"𝗡𝗘𝗪 𝝝𝗥𝗗𝗘𝗥"

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Todos fuimos hasta la base de los vengadores, Wanda estaba sumamente mal y Steve trataba de consolarla ante lo que había sucedido.

Era mi primera vez en ese nuevo lugar así que no estaba muy cómoda con la tranquilidad que había ahí. De pronto Rogers acudió a mí habitación.

— El secretario de estado está esperándonos abajo... — habló el rubio luego de tocar la puerta.

— Seria algo idiota de mi parte decir que no quiero hablar con él, ¿no?

— Lo es... Pero necesitamos acudir, o creo que nos irá peor a todos. — respondió.

Ambos habíamos bajado, estaban todos nuestros compañeros ahí, incluyendo a Stark. — Buenas tardes agente... — habló éste mismo, a lo que simplemente lo miré.

— No es muy sociable. — susurró en respuesta antes de que Ross entrara a la habitación.

Él dijo algunas cosas las cuales sinceramente no me importaban, así que no presté mucha atención mientras que jugaba con un bolígrafo hasta que mencionó algunos de los sucesos más marcados del equipo.

El encendió una pantalla en la cual pasaban escenas de su primera misión juntos en Nueva York

— Washington D. C. — siguió con la lista, mostrando imágenes de la caída de los helicarriers, a lo cual no pude evitar mirar con temor y luego ver cómo Wilson bajaba la cabeza apenado.

— Sokovia... — las imágenes que mostraban era lo mismo que había visto en mi televisor esa vez, no pude controlar mis ganas de sentirme mal al no haber podido estar ahi.

— Lagos. — la mirada de Maximoff se clavó en suelo, lo cual Steve y yo notamos.

— Okay, con eso basta... — habló Rogers cabizbajo.

De inmediato recargué mi espalda contra el respaldo de mi silla un tanto frustrada. — Disculpe, general... Sin los vengadores, si cada una de éstas personas no hubieramos estado en esos acontecimientos... Las consecuencias serian peores a las mencionadas. Hydra iba a asesinar a cientos, y Rumlow tenía en sus manos un arma biológica, eso sin mencionar un apocalipsis de hombres metálicos... — miré a Stark quien ya tenía la mirada sobre mi — Y una invasión al planeta por un dios Nórdico...

— Danielle... No. — susurró Romanoff al verme.

— Los últimos cuatro años han operado con un poder ilimitado y sin supervisión. Un arreglo que al final los gobiernos del mundo ya no desean tolerar. Pero quizá tengamos una solución... — un hombre le extendió la mano con unos papeles, los cuales tomó y los posó sobre la mesa. — Los acuerdos de Sokovia... Aprobados por países los cuales manifiestan que los Vengadores dejarán de ser una organización privada y desde ahora van a operar bajo la supervisión de un panel de las naciones unidas y solo cuando y si ese panel lo considera necesario.

— El equipo se formó para que fuera más seguro el mundo. Y lo hemos hecho así... — habló Rogers.

— Dígame Capitán, ¿usted tiene idea de en donde están Banner y Thor ahora? Si se me pierden dos bombas de treinta megatones créame que habrá consecuencias... Compromiso, seguridad... Así funciona el mundo. Créanme, este es el punto medio.

— Entonces... Hay contingencias... — mencionó Rhodes.

— La ONU se va a reunir en Viena en tres días y ratificará los acuerdos. — Rogers miró a Stark quien estaba sentado lejos. — Discutanlo.

— Es estúpido hacer ésto... El mundo estaría en las ruinas si nosotros no hubiéramos hecho lo que hicimos.

— Tracionar a tu amigo y buscar problemas con la policía de Washington... ¿Te parece una buena accion?

De inmediato me puse de pié. — Usted no tiene idea de las razones por las que hice lo que hice. Jamás lo traicioné, quería salvarlo de estar metido en más problemas con los soldados y organizaciones que ustedes no pueden controlar. Le deseo suerte general... — me acerqué hasta él. — Pero yo no voy a firmar ni una mierda que venga de usted o el estúpido gobierno.

Ambos estábamos casi frente a frente.

— Tienes tres días para cambiar de opinión... — habló con un tono amenazante sin apartar la mirada de mis ojos, luego caminó hasta la salida

— ¿Y si llegamos a una desición que no le guste? — mencionó Romanoff antes de que se marchara.

— Entonces se retiran. — respondió fríamente.

-

Todos estábamos reunido en un lugar de la base, estábamos discutiendo lo anterior.

— El secretario Ross ganó la medalla de honor del congreso, es una más de la que tú tienes. — Rhodes discutía con Sam mientras Stark estaba recostado tapando su cabeza.

— Supongamos que estamos de acuerdo con ésto... ¿En cuanto tiempo empezarán a seguirnos el rastro como a un monton de criminales?

— Quieren firmar ciento diecisiete naciones... Son ciento diecisiete Sam, pero según tu aquí no pasa nada...

— ¿Aun quieres servir a dos partes?

— Yo tengo una ecuación... — mencionó el androide.

— El nos dirá quién está bien... — dijo Wilson.

— Ocho años después de que el señor Stark revelará su identidad al mundo, el número de personas alteradas de pronto ha crecido exponencialmente y durante el mismo periodo el número de amenzasde destrucción del mundo creció de igual manera que éstos.

— ¿Dices que es nuestra culpa? — preguntó Rogers enfadado.

— Opino que tal vez haya una casualidad... Nuestra fuerza invita a desafiarla, el desafío incita los conflictos, y los conflictos... Producen catástrofes. Ser vigilados quizá sea una idea que todos queremos tomar en cuenta.

Rhodes sonrió para enfadar a Wilson.

— No tengo que analizar nada, en lo personal... Quien sea que vaya a firmar esos papeles, no cuenten conmigo. — dije antes de marcharme.

VIENA. - NARRADOR.

Romanoff acudió a la conferencia de la ONU para verificar los acuerdos de Sokovia.

En ese lugar estaba nada más y nada menos que el rey T'Chaka con su hijo T'Challa esperando a dar una conferencia de parte de Wakanda.

— Cuándo se usó vibranio robado de Wakanda para crear un arma terrible... En Wakanda nos vimos obligados a cuestionar nuestro legado, esos hombres y mujeres asesinados en Nigeria, eran parte de una misión de buena voluntad de un país que ha existido en las sombras. No dejaremos, sin embargo que la desgracia nos haga retroveder. Pelearemos para mejorar el mundo al que deseamos unirnos. Agradezco a los Vengadores por apoyar ésta iniciativa. — T'Challa caminó hasta una ventana y vió una  camioneta con unos hombres. — Wakanda, se enorgullece en extender su mano en paz.

— ¡Todo el mundo al suelo! — gritó T'Challa acelerado al saltar hasta su padre.

La explosión hirió de gravedad a T'Chaka, su hijo estaba encima de él llorando en su cuerpo sin vida.

-

Yo me encontraba en las instalaciones la base, encendí el televisor y miré las noticias sobre el incidente.

Una bomba escondida en una camioneta de prensa arrasó el edificio de la ONU en Viena. Hay más de setenta personas heridas, al menos doce murieron, incluyendo al Rey T'Chaka de Wakanda. Las autoridades un vídeo del sospechoso al que identificaron como James Buchanan Barnes, el soldado del invierno, el infame agente de Hydra relacionado a varios actos de terrorismo y asesinatos políticos.

Ambas noticias me dejaron paralizada, primero se me vino una idea a la cabeza tras escuchar sobre la muerte de T'Chaka, pero luego se borró al escuchar el nombre de James Barnes.

Rápidamente acudí a Rogers, quien también me estaba buscando, fuimos con Wilson y Sharon hasta Viena, en donde Romanoff nos advirtió que no nos involucraramos en lo sucedido, cosaque obviamente no íbamos a obedecer.

Carter nos otorgó información, los tres íbamos a ir tras Barnes para capturarlo.

𝗥𝗘𝗗 𝗥𝝝𝝝𝗠 || 𝖰𝖴𝖤𝖤𝖭 𝗈𝖿 𝖡𝖫𝖮𝖮𝖣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora