(Lunes 02 de abril del 2018, a las 09:08 p.m.)
Querido Diario
Estuve riéndome pilas con el sueño que tuve hace días y no pude evitar cruzar por aquí a contarlo.
Soñé que estaba comprometida con Gabriel. Pasa que un día me dice que "necesitaba pensarlo mejor, que no se quiere casar sin estar completamente seguro, que quiere estar solo un tiempo, bla, bla, bla" y yo, obviamente, puse resistencia alegando que "ya habíamos superado esa etapa, que estaba loco, etc" pero se formó una pequeña discusión en la que al final accedí a darle el tiempo que me estaba pidiendo con la advertencia de que cuando le diera la gana de volver podía ser tarde, pero que igual avise a ver si me daba la gana o no de aceptar.
Para colmo vivíamos juntos, teníamos nuestra empresa y estábamos terminando la universidad. Entonces Gabriel comenzó a salir con muchas mujeres, era como que hoy se acostaba con una y mañana con otra, a veces con dos a la vez y lo peor de todo el asunto es que 1. Podía hacerlo tanto en nuestra casa como en cualquier otro lugar y 2. Tenía una pequeña pizarra en su oficina donde anotaba los nombres de las que ya se había dado, para no repetirlas. Otro plus a la situación era que muchas de ellas se conocían y me conocían, por lo que de vez en cuando venían donde mí a restregarme las cosas que hacen con "mi prometido que me ama". Inclusive, en una ocasión, lo encontré en la casa a punto de iniciar un sexo con una tipa y él, descaradamente me invitó, yo solo le sonreí y le cerré la puerta de la habitación para que se sintiera más a gusto.
Khan trabajaba en nuestra empresa pero Gabriel no sabía que entre Khan y yo hubo algo en el pasado e Khan no estaba tan al tanto de mi presente con Gabriel. Aun así ellos no se llevaban bien. Un día llego al trabajo e Khan me comenta que me nota un poco perturbada últimamente, no quise hablarle de mis situaciones personales así que evadí ese tema y terminamos hablando de cientos de cosas que al final lograron cambiar mi estado de ánimo e hicieron que aceptara salir con Khan a almorzar un par de veces. Nos habíamos vuelto muy cercanos. Gabriel seguía gozando de su libertad e ignoraba de mi amistad con Khan aunque no perdían ningún momento que estuvieran juntos para discutir.
Gabriel fue un día a la oficina de Khan a reclamarle que está disminuyendo su rendimiento, que está distraído y comienza a indagar sobre su vida personas pero Khan lo para en seco diciéndole que con todo respeto, esos temas no son de su incumbencia y que si no tenía algo más importante que hacer que estar obstruyendo su trabajo, entonces se desató una discusión entre ellos. Hasta se recogieron las mangas, como si fueran a pelear pero para su suerte llegué y pude evitarlo. Gabriel no podía despedir a Khan sin mi consentimiento y estaba completamente seguro de que no aceptaría que sus discusiones afectaran otros asuntos.
Sigue pasando el tiempo y las cosas que hace Gabriel ya no me afectan, pero no quiere decir que vaya a vengarme haciendo lo mismo que él. Aun así seguía compartiendo tiempo con Khan y él con sus mujeres, pero comenzaba a molestarse con nuestra amistad. A veces Khan llegaba y dejaba ciertos regalitos en mi escritorio, escritorio que Gabriel frecuentaba para buscar llaves y cosas así. Un día comenzó a pelearme por mi amistad con Khan, los regalos que de vez en cuando me dejaba y yo le dije que no tenía ningún derecho de reclamar los agrados que me dejan mis empleados que sí se interesan en mí porque yo no le reclamaba que usara nuestra cama para sus vagabunderías. Sé que eso lo hirió pero seguí mi camino.
Pues, resulta que Gabriel sentó cabeza y se dio cuenta de que en verdad me quería y no quería perderme, porque como yo no iba a encontrar, etc. Como todas sus conquistas se conocían o algo así, él juntó a su equipito en la universidad para decirles que ya estaba bueno, que se retiraba de esa mala vida de cuero y que me amaba. Obviamente, se armó ahí porque ellas ponían resistencia y yo, humildemente, me estoy dando el show desde adentro de mi facultad y me pregunto sobre el plan de ese individuo pero no presté mucha atención hasta que vi llegar a Khan con un reguero de vainas, que daban la impresión de que le iba a pedir matrimonio a esa persona especial en su vida.
Pues se pusieron a discutir porque Gabriel alegaba que no tenía nada que buscar en la UNIVERSIDAD y mucho menos en mi facultad mientras que Khan solo lo ignora y le pasa una parte de la propuesta a cada una de las chicas que están presentes. Gabriel le pregunta a Khan que a quién pretendía pedirle matrimonio y que si estaba seguro de querer hacerlo e Khan responde que le sorprendería saber. Yo sigo mirando por la ventana y me muero de la risa con todo el asunto. Gabriel medio se estaba burlando de Khan y él en toda su calma, armando todo su asunto para la propuesta perfecta.
Pues yo salgo para darme mejor el show o para detenerlos, ¿quién sabe? Cuando Gabriel me ve y se acerca para decirme que lo perdone por todo y hasta me abraza las piernas, arrodillado, se voltea al ver que Khan está arrodillado con un anillo al otro lado de mí, con todo el equipito de mujeres, pidiéndome matrimonio. Se pusieron a discutir. Gabriel decía que si volvía a meterse con su mujer no viviría para contarlo, que a pesar de todo nos amamos, que se fije en otra mientras que Khan estaba diciendo que él no me merece, que solo me hace daño, que un hombre de verdad no es como él y justo cuando la discusión tomaba mayor auge, fue interrumpida por un "sí" pronunciado por mis labios. Todo se detuvo, todo estuvo tranquilo, ambos me miraron, nadie sabía a qué había respondido, todos estaban expectantes. Dije que sí perdonaba a Gabriel, que sí lo amaba y que sí volvería con él pero no hoy, por lo que accedí a casarme con Khan. Entonces comenzó una discusión entre los tres donde Gabriel peleaba contra nosotros porque ¿cómo te casas con alguien que no amas? Y yo "igual que como tú te acuestas con ellas" y el fin era que todos sus argumentos eran completamente válidos pero solo por verlo arder accedí a casarme con Khan y evidentemente eso no era algo que afectara a Khan. No quise ver en qué terminaba el sueño, así que me desperté.
Lo hubiera escrito novelísticamente, como la vez pasada pero no quería alargar mucho el asunto.
Con cariño,
Mariella.
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Where do broken hearts go?
RomantizmMi nombre no es Mariella, pero en este libro cuento mi historia. Cuando tuve 17 años me enamoré por primera vez y rompieron mi corazón. No sabía a dónde ir o con quien hablar, sentí que las personas ya se habían hartado de mí, comencé a escribir, co...