Alaia: Reina Italiana ✴️[Terminada]

•2•

Estoy en mi pequeño espacio.

El verano estaba entrando, las navidades habían pasado dejando consigo un mar de tristezas. Caminé a la cocina lavando mis manos mientras preparaba un café con leche.

El sonido en mi puerta me sobresalto, cerré el fregadero y me encamine a la puerta al abrirla no había nadie, mire a ambos lados ya que al estar en el primer piso de la casa de mis padres me daba más visibilidad a esas horas no había nadie por las calles pasaban más de las dos de las tardes el sol era insoportable y no fui al trabajo ya que era mi día libre, tan solo había una piedra quizá con la que tocaron la puerta y en el suelo una rosa azul.

- Otra?- me acuncliye y la tome.

La mire detenidamente, el azul cielo era tan hermoso y atrayente.

Me levanté y volví a cerrar la puerta.

Otra rosa azul y sin nada de nota, con está sería la segunda que resivia cada mes desde que había llegado a mi país. Lo había relacionado con Demian mis sentimientos volvieron a flores para luego volver a caer en picadas hace unos días cuando recibimos un arreglo con el pésame.

<< Nuestro mayor consuelo y apoyo.

Familia Ivanovic Linkispa>>

Si, como oyen quizás Demian quiso reafirmar su apoyo de tal manera indicando cuan feliz se encontraba. Ese día quise gritarle barbaridades y que dejara las pendejadas que hacia, sin embargo tan solo no podía darle el gusto de verme muy afectada.

Y vamos chicas el tramo era largo no creen?

Me senté en la pequeña mesa cuando me disponía a revisar la libreta volvieron a tocar la puerta.

Demonios tan solo no quería tener que ver a nadie hoy, solo quería estar con la soledad de mi pequeño cuarto.

Los golpes no cesaron y me levanté molesta.

- Dios gracias antes de.- indico una prima lejana muy lejana.

Entro y se sentó en la mesa mientras me quedé parada allí viendo como de la nada su familiaridad hacia mi, cuando jamás habíamos tenido trato alguno.

Porque?

Bueno mi tía Julia era demasiado envidiosa y muy chismosa por ello mi madre Amalia se había alejado de ellas. Ahora me encontraba en esta situación un poco incomoda por la manera en que quebranto mi tranquilidad.

Tranque de golpe y me crucé de brazos.

- Janna estoy esperando?

La chica de tan solo unos dos años menos que yo miro a otro lado en la puerta. Volví abrir la puerta está miró y con mi mano libre le señale la salida.- Si no vas a decirme en qué andas metida es mejor que te vallas.

Janna vaciló por unos momentos, me miró y luego miro sus manos que estaban en la mesa.- No estoy metida en nada.- sentenció algo molesta.

- Pues no te creo.- me crucé brazos otra vez.- Para jamás hablarme y ahora estás acorralada en no sé qué prácticamente pidiendo resguardo, correr a mi casa escondiendo solo fue un impulso nada mas si claro - agregué con sarcasmo llevando un mano a mi cadera.

Janna se levantó y me miró con desconfianza.- Mamá me está buscando muy eufórica por eso vine acá.

- Y porque te está buscando como León enjaulado.?-

El temperamento de la tía Julia era demasiado volátil e impulsivo si algo no le gustaba o mucho menos le convenció buscaba las manera de deshacer todo poniéndolo tal cual ella le convenciera, con mi queridísima prima Janna no era la diferencia tenía que estudiar y no salir a ningún lado porque podía caer en los bajos mundo del liberalismo, una barriga a su edad?