Proyecto: Reforma (+18) (Borrador)

🎖️Tres🎖️

🎖️Tres🎖️

Eris

- Repita lo que ha dicho-

¡Carajo! Tengo que cerrar mi gran bocota aquí. Al parecer no le ha gustado lo dicho, pero es que fue un error, lo estuve pensando.

-N...nada-

- No me gusta repetir las órdenes. Usted ya ha desobedecido dos de ellas-

- ¿Dos?-

No recuerdo la primera. Con los nervios y el estrés por estar lejos de mi familia y tener que acostumbrarme a una nueva etapa...

- Si. Aún sigue con la ropa puesta-

- Ro...ropa -

Me ordenó estar desnuda frente a él ¡Ni que estuviera muerta! Este hombre por más bueno que esté, no me ve desnuda.

- ¿Debo hacerlo yo? -

- No, señor. Pero-

- Desnuda-

¡Dios! Qué vergüenza, jamás me había desnudado delante de ninguna persona por más que sea hombre o mujer. Soy bastante segura de mí misma pero como cualquier persona normal tengo cierto complejo.

- ¡Ya!-

Ese fuerte grito me hace saltar de la silla y comenzar a desnudarme con mucha pena. La vergüenza me recorre entera, mi rostro debe ser un tomate y mis manos no paran de temblar, haciendo más difícil y tardío el trabajo. Cosa que por lo visto le molesta ya que se acomoda nuevamente detrás de mí y de un tirón rompe mi ropa.

-¡Ah!-

Era mi ropa favorita.

- ¡Basta!-

- No puedo perder tiempo-

Cuándo creí que su falta de respeto no podía ser mayor. Su mirada se podrá en mi ropa interior, toma mi brasier y lo rompe por la mitad para luego hacer lo mismo con mis bragas.

- ¡Está loco, animal!-

Ignora mi berrinche y se queda observando mi cuerpo sin pudor alguno. Sus labios se entreabren al ver mi vagina y pasa su lengua por sus labios. Era una mirada de lascivia pura.

Mi brazo derecho tapó mis senos - lo mejor que pude- en lo que mi otra mano cuidaba de su vista mi intimidad.

- Manos fuera-

- N...no-

Estaba cagada de miedo, pensaba que me violaría. Pensamiento que empeoró al bajar un poco más la vista.

¡Estaba erecto! Y que erecto...

¡No! Ya basta Eris, deja de mirar la erección del hombre.

- ¿Ya acabó?-

- ¿Hee?-

- ¿Ya acabó de verme?-

- He visto mejores. Pero si-

Típico mío, no parar de hablar y meterme en más problemas.

- Sobre el escritorio-

Ese tono me tensa, está muy molesto. El deseo que había en sus ojos se transformó en enojo.

- ¡No!-

Estoy a nada de comenzar a soltar lágrimas de tanta furia. No puede hacerme esto, nadie jamás me había tratado con tanta falta de respeto.

- Sobre el escritorio-

- ¡No puede hacerme esto!-

Se cruza de brazos y mira mi arrebato. No puede ser