Investigación

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-Korn llamó, dijo que está preocupado porque recibió mensajes de amenazas a su teléfono. Quería saber qué tal estábamos por acá. Quiéres que le cuente lo que pasó? Si te sientes incómodo conmigo le puedo decir que te lleve con ellos. - le preguntó Pat al mediodía.

-No. No quiero molestar a la parejita feliz.

-Aún sigues enfadado?

-Tú qué crees?

-Ya te pedí perdón un millón de veces. No seas infantil.

-No estoy siendo infantil, solo no quiero ver tu cara por un par de años.

-Bien, entonces qué te parece si te dejo solo por un tiempo. A lo mejor así te tranquilizas un poco. - dijo Pat ya enfadado saliendo del departamento. Cuántos días habían pasado y Pran aún parecía que lo odiaba por lo sucedido.

El teléfono de Pat sonó, era el mismo número con el que se estuvo contactando desde que Korn se fue.

-Hola?

-Señor. Tengo la información que me pidió. - escuchó del otro lado de la línea.

-Nos vemos en el café de siempre en media hora. - dijo antes de colgar.

Una vez en el café se acercó a un joven que se encontraba sentado en una mesa en la parte más alejada de la entrada, aquel era un lugar pequeño y acogedor donde podrían hablar tranquilamente sin ser vistos.

-Qué has encontrado? - preguntó sin rodeos Pat.

-El hotel es una tapadera, el verdadero negocio es la prostitución de omegas.

-Quién está a cargo?

-El dueño es un viejo alfa millonario, heredó su fortuna de su padre, tuvo un omega que lo traicionó después de la boda, escuché que a partir de allí comenzó a odiar a todos los omegas.

-Qué pasó con el omega que lo traicionó?

-Está en paradero desconocido, la persona con la que hablé dijo que pudo haberse escapado con su amante, ya que tampoco se sabe nada de él.

-Qué más pudiste averiguar?

-Tiene bajo su mando a unos diez alfas, todos ellos estuvieron en la misma prisión con cargos por abuso de omegas, venta de drogas o asesinato. Siete de ellos se encargan de marcar a los omegas y los otros tres son los que están al mando de buscar y secuestrar a los omegas. También tienen trabajando a varios betas que cumplen con diversas funciones, algunos cuidan de los omegas, otros buscan clientes...

-Y qué hay acerca de los clientes?

-Es una organización muy discreta con ese tema. No puede encontrar mucha información sobre eso, más que son millonarios en su mayoría.

-Quiero que consigas una lista con los nombres y apellidos de todos los trabajadores y los clientes del lugar. Te daré un millón.

-Pero va a ser muy difícil conseguir eso.

-Te daré un millón. Usa los medios que sean necesarios, pero necesito esa información cuanto antes.

Por la noche Pat no regresó a su penthouse, en su lugar decidió regresar a la casa de sus padres.

-Pat, no avisaste que vendrías. - dijo su padre en cuanto lo vio entrar a su oficina.

-No sabía que necesitaba avisarte, esta también es mi casa.

-Desde cuándo me faltas así el respeto? Dime. Ya has conseguido una omega?

-Todavía no.

-Estuviste faltando a tus responsabilidades en la empresa para buscar una omega. Cómo es posible que todavía no encuentres una?

-Estoy en ello.

-Has estado en ello desde que te presentaste como alfa. Cuándo vas a hacer que me sienta orgulloso de ti?

-Tener un omega no lo es todo.

-En serio eres tan ingenuo? Tener un pareja en nuestra sociedad significa que lo tienes todo. Que vas a tener una descendencia a la cual dejarle tu herencia y que no vas a andar de putas con cualquiera que te quiera calentar la cama por un rato. Creí que lo habías entendido desde hace tiempo.

-Todo el mundo sabe que a mí no me puede conquistar cualquier omega.

-Lo que se dice de ti? Sabes lo que se dice de ti? Se dice que eres tan frígido que nadie quiere comprometerse contigo. Se dice que aunque la más hermosa omega se pasee desnuda frente a tus ojos jamás podrías tomarla por tu carencia de deseo sexual. Solo has traído vergüenza a esta familia actuando de esa forma. Dime, hijo mío. Eres un alfa o una nenaza?

Pat apretó las manos en dos puños. Odia los constantes reclamos de su padre por la falta de una pareja en su vida.

-Tendré un omega cuando encuentre alguno que me parezca apropiado. Hasta entonces podrás seguir diciendo que te decepciono cuantas veces quieras. Pero no puedo simplemente tomar a alguno para hacerte feliz a ti.

-Escucha muy bien esto Pat. Solo te voy a dar un mes más para que encuentres a ese tan preciado omega que buscas, lo encuentres o no voy a organizar una boda. Y si no has encontrado a nadie yo te presentaré a tú futura pareja.

-No voy a aceptar algo así.

-Claro que lo harás, o sino puedes ir despidiéndote de la parte de la herencia que te corresponde.

Pat salió de la oficina dando un portazo a la puerta, en qué momento se le ocurrió regresar a su casa si se encontraba tranquilo descansando en su penthouse. Entonces recordó al omega que se había quedado enfadado y decidió regresar con él.

-Regresé. - dijo entrando por la puerta.

-Creí que dijiste que me ibas a dejar solo. - dijo Pran al aire mientras aún mantenía fija su mirada en el programa de televisión.

-Te dejé toda la tarde sola, con eso es suficiente. Vamos a salir.

-Salir a ésta hora? Son las diez de la noche.

-Quiero salir a comer fuera. Vístete y vamos.

-No quiero.

-No seas testarudo y salgamos!

-Dije que no quiero. Si me llegan a ver podrían encerrarme otra vez. Yo me quedo aquí. - dijo serio Pran mientras se cruzaba de brazos.

-Maldito omega... - susurró enfadado Pat, no solo peleaba con su padre sino que Pran tampoco le hacía caso. Enfadado subió las escaleras y se encerró en su habitación, hoy no comería nada.

Motel de citasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora