Pat dejó en la cama a un muy agotado Pran, fue a tomar una ducha y decidió ir hasta el mismo a por el desayuno de Pran.
Cuando entró a la sala donde estaban dando el desayuno se sorprendió al ver a Wai comiendo enfadado una tostada, mientras Korn estaba al lado del mostrador sirviéndose un café.
-Hey Korn. Qué le pasa a Wai? Pensé que estaría agotado después de su noche de bodas. - dijo Pat confundido mientras agarraba una taza y se servía un poco de café.
-Sí. Bueno... Ese es el tema... Se enfadó conmigo por la noche de bodas que pasamos. - dijo Korn mirando de reojo a Wai.
-Tan malo fue? - bromeó Pat ganándose una mirada fea de parte de su amigo.
-No es eso. Yo... Bueno... Al parecer me quedé dormido.
Pat se atragantó con el café haciendo que lo escupidera afuera al escucharlo.
-Qué?!
-No grites. Que nos va a oír. - murmuró Korn.
-Vamos. De seguro sabe de lo que estamos hablando.
Ambos miraron hacia el omega encontrándose con su mirada enfadada, antes de girar la cabeza con indignación.
-Te dije. - dijo Pat volviendo a mirar a su amigo.
-Estoy acabado. Hundido. Destrozado. No me lo va a perdonar en la vida. - murmuraba Korn.
-Te dije que casarte era una mala idea. - dijo su padre pasando detrás de ellos.
-Gracias papá. Eso era justo lo que necesitaba. - dijo antes de volver a hablar con Pat.
-Pero qué pasó exactamente?
-Recuerdas la despedida de solteros que casi no había podido dormir y más la resaca pues ayer me moría de sueño a cada rato y con la fiesta de anoche volví a tomar de más. Lo último que recuerdo es que lo estábamos haciendo en una posición rara por culpa de un libro que tenía, bueno en realidad Wai era el que estaba haciendo todo el trabajo y no recuerdo más. Ni siquiera recuerdo bien el momento. Me siento súper mal y además siento como mi omega me odia. No sé qué hacer. - explicó Korn.
-Sí tan arrepentido estás deberías ir a hablar con él y explicárselo todo.
-Ya intenté hablar con él, pero resultó de esta forma. Le dije que tenemos que salir en un rato para ir a nuestra luna de miel y lo único que hizo fue tirarme un zapato a la cabeza.
-Vaya. Creo que vas a tener que suplicarle bastante para que te perdone.
-E incluso aunque diga que te perdona, luego de esto, cada vez que se peleen te lo echará en cara. - dijo su padre mientras aparecía a su lado para servirse un poco más de café. - Pobre hijo mío, cavaste tú propia tumba. - dijo antes de volver con su esposa.
-No le hagas caso. Simplemente cuando vayan arriba dile "quieras o no, tendrás que me perdones" lo llevas hasta la cama de la manera nupcial y le das todo lo que no le diste anoche. - le aconsejó Pat.
-Tú crees?
-Claro. Solo no dejes que salga de esa habitación sin que te haya perdonado o tú padre tendrá razón, además no pueden empezar una luna de miel de esta manera.
-Tienes razón. Tengo que hacer que me perdone haciéndole tener un buen orgasmo. Me suplicará que lo vuelva a embarazar y no podrá caminar por días.
-No me interesa saber los detalles de tú enferma imaginación. La idea solo es que le pidas perdón por lo que no hiciste anoche, no que lo mates con tú polla. - dijo Pat dándole el último sorbo a su café.
-No pensaba matarlo... Solo alimentarlo con mi leche. - dijo Korn con una sonrisa en los labios haciendo que Pat le escupa su café en la cara.
-Perdón. - se rió Pat antes de ir a buscar una bandeja para prepararle el desayuno a Pran.
Korn se dirigió tímidamente hacia la mesa donde se encontraba Wai.
-Hola... - dijo con algo de miedo.
-Qué quieres?! - contestó Wai enfadado.
-...Quiero... Que me perdones.
-Haberlo pensado antes de arruinar mi noche.
-También fue mi noche.
-En serio? Y dime Korn. Qué tal estuvo tu noche de bodas?
-Metí la pata. Lo admito.
-No metiste solo la pata, metiste todo tú cuerpo. Solo teníamos una noche de bodas y era muy importante para mí. Lo sabías.
-Lo sé... Y lo estuve deseando por meses desde que te pedí matrimonio. Fui un tonto.
-Lo fuiste.
-Por eso tengo una idea.
-Qué idea?
-Vamos a la cama.
-Korn! Qué pasa contigo?
-Lo estuve pensando. Aún no pasan las veinticuatro horas desde que nos casamos.
-Y...?
-Entonces aún estamos a tiempo de tener nuestra noche de bodas.
-No es lo mismo. - murmuró Wai con los ojos llorosos mirando hacia las tostadas que estaban sobre su plato.
-No llores bebé. Venga, ponte de pie. Déjame mostrarte que si puede ser igual. - dijo Korn mientras le pasaba su mano a Wai, quien aún dudando finalmente la tomó.
Korn tomó en sus brazos al estilo nupcial a su omega, mientras él se agarraba de su cuello.
-Creo que tengo que llevarte así hasta nuestra cama. Me lo gané por descuidarte después de la fiesta. - dijo afianzando su agarre. - Amigos! Me acabo de casar con este maravilloso omega!! Ahora sí me disculpan tengo que ir a darle su noche de bodas apropiadamente!! - gritó hacia todos los presentes que se encontraban desayunando.
-Creo que ya no tengo ganas de seguir comiendo. - murmuró la madre de Korn a su esposo después de escuchar a su hijo.
Wai se había sonrojado, instintivamente escondió su cabeza en el cuello de Korn mientras esté avanzaba hacia el ascensor para ir a su habitación.
Una vez dentro de la habitación Korn le pidió un momento a Wai para ponerse su esmoquin rápidamente e ir a cerrar las persianas y encender los veladores y así simular que era noche.
Cuando volvió a la cama Wai llevaba puesto su traje de bodas y estaba tumbado sobre la cama con un libro rojo en sus manos.
-Espera que me des mi noche de bodas apropiadamente. - dijo Wai con una sonrisa.
Finalmente utilizarían el libro que Pran le regaló como regalo de bodas.
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Motel de citas
RomanceEn un mundo donde el dinero manda, y los omegas son comercializados como esclavos para el uso y disfrute de los alfas de clase alta, un joven alfa conocerá a su pareja destinada pero su pareja es un omega marcado por uno de los mafiosos más temido y...