𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟹𝟹

2.5K 261 18
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Narra Levi.

La mañana es extrañamente fría para estar en verano, las nubes se mueven en el cielo sin taparlo completamente, dando la sensación de que alguno de estos días va a llover. Lo único que se escucha en el ambiente son los cantos de los pájaros y los pasos rápidos de los soldados que se encuentran trotando dándole fin al entrenamiento antes del almuerzo. Como todos los días, trato de concentrarme en mi respiración y en mi ritmo, pero la chillona voz de mi compañera me interrumpió.

-¡Leviiiiii!- Aceleró su ritmo para alcanzarme y llegar a mi lado. -¿Todo bien?-

-Como siempre.- Respondí sin interés de formar una conversación.

-¿Seguro que sigue como siempre?- Preguntó sonriendo de una manera sospechosa.

-Si tienes algo que decir, dilo, cuatro ojos.-

-Ayer visité a alguien especial.- Rió pícara.

-¿Especial?-

-Su nombre empieza con M.- Puso su dedo en su barbilla, haciendo como si pensara en algo. -¿Quién será?-

-Ya, ¿y qué?- Di vuelta mi mirada hacia el lado contrario, intentando ignorarla.

-Estaba de mal humor porque alguien la ignora.- Dijo haciendo énfasis en la palabra "alguien".

-Tch.- Se escuchó el grito del entrenador dándole fin al entrenamiento, haciendo que empiece mi camino hacia el comedor, dejándola atrás.

-¡Levi, si que eres un idiota!- Gritó siguiéndome. -¡Casi la besas! ¡¿y lo mejor que se te ocurre hacer es ignorarla?!- Paré en seco mirándola de frente, haciendo que choque contra mi.

-¿Eso te dijo?- Pregunté sorprendido.

-Bueno, no con esas palabras.- Aclaró. -Pero si la agarraste de la cintura y te quedaste mirándola por minutos es porque obviamente, estabas pensando en besarla.- Dijo en tono de reproche.

-¿Tú qué sabes?- Di media vuelta para seguir mi camino, pero me tomó el hombro y me giró devuelta a como estaba.

-Sé lo suficiente para saber que eres un completo idiota.- Dijo enojada. -Dime, ¿Tengo razón? ¿De verdad querías besarla?-

-Pues... se veía muy linda sonrojada.- Dije en voz baja, a lo que ella reprochó. -Tal vez.-

-¡Idiota, idiota, idiota!- Golpeó mi cabeza tres veces a compás de los insultos. -¡Es su primera vez en el amor! ¡No la abrumes!- Se cruzó de brazos enojada. -¡Ve despacio, bruto!-

-¡¿Qué se supone que quieres que haga?!- Empecé a frustrarme por dejar de lado que es mi primera vez igualmente.

-¡Debes pedir su consentimiento!- Dijo con obviedad. -¡No la toques, no la besas, no hagas nada con dobles intenciones si ella no te da el permiso de hacerlo!-

Gaudium  ↬𝙻𝚎𝚟𝚒 𝙰𝚌𝚔𝚎𝚛𝚖𝚊𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora