XXIX

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Capitulo 29

Tom decidió que ya había visto demasiado, y al salir se dio cuenta de Cassiopeia estaba sudando y respirando agitadamente.

Al entrar en su mente ella vio lo mismo que el, reviviendo algunas de las atrocidades que Walburga le hizo hacer desde temprana edad.

Al ver que estaba empezando a despertarse, este cerro los ojos haciéndose el dormido. Ni siquiera el entendía el por que estaba haciendo esa estupidez de niño de primaria. Pero era por que se sentía culpable de haber revuelto los pensamientos de su única amiga y futura prometida, y no quería hacerse cargo de el daño que sabía que le había causado.

Luego de unos minutos más en los que Cassiopeia se movía murmurando cosas aun dormida, se levanto de golpe, al notar que había sido una pesadilla hundió su cabeza en sus piernas bufando con fastidio, solo para notar que tenia la camiseta empapada en sudor.

Bufando se quito la camisa y se dirigió a su ducha.

Tom, dejo de fingir luego de un rato por que se quedo dormido de verdad, sin dejar de pensar en todo lo que había vivido la mujer que tenia a un lado. Despertó al sentir algo sobre su pecho.

Cassiopeia se había salido del baño ya con su uniforme de Hogwarts puesto, y lo primero que se encontró fue a Tom durmiendo en su cama, de SU lado de la cama. Se tiro en cima de el solo para molestarlo y para que se cambiara de lugar.

Tom: ¿Que carajos haces Cass?. -Pregunto con voz ronca sin abrir los ojos.

-Estas en mi lugar de la cama. -Dijo esta con voz de niña chiquita jugando con los rizos que se habían formado en el pelo de Tom.

Tom: Duerme del otro lado. -respondió con simpleza disfrutando de como jugaban con su cabello.

-No puedo.-Dijo hablando con la misma voz y haciendo un puchero justo cuando Tom abrió los ojos.

Tom: No pienso moverme de aquí Cass.-Dijo volviendo a cerrar los ojos y sonreír al ver que Cassiopeia se había quedado callada. Son risa que se borro al sentir como se ponía cómoda sobre su pecho. -¿Que haces?-Pregunto abriendo los ojos solo para verla a ella con los suyos cerrados mientras seguía jugando con sus rizos muy cómoda sobre Tom.

-Tu no te vas a mover. Y yo ya me acostumbre a este lado de la cama. así que o te mueves tú, o tendrás que aguantarme. Mira que Sirius decía que hablo dormida.... aunque a veces soy karateka en mis sueños y lanzo golpes y patadas.-Se le escuchaba en la voz el cansancio.

Tom: Bueno, esta bien, yo me cambio de lado.-Dijo después de un rato, pero para ese momento, Cassiopeia ya estaba en el quinto sueño, y no había manera de que alguien pudiera alcanzarla.

Tom la vio por unos segundos algo tenso, pero luego de un minuto se aferro a ella abrazándola por si llegaba a cumplir su palabra de golpearlo. Pero en el fondo sabía que eso no tenia nada que ver.

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Ambos habían cambiado de posiciones en menos de una hora y ahora Cassiopeia estaba abrazando a Tom como un coala y Tom estaba boca a bajo con una pierna flexionada, y tenía agarrada una almohada con ambos brazos.

Cuando empezó a entrar el sol por la ventana Tom se volteó bruscamente pensando estar solo en SU cama, pero no era así, y lo descubrió por un golpe seco que sonó en toda la habitación seguido de un quejido.

-Mierda-Gruñó agarrándose la cabeza.

Tom se despertó rápido buscando a Cassiopeia quien seguía tirada en el piso.

Tom: ¿Tas bien?.-Pregunto algo divertido por la escena.

-Si... nada más me rompí el coco.-Dijo sarcástica.

Tom solo sonrió y se acostó con ella en el piso.

Tom: Buenos días.-dijo con la voz ronca en el oído de Cassiopeia.

-Bueno el mamonazo que me di por tu culpa Marvolo.

Tom: ¿Que es mamonazo?

-Ni idea, se lo escuche a una tipa en la calle después de que se pegara con una puerta de las transparentes. Me gustó y se me pegó.-dijo encogiéndose de hombros.-Deberías preocuparte más por mi.-Dijo dramáticamente jugando.-Me sentí voladora de Papantla. un poquito más fuerte y me sacas por la ventana.-Tom soltó una carcajada junto con ella y luego procedió a hablar.

Tom: No seas exagerada, fue con cari...-Se quedo cayado al ver bien a Cassiopeia.-Cass estas sangrando.

-Ahorita cicatriza, no ves que soy una sanguijuela.-ambos se quedaron callados mirando al techo. -Me dio hambre.

Tom: ¿Que vas a comer Cass?.

-No lo se, pero tengo que irme ya.-el la miró confundido.-El olor de tu sangre, y tu corazón bombeando me dan muchísima más hambre.

Tom: Ve a tragar, yo te cubro con tu mami.

-Gracias Volo.-le dio un beso en la mejilla y se fue corriendo a velocidad vampírica.

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Cassiopeia volvió entrando por la ventana aun con restos de sangre en la boca, y black-veins debajo de sus ojos que se fueron una vez que lamió su labio quitando la sangre de estos distraídamente.

Tom: Ve a lavarte cariño, ya casi se van a la estación.-Le dijo Tom sentado leyendo en su cama. -¿Que tal la casería? -Preguntó luego de que ella saliera del baño con la cara limpia.

Cassiopeia hizo una mueca y se encogió de hombros.

-Los venados son mas dulces que los conejos.

HIGH ENOUGH ☆ Tom Riddle Donde viven las historias. Descúbrelo ahora