Motel de citas

Cambios de humor

Pran estaba tumbado sobre el sofá cuando escuchó como Pat gritaba su nombre. Se rió pensando que ya habría descubierto las almohadas mojadas, pero su instinto le alertó en el momento en que escuchó los pasos de Pat caminando deprisa por el pasillo por lo que decidió hacerse el dormido, cuando lo sintió llegando a su lado se mordió el interior de su mejilla para no reírse.

Sintió como Pat agarraba el mando a distancia de entre sus manos y escuchó como la televisión se apagaba.

-Debería llevarte arriba y ahogarte con esa almohada. - lo escuchó decir. - O pegarte en la cabeza con mi libro.

Pran no pudo contener más la risa al recordar lo que le había hecho al libro.

-Estás despierto! Maldita seas Pran, arruinaste completamente mi habitación! - le gritó al darse cuenta que lo estaba escuchando.

-Me da igual. - dijo Pran abriendo los ojos y mirándolo fijamente. - Todo fue tú culpa!

-Por qué fue mi culpa?

-Me encerrarte en esa habitación toda la tarde. Te lo mereces. - dijo cruzándose se brazos e inflando sus mofletes.

-La próxima vez te encerraré en el baño. Así no vas a poder hacer más desastres.

Pran se volvió a reír al recordar cómo dejó el baño.

-Ya está bien! - dijo enojado Pat mientras lo levantaba del sofá y lo cargaba como si fuera un costal de papas y comenzaba a caminar hacia las escaleras.

-Bájame! Bájame! - gritaba Pran mientras con sus manos en puños le pegaba en la espalda.

-Calmate! - dijo mientras lo dejaba en el suelo.

Pran le dió una patada en la pantorrilla y salió corriendo hacia la terraza mientras escuchaba a Pat gruñir por el dolor del golpe.

Pat sentía como sus colmillos se hacían presentes mientras veía como Pran corría hacia afuera. Sus ojos se estaban volviendo rojos de furia y su alfa estaba intentando controlarlo.

-Pran! Ven aquí! - llamo enfadado el alfa utilizando su voz de mando.

Al poco tiempo Pran se encontraba caminando hacia él con la cabeza agachada y los ojos llorosos. Era la primera vez que Pat utilizaba su voz de mando para controlarlo.

-Sabes que el comportamiento que estás teniendo es muy infantil cierto?

Pran no le respondió nada, pero Pat podía sentir que la respiración del omega era Sonora y rápida por lo que dedujo que se encontraba enfadado.

-Quiero que subas arriba. Arregles todo el desastre de la ropa. Que cambies todas las sábanas de la cama. Y que no hagas más desastre. Podrás? - preguntó intentando mantener la calma.

Pran levantó su vista y la fijó en los ojos del alfa, su labio inferior temblaba por el llanto que estaba intentando contener y una lágrima solitaria rodó por la comisura de su ojo.

-Alfa tonto! - le gritó mientras le volvía a pegar una patada en la pantorrilla. Intentó salir corriendo nuevamente pero Pat fue más rápido que él y lo agarró fuertemente del brazo.

Pat sabía que aquellos actos no eran propios de Pran y que quien le hacía actuar de aquella probablemente era su omega que se encontraba frustrado por no poder acudir al llamado del alfa, por lo que Pat decidió que para tratar con el omega necesitaría la ayuda de su alfa.

El alfa atrajo al omega contra su cuerpo y lo envolvió con ambos brazos. Pran pataleaba y se resolvía intentando escapar.

-Debería darte una lección por haberme pateado. - le susurró su alfa al oído haciendo que el cuerpo de Pran se congelara. - Ya te vas a calmar? Pequeño omega travieso.

El omega giró su cabeza hacia el alfa y éste pudo ver los ojos azul turquesa que lo miraban fijamente.

-Quiero al alfa... - gimoteo el omega mientras se removía entre sus brazos.

El alfa comenzó a darle pequeños besos repartidos por su rostro haciendo que el omega se relajara y se dejará mimar. Al poco tiempo el omega comenzó a enseñar su cuello a modo de sumisión haciendo que el alfa se animara a mordisquearlo bajo el mentón mientras sus manos se iban metiendo bajo la remera del menor, acercó sus dedos a uno de los pezones y comenzó a pellizcarlo haciéndolo soltar suspiros de placer, al poco tiempo todo el lugar se encontraba inundado de feromonas de deseo por parte del omega.

Pat sabía que lo que su alfa le estaba haciendo a Pran estaba mal ya que en esos momentos su omega lo estaba dominando, y a diferencia de la otra vez en esta ocasión él era muy consciente de lo que estaba sucediendo, su alfa quería tomarlo y el omega parecía necesitar de un alfa.

En ese momento a Pat se le pasó la morbosa idea por la cabeza de que sería genial que el omega de Pran necesitara de su alfa en vez de buscar a cualquier otro. Que llorara por su ausencia y reclamara de su atención. Con aquel pensamiento en mente dirigió su mano a la entrepierna de Pran y comenzó a masajearlo por sobre la ropa.

El omega comenzó a emitir pequeños gemidos que encendieron aún más al agitado alfa, le quitó el pantalón y lo acostó encima de la mesa. Sin ninguna pena llevó sus labios al miembro del más joven y comenzó a chupar la punta mientras sus manos amasaban su trasero. Poco a poco comenzó a moverse de arriba abajo, chupando y lamiendo toda la extensión de Pran y con sus dedos comenzaba a jugar con su entrada, entonces Pat recordó que había guardado algunas cosas que había comprado en la farmacia la última vez. Con una de sus manos comenzó a masajearle testículos haciendo que en poco tiempo escuchará un gemido salir del omega mientras sentía como su espalda se curvaba hacia atrás corriendose en su boca.

-Espera aquí. - dijo el alfa con voz de mando mientras iba a su despacho y sacaba de una caja unos condones, vaselina y el anillo vibrador.

De regreso se fue quitó toda su ropa, y se colocó en su lugar el condón. Pat se relamió los labios al ver al omega esperándolo sumisamente con las piernas abiertas, llegó hasta él y lo miró a los ojos, el omega levantó las manos y lo tomó del cuello para acercarlo y comenzar a besarlo. Pat le siguió el beso mientras con sus manos agarraba el miembro flácido de Pran y le comenzaba a colocar el anillo vibrador. Una vez colocado lo encendió y rompió el beso para ver como poco a poco la estimulación comenzaba a ponerlo duro nuevamente. Agarró la vaselina y lo untó a lo largo de su miembro mientras miraba a los ojos al omega.

-Alfa. - lo llamaba delirando el omega cuando comenzó a introducirse lentamente dentro de éste.

Una vez dentro no espero ni un segundo para comenzar a penetrarlo rápido y duro, quería que el omega sintiera su necesidad de tenerlo y de poseerlo. Sus manos jugaban con sus pezones mientras él entraba y salía de aquel acogedor agujero.

El omega se sentía desfallecer, las estocadas del alfa iban a parar a su punto dulce mientras la vibración en la base de su pene lo hacía sentir que estallaría pero sin dejar que eso pasara.

-Alfa. No puedo más. - dijo cuando se sintió completamente agotado.

En ese momento Pat le quitó el anillo y lo sustituyó por su mano. Al poco tiempo sentía como su miembro era estrujado por la entrada de Pran mientras su mano se manchaba de su esencia. Aquello hizo que él también se viniera. Con sus colmillos listo vio como el omega le enseñaba el cuello. Y Pat y su alfa disfrutaron el desgarrar la piel y dejar su marca en aquel lugar.