, vio emisarios con sus escudos en la parte de su pecho, e inclusive había de la familia Jagger, le sorprendía que a pesar de la lealtad que le tenían al rey habían decidido enviar un emisario para confirmar la introducción de su casa en la nación.

Las familias recibieron la invitación de venir al palacio con sus herederos para que hiciesen su debut social y comenzaran las relaciones entre las familias de lo que era Dalriada y la gran nación de Prilev en donde se meterían los lideres con sus señoríos, los emisarios al darle sus afirmativas y saludos al rey, junto a regalos por la tranquilidad y unión de las familias, se comenzaron a retirar.

Boris estaba a punto de irse con la reina cuando el rey Arthur les ordenó a los Slora una audiencia privada para hablar algo urgente con ellos, por lo que los sirvientes dejaron a fuera a todos aquellos que no fueran los Slora o el rey Arthur, dejando a la reina Laura sola por detrás de aquel pesado portón que tenía la sala.

—La princesa Tessa me informó de aquel suceso con la duquesa Willow, que es una lástima que ocurriera ya que yo estaba con demasiado trabajo y pedí que no me molestaran y mi hija me informó hasta la madrugada, por ellos he tomado una decisión —. El rey Arthur se acercó a ellos mientras les daba golpes suaves en sus hombros—. He mandado a redecorar el palacio de los escoltas que no se usaba desde hace más de 3 generaciones y ese será su vivienda habitual hasta que sus servicios sean requeridos.