Jungkook entró a su despacho después de haber pasado varias semanas sin ir por allí y se enfrascó en los documentos que tenía pendientes.
Llevaba un par de horas por allí cuando Lisa entró.
—Papá.
—Hola, cariño —le saludó levantando la mirada de los balances contables que estaba leyendo.
—¿Cómo estás? —preguntó la chica acercándose a él para besar su mejilla antes de sentarse frente a él.
—Bien, cariño. Tapado de trabajo.
—Lo imagino. Te has tomado muchos días de vacaciones.
—No eran vacaciones —le contestó con fingida indignación. —Estuve trabajando desde casa.
—Ya me imagino que sí —se burló la joven, haciéndole sonreír.
—Believe it or not —comentó burlón.
—¿Y puedo preguntar a qué se debía que trabajaras desde casa? —inquirió su hija y Jungkook supo que ése era el momento exacto en que comenzaría la nueva tormenta.
En esas semanas había hablado con sus hijos pero nunca habían tocado el tema de su ausencia en la oficina ni, desde luego, ningún tema que incluyera a Jimin.
Se recostó en su asiento mirando a su hija pensativo.
Era una pena que su diálogo ameno fuera a estropearse por la intransigencia que rodeaba a sus hijos cuando de su relación con Jimin se trataba. Desearía que no fuese así pero no sabía cómo evitarlo y, realmente, no pensaba hacer nada que pudiera afectar su relación con el papá de su nuevo hijo, el chico que amaba.
Intentó buscar la mejor forma de comenzar, pero no la encontró, así que decidió ser todo lo directo que fuera posible.
—Jimin y yo hemos vuelto —soltó de una vez sin alejar la vista del rostro de su hija.
—¿Qué? —exclamó la chica sonrojándose indignada.
—Sí, hemos vuelto, y antes de que digas nada, no voy a volver a perderlo, sin importar si a ti o a tu hermano os gusta o no la idea.
—No lo entiendo, ¿cómo has podido volver con él?
—No sé cómo he podido vivir alejado de él todo este tiempo —corrigió. —Amo a ese hombre, Lisa, y me haría muy feliz que mis hijos lo aceptaran.
—No puedes decir eso —gruñó Lisa. —Ese hombre es un trepador y un...
—Basta, Lisa —le cortó con rotundidad —No voy a permitir que hables así de él, de la misma forma que no acepto que nadie hable mal de ti. Es el hombre que amo, me ama, y no pienso romper mi relación con él.
—¡Prefieres romper tu relación con tus hijos! —rugió la chica furiosa.
—Desde luego que no, pero Jimin no intenta interponerse entre mis hijos y yo.
—No lo puedo creer. Eun Woo se pondrá furioso.
—Eun Woo puede ponerse como quiera. Él ha hecho su vida, tiene novia, sigue adelante. Tú, igual. Así que yo también seguiré adelante con mi vida. Tú y tu hermano siempre seréis parte de mi vida, y lo más importante. Siempre seréis bienvenidos en mi casa, y siempre estaré para vosotros para cualquier cosa que necesitéis, pero tendréis que aceptar que Jimin es parte de mi vida y eso no va a cambiar. Será más sencillo para todos si lo aceptáis de una vez por todas.
—Me niego a aceptar que mi padre sale con un chico que podría ser su hijo —batalló molesta.
Lisa se levantó con un gesto altivo y se dispuso a marchar cuando Jungkook la detuvo.
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Seducción prohibida
FanfictionJungkook no cree que exista el amor, al menos no para él. Jimin está dispuesto a demostrarle que no existen diferencias entre dos personas que se aman. Jungkook debe demostrarle que se enfrentan a algo perverso y prohibido. ¿Sera que lo lograra? ...