Casita tuvo la intención. Todos saben que la tuvo.
Pero a veces uno no consigue lo que quiere, aunque sea algo bueno.
Alma cuenta que le ha dicho que se siente culpable. Dolores incluso ha podido oír unos susurros de llantos lastimeros.
Casita no es la misma desde que no está Mirabel.
Todos temen que se derrumbe de nuevo, pero Hernando siempre podrá tapar las grietas.
En general, nada es lo mismo desde que se fue Mirabel. El pueblo está en silencio, Isabela sólo logra crecer flores por marchitar, ya casi no hay sol, y las arepas de Julieta no son tan ricas como antes. Camilo apenas sale, Dolores se la pasa en la casa Guzmán, Antonio está en una negación muy extraña, y Luisa... Bueno, no creo que haga falta hablar sobre cómo está Luisa.
Mirabel era la chispa de los dones, la chispa de esa casa. Mirabel era el fuego en esa vela.
Y aunque siguiese prendida, todos entienden que no brillaría como alguna vez lo hizo.
Como lo hacía antes de que Mirabel diera su vida por salvarla.
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Siempre
Fanfiction(Si te gusta Encanto, lee esto). Todo se arregló, pero tan sólo por el amor de familia. Fue un segundo milagro concedido a los Madrigal. Sí, Casita volvió. Sí, los dones regresaron. ¿Pero saben quién no regresó? Mirabel. Pablo es nuevo en el pueblo...
