🎖️Treinta y cuatro🎖️

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Kadri
Al fin en casa, bueno, una forma de decirlo. La academia se volvió mi hogar desde que nos enviaron aquí. Lastima que no venga con buenas noticias, espero recibir algo que alegre el día. Esa alegría me la da Eris, extrañé muchisimo dormir con mi mujer, sentir su piel y besar sus labios. 

Estoy tan ansioso que no dormí en las 14 horas de viaje, si, cuando esté allí no despertaré en horas, hasta creo que en días. Voy a secuestrar a mi rubia por el fin de semana, a la mierda el mundo o la academia. Para dormir calmadamente mi preciosa mujer es la clave, ella me ayuda a desconectarme del jodido mundo.

- Señor, aterrizamos en 10 minutos, si tiene algo que preparar es mejor hacerlo ya- me dice un hombre de confianza de Calix.

- ¿Alguien estará esperando?- estoy algo frustrado porque debo preguntarle al piloto. Stefano no contesta mis mensajes desde hace una hora, maldita sea la hora en la que acepté esa misión.

- No tengo esa información superior, lo lamento- las cosas solo van mejorando.

Y con una mierda, nadie espera por mi. Cómo diría Kiran estoy solo, solo, solito. Son unos malditos hijos de puta, me harán caminar hasta la base desde la pista de aterrizaje. Los odio, no son mis mejores mejores, son mis mejores enemigos.

Las malas noticias siguen llegando como si nada, la mala suerte me persigue. No conseguí nada bueno, pero si algo nuevo. Ya sé el porque de los desmayos de Eris, es más grave de lo pensamos.
Suspiro y espero pacientemente hasta que la luz roja indica que debo abrochar mi cinturón de seguridad, el descenso ya empezó.

Estoy soñando mucho, ojalá sea Eris quién me espere en la pista y corra hasta estar entre mis brazos, la necesité como a nadie en mi vida. Stefano dijo que Kiran desea estar con ella, que la conoce desde hace años y que decidió dejar de esperar por ella, fue a buscarla.

Que mi hermano esté con la misma mujer se siente raro, muy raro. Fuimos criados para compartir todo, buenos o malos momentos, recuerdos, amistades...pero novias, eso sí era nuevo. Me alegra que al fin se relacione con la mujer que ama desde hace años, porque si, mi hermano la ama.

Esa mierda de amor a primera vista pasó con Kiran, la vió en una cena benéfica y de ahí en más no se alejó de ella. Hasta mandó a sus mejores hombres a qué la sigan para protegerla, buena idea siendo que alguien la persigue y busca hacerle quien sabe que cosa.

Es un secreto con comparto con mi hermano, un maldito degenerado buscaba a Eris desde que tenía 15 años, o eso es lo que nosotros sabemos.
Nos enteramos de ello cuando en una noche de lluvia un hombre desconocido ingresó por la ventana del cuarto de Eris, los guardias se apuraron en ir allí y cuidar su puerta, el maldito habrá creído que era su padre, mentira, él estaba ocupado con su amante al otro lado de la ciudad.

Desde ese día nos mantenemos alerta a cualquier extraño que se acerque, no conocemos la identidad de ese hijo de puta, pero podría dañarla cuando menos lo esperamos. Es difícil ser el escudo de Eris siendo solo los dos, tenemos que decirle lo que sabemos a los demás, es mucho trabajo para los dos.

- Ya estamos aquí señor- no me había dado cuenta de que ya no estamos en el aire.

- Gracias soldado- el mismo saludo militar de siempre y me marcho, mi mujer espera por mi, o eso pienso

Por fin mis pies tocan el suelo, extrañé mucho el espacio verde, la cuidad es un desastre de automóviles y edificios. El ambiente abierto, espacio libre es lo que me ayuda a calmar la ansiedad. Miro mi alrededor, fue solo un mes pero se sintió el peor que tuve en mi vida.

- ¡Kadri!- esa voz, la misma que tanto extrañé me recibe en la entrada del edificio. Me volteo para verla, ver a la rubia que me quita la respiración con su sola presencia.

Proyecto: Reforma  (+18) (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora