𝗥𝗘𝗗 𝗥𝝝𝝝𝗠 || 𝖰𝖴𝖤𝖤𝖭 𝗈𝖿 𝖡𝖫𝖮𝖮𝖣

"𝗗𝗘𝝠𝗧𝗛 𝗜𝗦 𝗧𝗛𝗘 𝗪𝝠𝗬"

Corrí con velocidad hasta la casa pero parecía que no avanzaba, la veía a lo lejos y comencé a gritar el nombre Jonathan.

Antes de que pudiera llegar una fuerte explosión me tiró al piso. Me levanté rápidamente y corrí hasta los escombros, en donde Jonathan estaba tirado y sin conocimiento.

— ¡No! — grité con furia.

Tomé de su cuello y comencé a llorar como era de esperarse. Evander, Edeline, y Albert habían llegado al lugar preguntándose qué había ocurrido.

— ¡Fueron Schneider y Brant! — grite con extrema rabia y tristeza antes de que pudieran llegar.

Edeline se quedó parada, analizando lo que había gritado, se dio la vuelta y corrió lejos.

Las llamas a mi alrededor iluminaban el rostro de Jonathan mientras que Albert y Evan miraban de lejos.

Mis gritos podían escucharse a metros, miré por todo el lugar y encontre la chaqueta de Jonathan con una piedra tirada a un lado. Ésta era morada y brillaba mucho.

Evan subió y miró la luz morada.

— La hierba en forma de corazón...

— ¿Que es eso? — pregunté llorando aún.

— Tal vez sea la forma de salvarlo. La robó de Wakanda, es lo que le da las habilidades a T'Chaka...

Rápidamente solté a Jonathan y corrí por la hierba.

— ¿Que tengo que hacer?

— Tienes que sacar su jugo y dárselo, luego lo entierras y esperas a que despierte...

De inmediato coloqué la hierba en una roca y comencé a golpearla desesperadamente con una más chica. Albert me había dado un recipiente y corrió a cavar un hoyo en la tierra de un lado.

Abrí sus labios y deslicé el líquido morado por éstos. Lo tomé de atrás por los brazos y lo arrastre hasta el hoyo en lo que Evan trataba de apagar el fuego. Sus venas se habían puesto moradas y su cuerpo comenzó a temblar.

— ¡Cubranlo! — gritó Evan desde allá.

Albert y yo lo cubrimos con la misma tierra, luego de eso caí al piso y seguí llorando.

Albert se acercó a mí y puso su mano en mi hombro.

— Ayuda a Evan con el fuego. — pedí con la voz quebrada.

Ambos estaban tratando de apagarlo en lo que lloraba sobre Jonathan preguntándome a donde había ido Edeline. Ella había regresado con Brant, lo ayudaba a caminar ya que tenía la pierna rota. Al ver eso me paré enseguida y fui hasta ellos dos, tirando a Brant al piso.

— Danielle... — dijo Edeline.

— ¡No! No te metas en ésto. por su culpa Jonathan está ahí.

— No fue mi culpa, Jason me obligó a atacarte. — respondió.

— Eso no lo decían tus estúpidas risas al golpearme maldito idiota. — tomé a Brant de la ropa y lo aventé lejos, no quería mirarlo.

— ¿En donde está él? — pregunté sin dirigir la mirada a Edeline.

— No lo sé, solo lo vi a él.

De pronto una lata cayó frente a mí y de ella salió un sonido que nos aturdió a todos seguido de una gran nube de humo que me dejó sin vista.

Schneider me ató con una cuerda y tiró de ella fuertemente hasta lograr subirme al jet. No podía mover mis brazos y no veía absolutamente nada, solo sentía como tiraba de mí por la espalda.

Ya que estaba dentro cerró la compuerta y dió un fuerte golpe en mi cabeza, dejándome noqueada en el piso.

Desperté con la luz del amanecer, estaba la compuerta del jet abierta y del otro lado estaba el mismo bosque en el que había tenido ese ataque, Schneider tomó mi cuello con fuerza y se acercó a mí oído.

— ¿Tienes problemas con ésto? Es solo un bosque linda...

Mi rostro estaba en shock, de verdad tenía un trauma con eso.

— No... No lo hagas — susurré con mis labios temblorosos.

Schneider apretó su agarre y tiró de mi cabello arrastrándome en contra de mi voluntad al bosque mientras gritaba.

— Ya tuve suficiente contigo, ¿crees que tienes autoridad en mi o en mis amigos? Estás equivocada linda, no eres más que una misión que cumplimos...

— Te equivocas. — dije con dificultad sin mirarlo.

— Vaya, aún estando así te defiendes... Eres fuerte, pero tu mente es una basura. Das asco...

El pateó mi abdomen para dejarme completamente tirada en el piso.

— ¿Nadie te había demostrado cariño? Seguro toda tu vida fue una mierda, algo pasó para que le tengas terror a mí nombre... Jason. Vamos dilo por favor.

Tomó de mi rostro con fuerza y me miró fijamente.

— Di mi nombre... ¡Hazlo!

— Eres un idiota, los traumas mentales no son un juego... — dije débilmente.

— No me interesa, todo lo que te ha sucedido es tu culpa... La gente se alejara de ti, incluso la muerte es mejor alternativa que estar a tu lado. Eres un peligro, todos te tienen miedo por el simple hecho de ser tú. simplemente le hicimos un favor a tu novio, adelantamos su muerte para no tener que sorportarte.

— Yo no soy el error, lo es mi pasado ¿pero sabes que será peor? Mi futuro... — tomé un cuchillo que guarde desde que me subió al jet y lo clavé en su pierna. Schneider soltó un fuerte grito y yo me puse de pié. Tomé el cuchillo y lo jalé a el de la ropa hasta llevarlo al jet.

— No eres nadie para decir lo que soy o lo que seré. Te haré un favor, no me conocerás en el futuro. Tu muerte será una mejor alternativa que estar a mi lado...

Tomé el cuchillo con fuerza y lo clavé en su mano ya herida, luego lo tiré con fuerza. Había partido su mano en dos.

El soltó un gran grito, caminé hasta el asiento del jet y lo conduje hasta la isla. Salí de la aeronave y encerré ahí a Schneider, tenía planes para él pero primero debía mirar a Jonathan...