Pran salió del baño envuelto con la toalla miró hacia la cama y vio a Pat leyendo un libro, sentado en la cama y tapado con la sábana hasta arriba del ombligo y se preguntó qué estaría llevando puesto abajo, ya que no habían llevado ropa más la que tenían antes puesta.
-Sobre el mueble tienes un bóxer y un pijama para que te vistas. - le dijo Pat mientras seguía con la vista puesta en su libro.
-De dónde sacaste la ropa? - preguntó sorprendido mirando sobre el mueble.
-La mandé a comprar. Hay varias tiendas en el piso inferior. Podemos pasar por allí mañana por si quieres comprar algunos recuerdos.
Pran agarró la ropa y la llevó al baño para cambiarse allí. "De verdad vamos a dormir? No piensa hacer nada?" Pensaba mientras se cambiaba. Salió del baño tímidamente y se metió dentro de la cama casi corriendo.
-Buenas noches. - dijo mientras se tapaba bien dándole la espalda a Pat.
Pran ni siquiera sabía por qué se encontraba tan nervioso al sentir como Pat se movía detrás suyo dejando el libro en la mesita de luz y apagando la luz del velador. Al segundo su brazo estaba envolviendo su cintura y el pecho desnudo se pegaba as u espalda.
-Ya te vas a dormir? - escuchó como Pat susurraba en su oído. -No quieres hacer algo antes? - Pran abrió los ojos al máximo al sentir como los labios de Pat chupaban el lóbulo de su oreja.
-Al... Algo... Cómo que? - preguntó sin poder evitar tartamudear.
-Darme mi beso de las buenas noches.
Pran giró su cabeza hacia Pat y éste sin perder oportunidad alcanzó sus labios para comenzar un intenso beso. Cuando la falta de aire los hizo separarse Pran se encontraba agitado, esperaba que Pat volviera a besarlo pero en su lugar solo sintió la lengua de Pat lamiendo sus labios desde el mentón hasta la punta de su nariz.
-Ahora sí. Buenas noches. - dijo Pat mientras escondía su cabeza en el cuello de Pran.
Pran se acomodó bien en la cama después de que le tomara unos segundos procesar lo que había pasado. Ahora era muy consciente de la tranquila respiración de Pat sobre su cuello y esa mano en su abdomen. En qué momento Pat había metido su mano bajo su remera? Ahora podía sentir perfectamente el calor de su mano mandar un excitante corriente eléctrica directamente zona baja.
Conteniendo la respiración colocó su mano sobre la de Pat y la acomodó un poco más arriba, sobre su pecho, quizás así podría concentrarse en dormir. Sin embargo aquello no estaba funcionando, el dedo gordo de Pat comenzó a moverse lentamente de un lado a otro dándole pequeñas caricias justo encima de su sensible botón.
"Sólo no gimas Pran. No tienes que gemir y todo va a estar bien." Se decía Pran mientras mordía su labio inferior.
Su miembro dolía dentro de aquellos apretados boxers y podía sentir como su entrada comenzaba a lubricar, sus botones ya sobresalían y estaban endurecidos por lo que no pudo evitar soltar el nombre de Pat cuando sintió como éste pellizcaba uno de ellos.
-Si quieres me detengo. - dijo Pat antes de depositar un corto beso en su cuello.
-No querías dormir?
-No puedo dormir. Creo que aún no estoy lo suficientemente cansado, puedes ayudarme con eso?
-Y... qué quieres que haga?
-Enciende la luz de la lamparita. - dijo Pat mientras señalaba sobre la mesita de noche que se encontraba del lado de Pran. - En el primer cajón hay unas pastillas para dormir, por qué no me las pasas?
"Lo dice en serio?" Pensó Pran mientras abría el cajón con la boca fruncida. Se levantó lo suficiente para asomarse y ver dentro del cajón, efectivamente allí se encontraban las pastillas y justo al levantar estás vio que debajo se encontraba un preservativo, siguió mirando el cajón y se dio cuenta que también había una botellita de lubricante. "Así que está jugando conmigo." Pensó al ver aquello. "Bien Pat. Querías las pastillas para dormir, así que eso tendrás." Pensó mientras solo agarraba las pastillas y se las pasaba a Pat.
-Aquí lo tienes. - dijo Pran antes de bostezar. - Perdona pero yo sí tengo sueño. Que descanses. - se volvió a acomodar en su lugar y apagó la luz de su mesita.
"No se dio cuenta de lo que le dejé en cajón? De verdad sólo me pasó las pastillas y se acomodó para dormir? No está para nada excitado? No dijo mi nombre gimiendo hace un minuto? Agh!!! Alfa tonto. Por supuesto que quiere dormir. Seguramente estaba temblando de miedo no de excitación. Le digo que me perdone? Le digo que solo lo intentaba provocar para que me pida que haga algo más? Soy tan ridículo. Bien! No pasó nada. Puedo actuar como siempre, nadie notará que tengo una erección ahora por pensar en lo que podría pasar. Si él no me dice nada quiere decir que no está enfadado, verdad? No puede estar enfadado porque lo toque o si?" Pensaba Pat mientras estaba quieto mirando la silueta de Pran.
-No vas a dormir? - escuchó la voz de Pran sacándolo de sus pensamientos.
-Eh? Si! Ahora. - respondió Pat dejando las pastillas sobre su propia mesita sin tomar ninguna y volvió a acomodarse detrás de Pran abrazándolo por la cintura, esta vez evitando hacer algo fuera de lugar.
"Es en serio?! Me provoca de esta forma solo para decirme que no tomó unas malditas pastillas para poder dormir?! Me siento tan enfadado!! Necesito que me toque o tocarme, realmente pensé que lo íbamos a hacer ahora. Quiero llorar del dolor que siento en mi entrepierna, por qué diablos me hizo eso?? Pero no. No le voy a decir nada! No quiero saber nada más de Pat en mi vida!... Le digo que lo hagamos? No! Para nada! Mañana va a ver. Dejarme así fue lo peor que pudo haber hecho! Y si me acaricio un poco?... Solo un poquito?... Se dará cuenta? Si se tomó las pastillas y se duerme quizás no lo note... O voy al baño?... Mejor me duermo. Pero duele! Maldito Pat! Te odio! Te odio! Te odio!" Con cuidado se acomodó mejor, después de pensarlo mucho y pasadas unas horas cuando finalmente escuchó pequeños ronquidos de parte de Pat agarró la mano de Pat y la bajó por dentro de su bóxer, con cautela cerró la mano de Pat sobre su palpitante miembro y dejó su mano allí adentro, se quedó quieto sintiendo el calor envolviéndolo hasta que finalmente acabó dormido en aquella posición.
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Motel de citas
RomanceEn un mundo donde el dinero manda, y los omegas son comercializados como esclavos para el uso y disfrute de los alfas de clase alta, un joven alfa conocerá a su pareja destinada pero su pareja es un omega marcado por uno de los mafiosos más temido y...