DOS ESTRELLAS

capítulo 92

—¿la encontraste?

—¡aun no! ¿Por qué te interesa saberlo?

—dos años es mucho tiempo para buscar la respuesta de un asunto tan simple —menciona con un suave reproche. —desde tu salida del Supremacía emprendiste la búsqueda de tu respuesta sin éxito... ¡me decepcionas!

—me tiene sin cuidado si te retuerces de decepción, no estoy para complacerte.

—¡Ben Solo! Tan parecidos, tan similares en necedad, tan... confundido... tengo cada una de las respuestas que quieres. ¿todavía te resistes en ser mi estudiante?

Beny sonríe negando —¡no quiero ser tu estudiante! No te conozco, no tengo una imagen de que o quien existe atrás de esa voz que escucho desde tiempo atrás.

—¡comprendo! Me recuerdas mucho a mi último estudiante. Si no quieres serlo entonces seguimos siendo amigos ¡cuéntame! —vuelve el tono pasivo que pretende impartir sabiduría a un viejo conocido. —¿Qué te dice la fuerza?

Un suspiro largo, profundo y aletargado precede a la contestación —una vez más el mismo sueño. Caigo en un pozo oscuro. No sé si caigo por segundos o por la eternidad, solo siento caer hasta llegar al fondo. Y sucede exactamente lo mismo: ese llanto que me hace voltear a todas direcciones sin encontrar el origen... camino con incertidumbre siguiendo el llanto hasta que lo encuentro. En el suelo veo un bulto envuelto en sábanas mullidas, es un bebé; un huérfano ¿Cómo lo sé? No estoy seguro de cómo, pero sí de que es huérfano. Lo tomo en brazos para protegerlo y él calla... quiero verlo, conocer el rostro y se evapora en mis brazos. — termina con pesar. Con la incertidumbre que le provoca la repetición constante de ese sueño que por primera vez se revelo cuando dejo el Supremacía.

—quizás ese huérfano seas tú mismo. La necedad de saber quién fue tu madre provoca ese estado de miedo.

Beny niega con seguridad —¡no! No es necedad. Necesito esa respuesta. La fuerza me lo pide — gruñe.

—¿Qué descubriste de la teniente Jenna Brenn?

—sabes lo mismo que te dije antes: separada de sus padres, divorciada antes de casarse con mi padre. Buena oficial... es todo. Papá hablo muy poco de ella.

—¿Por qué evito hablar de ella? No respondas, tengo la respuesta. Amó a tu madre, su recuerdo todavía le duele. Muchacho, la teniente Brenn no se negó a ser tu madre, la fuerza la reclamo; lo que sea que busques llegaste al final ¡no hay más! hija rebelde de padres republicanos ¿Cuál fue la reacción de tu abuelo al conocerte?

—¡repudio! Mas al saber que soy hijo de Kylo Ren, represento todo lo que odia en su ideal político... aun así le di ayuda, el viejo vive en un estado deplorable.

—entonces las respuestas las tiene tu padre... es hora de volver a casa.

—¡no! Jamás volveré.

—¡oh sí! Si la fuerza lo quiere lo harás a pesar de tu negación. Serás emperador ¡deja los temores atrás! — esa voz es dura al reprenderlo. Desde que la escucho por primera vez parece ser su conciencia lo conoce tan profundo que nada puede ocultar, es como si el ser que se comunica con él en sus meditaciones viviera en su cabeza.

—no tengo lo necesario para ser emperador, ella es mejor opción que yo.

—¡no, no, no joven Solo! ¿sabes por qué existe la dualidad en el universo? — Beny niega —porque necesitamos de los extremos para buscar los puntos medios... equilibrio, balance, serenidad. La fuerza lo ha buscado por décadas tu línea de sangre, tus ancestros han fallado incluyendo a tus padres. Ahora apuesta por una desprovista del don y uno bendecido. Ella es inteligencia, empatía — Beny bufa con burla, en tanto el ser lo ignora. —asertividad, pero débil. La futura emperatriz necesita la fuerza, violencia que contrarreste cuando quieran doblegarla y tú necesitas de ella — responde con el mismo tono burlón, que se magnifica con esa voz cavernosa, casi gutural.