Desorden de estrellas (CORRIGIENDO)

7.

K A R A D A N V E R S

Lena llevaba dos días encerrada injustamente, Sam parecía bastante calmada con respecto a la inocencia de la pelinegra y yo, sin siquiera conocerla, creí ciegamente en ella.

— Investigué sus maquinarias y medicamentos.

Sam escuchó atentamente todo lo que reuní en dos torturantes días. Informes, contabilidad, exportación y las pruebas de laboratorio: todo en perfectas condiciones.

— Sam, ella no lo hizo.

— Lo sé, Lena podrá ser una perra fría pero nunca le haría daño a las personas que trata de curar.

— ¿Ella tiene enemigos? — de pronto aquella idea no me parecía una completa locura — Todo en su empresa está bien ¿Quién querría destruir eso?

— La competencia, L-Corp tiene un reconocimiento mundial pero empresas Global Edge haría lo que fuera por ser el único en National City.

— Oye Kara — Alex apareció en mi casa con algunos documentos que le pedí pero la muy bruta se quedó mirando a Sam. La morena no dejó escapar la oportunidad de envolverla con una sonrisa gentil y mi hermana parecía ver a Santa Claus con sus ojos brillantes.

— ¿Cuando saldrá Lena? — cuestioné sacando a Alex de esa burbuja con Samantha.

— Alguien muy pesado está impidiendo que Lena salga, quizás jueces y abogados corruptos. Kara, conseguí toda esa información de los niños y sus familiares ¿Sabés que pongo en riesgo mi trabajo por esto?

— Muchas gracias, Alex — Sam la abrazó tomando por sorpresa a mi hermana.

— Lena no hizo nada y vamos a demostrarlo.

Mientras Sam usaba su laptop para buscar conecciones entre todas esas familias yo buscaba el contacto de Felicity para que saque a mi vecina de prisión.

— Sé de que la acusan — hablé con el móvil en la oreja — Confía en mi, por favor, sácala de ahí. 

Felicity aceptó confiar en mí y comenzó a preparar su armería para sacar a Lena de la cárcel. La noche volvió a atraparnos y pasadas las once Sam saltó de alegría al hallar algo.

— Kara ¡Mirá esto! — me acerqué casi corriendo y vi la prueba que necesitábamos para comprobar si la pelinegra era culpable o inocente — Tenemos que ir allí para tomar una muestra del agua.

Mientras íbamos de camino a las piscinas infantiles de las cuál Lena era dueña Felicity me envió un mensaje informando que había dinero sucio metido en tribunales para mantener a mi vecina encerrada.

En cuanto llegamos al parque acuático vimos a un hombre vertirle algo al agua, su rostro traía un pasamontañas negro y una vestimenta totalmente oscura. Sam sacó unos prismáticos y con una ancha sonrisa de scout observó al individuo.

— Envenenó el agua — susurré molesta, Sam apretó mi hombro para calmarme pero no funcionaba — Hijo de puta.

En cuanto el hombre se fue la morena tomó una muestra de agua y fuimos como si de flash nos trataramos al laboratorio de L-Corp.

Lena aún seguía encerrada y si no la sacabamos me moriría de angustia, las horas fueron pasando y la jodida muestra tardaba en reconocer la sustancia.

— ¡Kara! — Alex nos acompañó, su experiencia en estos casos era necesaria así que le permití quedarse mientras Sam reunía la evidencia en una memoria USB para entregarle a Felicity — La sustancia desconocida a Pb —