Capítulo 5- El Suéter

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Holam, no olviden votar, comentar y compartir esta historia. Aquí el capítulo 5, déjenme decirles, que se vienen cosas buenas en el próximo capítulo. Espero les guste este.

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Capítulo 5.

Ya habían pasado 2 semanas desde aquella vez que fui al apartamento de Thiago y le dije lo de... Ya saben que le dije. Al fin pude entregar todos mis trabajos y los profesores me designaron calificaciones- todo gracias a Gerardo- saque varios nueves, como dos ochos y unos diez, empiezo a creer que no soy tan mensa en la escuela como creía. Mis padres siguen trabajando todo el día y yo me sigo escapando a ese árbol, de hecho, pude notar que desde ahí observo claramente el apartamento de Thiago, tampoco piensen de más, no soy una acosadora, yo solo voy a ese árbol a dibujar y relajarme, durante estas dos semanas, pude dormir al menos 3 días, eso es un avance, ¿no?, siendo sincera, desde ese día que fui a su apartamento no lo eh visto entrar ni salir de la escuela.

- Emmy, ya vámonos- la voz de Gerardo me sacó de mis pensamientos.

- Voy.

Gerardo había ido por mí para ir a la escuela juntos. Era al menos 40 minutos antes de la hora de entrada, pero según él "no quiere ir corriendo". Salimos de mi casa y me tomó la mano llevándome él. Ahora que lo pienso, hace como 2 días que no encuentro mi lapicera- la que llevo para dibujar- y se me hace raro, porque siempre la guardo.

- Gerardo, ¿podemos ir a otro lugar rápido, antes de la escuela?

- ¿Para qué?, se nos va a hacer tarde, después vas.

Me detuve haciendo que él se girara a mí y le hice un puchero. Él suspiró.

- Bien, vamos- concluyó.

Esta vez, yo lo llevaba a él, lo llevé hasta el árbol y le dije que buscáramos una estuchera, los dos empezamos a buscar, pero después de 10 minutos, ya estábamos jugando, él me correteaba y yo corría para que no me atrapara- lo sé, parecíamos pequeños- pero me gustaba jugar con él.

- Ay, creo que la encontré- dije sentándome en suelo después de caer como costal de papas por tropezarme con la misma estuchera.

- Perfecto, ahora vámonos.

Miré hacia arriba en el árbol y había algo raro sobre una rama.

- Espera.

- Vamos, Emmy.

Lo ignoré por completo y comencé a trepar el árbol.

- Jaja, Emmy, baja de ahí, te vas a caer.

Al llegar a esa rama, vi que era un suéter negro, lo tomé y bajé del árbol.

- Qué asco, Emmy, tira eso, no sabes de quien es, ¿qué tal que es de un borrachito o algo así?

Acerqué el suéter a mi nariz y... ¡Un momento!, yo conozco ese aroma, ¡Es de Thiago!

- Se de quién es- dije aún oliéndola.

- Bien, guárdala entonces y después se la das a esa persona, si quieres te acompaño, pero por lo mientras ya vámonos.

- Ok, señor puntual, ya vámonos.

Guardé el suéter en mi mochila y fuimos a la escuela, por suerte no llegamos tarde, la profesora Stony me dijo que mi cara se la hacía familiar a la de otra persona, sepa a quien, pero en fin... Aún hay clases y Gerardo me lleva de aquí para allá, es realmente lindo, solo que... hay momentos en los que me recuerda mucho a mi hermano, él solía cuidarme mucho, bueno ya saben y yo no quiero ponerme sentimental.

La profesora Stony nos dijo que teníamos que hacer un trabajo en equipos, pero por número de lista, hací que me tocó con una niña, creo que llama Lisa y con Gerardo. Tenemos que hacer un trabajo de una maqueta y yo puse mi casa para que ahí la hiciéramos y ellos dijeron que sí. Al final conocí a esta chica y me calló bien no es empalagosa, sabe en qué momento apartarse y entiende si no quieres hablar de algo, Lisa es interesante, no la tomaría como mi amiga, pero me cae bien, además noté que Gerardo le echaba el ojo muy seguido y le empecé a hacer burla por ello.

- Emmy, ya es hora de salida- Gerardo me hizo salir de mis pensamiento como siempre.

- Si, vamos.

Al salir, busqué a Thiago para darle su suéter, pero no lo vi.

- ¿Estas bien?- me dijo Gerardo.

- Sí, claro- dije dejando de buscarlo.

- Bien- dijo algo desconfiado de mi respuesta.

- ¿Sabes cómo haremos el proyecto?

- Pienso hacerlo del sistema solar, a menos que quieran otro tema Lisa y tú.

- Me parece bien el tema, pero... Lisa...- le hice una cara de la cual entendió lo que quería decir.

- ¡NO!, no me gusta- se sonrojó, era claro que si le gustaba.

- Vamos- le hice un puchero.

- Vamos, pero a tú casa, para que nos pongamos de acuerdo en el proyecto.

Llegamos a mi casa y como de costumbre, no había nadie, por lo que fuimos a mi habitación, me acosté y él se sentó a un costado de la cama.

- ¿Tú haces la maqueta, Lisa busca el tema y yo lo presentó?

- ¿Ah, sí?- solté una risita- ¿por qué nosotras hacemos el trabajo y tú solo lo presentas?

- ¿Qué propones que haga?

- Tengo una idea...

- Tus ideas me dan miedo.

- Es para el proyecto- giré los ojos.

- Vale.

- Tú harás los esquemas y todo tipo de dibujos, a fin de cuentas, eres mejor dibujante que yo.

- Vale, creí que sería algo más difícil.

- Más aparte, vas a presentarlo- agregué.

- Ok- dijo riendo.

- Hay que ponernos de acuerdo con Lisa, para ver cuando lo hacemos.

- Si, voy a conseguir su número y le hablaré.

- Claro.

Bueno, él si tiene teléfono, yo no porque prefiero la privacidad y vivir los momentos, no soy muy fan de las redes sociales y todo eso, por eso no tengo teléfono- que sí los se usar, claro- mis padres si tienen por sus trabajos.

Gerardo y yo estuvimos toda la tarde haciendo tarea y riendo cada 20 segundos. No recordaba lo divertido que podría ser convivir con los demás o en mi caso, con Gerardo.

La verdad, espero ver a Thiago algún día, digo, para devolverle su suéter, ¿para qué más?

Para pasar el rato con él, quizá.

Puede ser, pero por ahora, solo quiero darle su suéter, ¿qué tal que se muere de frío?, bueno, no creo que solo tengo un suéter.

La Estrella Que Nunca Se Apagó- TERMINADA ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora