Despedida de solteros 3

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Pran y Wai estaban mirando hacia la mesa donde Malee y sus amigos estaban apostando todo el dinero de Wai, en qué momento le habían quitado todo lo que llevaba encima y lo habían dejado de lado, no tenía ni idea.

-Como deje que ellos se lleven todo mi dinero... Korn me va a matar. - se lamentaba Wai al lado de su amigo.

-Te dije que nos tendríamos que haber ido hace rato. - le reclamó Pran a su lado.

-Lo sé. No hace falta que me lo digas... Pero... Ahora qué hacemos? - preguntó preocupado Wai, ya que por más que había intentado hablar con Malee para que le regrese su dinero éste simplemente lo había ignorado haciendo como si no existiera.

-Tranquilo. A mi amigo nadie le hace esto. - dijo Pran enfadado. Agarró la mano de Wai y salieron a la sala central.

-A dónde vamos? Los vamos a dejar ahi?

-Tengo algo en mente. Si algo aprendí del motel es que los alfas creen que con el dinero pueden comprarlo todo y los betas hacen lo que sea por un poco de dinero.

-Bien. Y el plan es?

-Mira hacia aquella mesa de allá. Ya hablé con el beta del blackjack. Está dispuesto ayudarnos a ganar mientras que le dé lo que le prometí. - dijo Pran mientras miraba hacia el rincón donde estaba Malee restregándose contra el alfa.

-Cuándo hablaste con él? - cuestionó Wai.

-Cuándo estabas entretenido dejando que ellos roben. Pensaba desafiar de todos modos a ese tonto alfa que Malee está usando como marioneta.

Después de haberlo planeado todo bien esperaron que el grupo dejara de apostar en el Pocket y pasarán por su lado.

-Hey tú. El estúpido alfa de Malee. - dijo Pran levantando un poco su voz haciendo que todo el grupo se diera vuelta a mirarlos.

-Cómo me llamaste? - dijo el alfa notablemente molesto haciendo que Pran sintiera como se le erizarán el pelo de todo el cuerpo debido al miedo que sintió en ese momento.

-Solo dije la verdad. O acaso crees que podrías ganarme en algo siquiera? - cuestionó casualmente Pran tratando de ignorar que estaba hablando con un alfa y pensando en su amigo.

-Quieres ver cómo te destrozo en menos de un minuto. Tú no me llegas ni a la suela de los zapatos. - se rió el alfa.

-Entonces... Que te parece si apostamos en ese juego de allá? - preguntó mientras hacía como si recién notaba el juego del blackjack donde la mesa estaba libre para ellos en ese momento.

-Esto va a ser muy fácil. Solo con una partida te voy a destrozar y desearas nunca haberme desafiado.

Una vez en la mesa, el beta les dijo que hicieran sus apuestas. El alfa fue el primero en hablar.

-Mi apuesta va ser todo lo que el niño bonito traiga con él. Quiero ser testigo de cómo pierde todo su dinero en una sola mano.

-Dudo que puedas igualar todo el dinero que tengo. Por qué no apuestas todo lo que llevas. Yo puedo conseguir ese dinero con facilidad. - dijo Pran hablando seguro.

-Alfa, no lo haga. No podemos arriesgarnos a perder tanto. - le susurró Malee al alfa.

-Si tienes miedo solo observa como gano. - dijo el alfa con aires de grandeza.

-Wai. Dile a Pran que detenga esto. - dijo preocupado Malee.

-Pero no podemos detenernos tan pronto. Malee aún no probaste apostar contra mi amigo. - le dijo Wai recordando como Malee le había contestado cuando Pran se quería ir.

El alfa había apostado todo lo que llevaba encima. Y tal como había dicho Pran, igualó su apuesta. Al finalizar la partida Pran había conseguido duplicar su dinero inicial mientras el alfa lo había perdido todo.

-Eso no es posible! - rugió enfadado el alfa. - Malee, dame tú dinero. - bramó con su voz de alfa.

El omega simplemente agachó la cabeza y le entregó la bolsa con el dinero que previamente había conseguido obtener de Wai. Y tal como había pasado la primera vez Pran ganó mientras el alfa se quedaba en cero.

-Maldito omega. Me las pagarás! - dijo el alfa poniéndose de pie molesto.

-Señor, aquí no se permiten peleas, si muestra algún tipo de molestia nuestro personal de seguridad deberá sacarlo de la instalación. - habló tranquilo el beta.

Malee había conseguido arrastras al alfa fuera de su vista haciendo que por fin respiran tranquilos.

-Te espero en el café bar de enfrente cuando acabé tu turno. - habló Pran murmurando para que solo lo escuchara el beta. Se aseguró de mirar hacia abajo para que las cámaras del techo no lo vieran hablando con el beta.

-Aún no entiendo cómo pudiste convencer a ese beta para que nos ayude. - habló eufórico Wai por la jugada de su amigo.

-Ya te lo dije. Le ofrecí mucho dinero. Más de lo que puede ganar en un año trabajando a diario aquí. Digamos que es ilegal que lo que hicimos pero no podía dejar que esas personas se quedarán con tú dinero. - dijo Pran mientras aspiraba el olor de la taza de café entre sus manos.

-Aquella señora me está mirando extraño desde que entramos. - comentó Wai mirando hacia la esquina del café bar.

-Eso es por lo que sigues llevando en la cabeza. - dijo Pran señalando el cotillón que aún seguía en su cabeza.

-Rayos. Lo había olvidado. - dijo Wai sacándoselo rápido mientras se comenzaba a poner rojo.

Pran solo pudo reírse, antes de recordar lo más importante en ese momento. Mañana finalmente se casaría con Pat.

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Volví?
No me morí ni nada, gracias a quien preguntó.
Estuve complicada con la facu, ya la próxima semana presento la tesis así que lo tenía que acabar sí o sí estos días.
Pero por fin traigo un nuevo capítulo que espero les guste.
Nos estamos leyendo! 😊✨

Motel de citasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora