¿Alguna vez te haz topado con alguien que entienda todo tu sufrimiento?
Alguien que entiende tus penas y tus peores momentos , que los sana y los convierte en tu motor para seguir.
Ella definitivamente era eso para mí.
Ojalá hubiera sabido eso an...
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— ¿Aun falta mucho?
—Aproximadamente unos 40 minutos pero con esta lluvia tendremos que esperar un poco. Solo debemos seguir hacia el noroeste, cuando pasemos las ruinas de un castillo será el siguiente pueblo que nos encontremos.
— Si estamos tan cerca creo que podríamos seguir así, es solo una pequeña llovizna— me dijo.
Estábamos cerca del poblado de Ragako , mi idea era parar allí por unos minutos y seguir después de que pasara la lluvia pues aun me ponía un poco nerviosa cabalgar con este clima. Me sudaban las manos y comenzaba a tener dificultades para respirar, tenia que calmarme o no podría llegar en una pieza.
—Puede que tengas razón— dije y di un pequeño toque con los pies al caballo para acelerar su trote, el hizo lo mismo.
Así transcurrieron 30 minutos en silencio en los cuales yo hacia mi más grande esfuerzo por mantenerme serena, pensé que había progresado en cuanto a mis pequeños ataques de pánico pues en las últimas veces lograba ser al menos funcional pero esta vez se siente diferente y tal vez podría ser por la compañía que tenia.
Puede que Erwin a este punto este furioso por que Levi básicamente se escapo de su cuidado, habría consecuencias por ese acto y definitivamente no quería pensar en eso, se lo dejaría a mí yo del futuro.
—Ya estamos llegando, de ese lado se puede ver una de las entradas del pueblo, mi casa esta un poco a las afueras—le dije y giramos hacia la derecha, me ponía un poco nerviosa el pensar que diría mi madre cuando llegara con el.
—No es como que me importe pero ¿estas bien? parece que estas a punto de vomitar— Levi se posiciono a mi lado mientras bajábamos el trote cruzando un umbral de piedra que daba la bienvenida al poblado de Harz; trague el nudo que tenia en la garganta.
—No me gusta la lluvia— conteste sin mas.
Pasábamos por algunas de las calles del pueblo, era un lugar un poco rustico a comparación de Jinae, que era la villa mas cercana a la legión. Este sin embargo parecía estar atrapado en el tiempo y un poco menos modernizado pero era bastante acogedor a mi parecer además tenia unos paisajes hermosos del valle.
— Después de ese sendero llegaremos a mi hogar— señale y el solo hizo un ruido de aprobación.
Llegamos a la pequeña cabaña de dos pisos que se encontraba en la cima de la colina, es de las últimas viviendas del pueblo y detrás de ella se alzaba un espeso bosque que se extendía hasta Dauper.
—Que raro, parece que no hay nadie en casa- dije mientras bajaba del caballo — sígueme el establo esta en la parte de atrás.
El imito mi acción y camino detrás de mi pasando por un lado de la casa; el establo era algo mas grande para la cantidad de animales que poseían mis padres, junto a el había un pequeño huerto con diferentes hortalizas y frente se extendía un claro que separaba la modesta granja del bosque, Orión es feliz de tener todo ese espacio libre para correr y mi padre lo cuidaba como si fuera de cristal, el amaba a los animales con locura. Saque las llaves de mi bolsillo y abrí las puertas del establo alterando un poco a los animales que había dentro. Encendí la pequeña lámpara de aceite que se encontraba junto a la entrada.
