Iron Aid || FANFIC DE MARVEL||

30. Llanto

Sofía

—Oye, tranquila— fueron las primeras palabras de una voz amiga que no escuche en mucho tiempo. 

Lo último que recordaba era una conversación casi unidireccional con Michael, Michael Rogers, que sorpresa. 

Desperté de golpe pasando de acostarme a sentarme en ese mismo instante tomando tanto aire como me fue posible escuchando ese par de palabras del dueño de brazo de vibranium. 

>>Llevas inconsciente mucho tiempo, pero ya estás bien, a salvo— agregó poniéndose en pie de la silla a los pies de la cama y avanzando hacia mi. 

Observé todo el lugar intentando averiguar donde me encontraba, tenía una intravenosa, un respirador y un par de bolsas de diversos líquidos conectadas a la intravenosa, la sala era azul celeste casi blanco y había flores, globos y peluches alrededor de todo el lugar. ¿Cuánto tiempo llevaba inconsciente? 

—¿Estoy en un hospital?— pregunté mirando a Bucky finalmente, tenía el cabello ligeramente crecido al igual que su barba y un par de ojeras marcadas. 

—En el hospital de la base de los vengadores, sí— respondió dirigiéndose a un botón qué se encontraba en la cama del hospital. —Tu padre considero que un hospital convencional no era seguro 

—¿Dónde está él?— pregunté un tanto ansiosa, por la mirada que Buck me dirigía podía saber que a pesar de estar "bien y a salvo" no era suficiente y aún me encontraba en mal estado. 

—Desde que te secuestraron ha estado a cargo de la compañía junto con Peper— respondió tranquilo —Casi todos están ocupados con algo 

—¿Y tú?— pregunté notando como la misma morena de la vez anterior entraba en compañía de un doctor.

—Alguien debía estar aquí vigilando si había señales, me ofrecí— respondió haciéndose a un lado dejando que el doctor observará los diversos paneles a los que me tenían conectada. 

—En verdad me amas— dije con un claro sarcasmo y ambos reímos, simplemente quería relajarme del ambiente lúgubre qué se había formado en esa nueva ala de la base, un hospital. 

El doctor hizo una seña y todos guardamos silencio al momento en que revisaba las lecturas de las diversas máquinas y anotaba algo en sus papeles, seguido de ello me hizo un par de preguntas y el chequeo de rutina al qué me había acostumbrado desde que Steve y Natasha me entrenaron. 

—Todo luce estable, así que simplemente te continuaremos dando las medicinas qué te hemos suministrado, esta vez serán en tabletas y deberás tomarlas, así mismo dejaremos de darte nutrientes vía intravenosa y tendrás que comer 

>>Haré una lista de indicaciones para la enfermera y ya que ustedes dos han estado cuidando casi todo el día 

El doctor miró fijo a la morena y a Bucky, ambos asintieron un un semblante serio y preocupado, salió de la habitación el médico, dándome un vistazo rápido pero que expresaba mucho más la de ojos violetas y quedando Bucky en su interior, junto a mi. 

—Llamaré a tus padres primero, luego a los demás— dijo sacando su horrendo teléfono del 2006. 

—Espera— pedí levantando la mano, estaba cansada, triste, me sentía medianamente muerta —Por ahora, quedémonos así ¿Puedes? 

Sus ojos azules pronto se preocuparon y sin preguntar la razón de mi petición asintió y guardó su celular quedándose en la silla por unos minutos, guardamos silencio, no había nada que decir, o tal vez había demasiado pero ninguno de los dos encontraba la forma. Permanecemos así, viéndonos fijo, como en un duelo de miradas, él lo sabía, lo supo y yo lo vi cuando su rostro cambió de diversión a seriedad y luego a preocupación, de lo que no fui consciente fueron las lágrimas qué comenzaron a recorrer mis mejillas, simplemente las limpie confundida.