Capítulo 4

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Lisa despertó temprano mientras ve la conocida silueta a lado de su cama, Jimin lucía como un completo desastre por lo que anticipó que quizás la noche de "cita" fue el comienzo de una serie de paradas que concluyeron en un bar.

Su aroma fuertemente lo delata por lo que ella solo pudo tapar la nariz y levantase comenzando así su día. Aun está molesta y claramente se lo hará saber al fiestero que tiene frente.

No se lo dejará tan fácil a Park.

Enfundada en un hermoso traje de dos piezas y pantalón blanco, la mujer lleva su largo cabello rubio en un perfecto planchado. Su maquillaje es impecable, así como su estilo. Lisa tiene que asistir a algunas reuniones sociales que ayudaran a fortalecer las relaciones sociales entre los negocios de su firma. Sería un día largo y escépticamente agotador, particularmente porque ha sido invitada a la fiesta de cumpleaños de la hija del presidente.

Y aunque deseara con todas sus fuerzas negarse su relacionista le ha aconsejado que lo mejor es ir y evitar alguna clase de mal entendido. 

– Solo tomaré café. – dice a la señora Kim quien duda en preguntar si es todo.

– Sé lo que estas pensando. – ambas femeninas caminan al comedor.

– Si mi vago esposo se digna si quiera a levantarse hoy de la cama se hará cargo de sus propios asuntos. – sin mencionar otra palabra Kim salió del campo visual de la señora Park con evidente gesto preocupado.

Lleva años trabajando con el matrimonio  y jamás vio a Lalisa tener esas actitudes con su marido. Ella es en extremo una mujer tranquila por lo que la culpa solo se cernía al animado esposo ¿Qué habría hecho Park Jimin? para desatar por primera vez la furia de la señora de la casa.

Lisa estaba por terminar su segunda taza de café mientras lee el periódico cuando escucha el arrastre de unos pasos acercarse. Anticipa que se trata de Jimin, sin embargó, no cambió su postura y siguió leyendo el contenido como si no le importarse el hecho de tragarse alguna que otra palabra en reprensión

Como un cachorro quien sabe perfectamente su falta, Jimin se acerca lentamente al comedor donde ve su asiento estar desocupado.

– Buenos días princesa. – fue el primer golpe en palabras que lanzó hacia su esposa.

Amaneció con una terrible resaca pero sin duda no era tan insoportable que saber que su tranquila amiga esta teniendo esa actitud áspera e indiferente con él.

– Buenos días Park. – allí lo supo.

Lisa solía llamarlo por su nombre, no por apellido confirmando lo obvio, incluso su lugar esta totalmente limpio y sin alguna clase de desayuno bien parecido. 

– Lisa yo... - antes de que pueda continuar con su disculpa la rubia se levanta del asiento bebiendo de un solo trago el café.

– No intentes ni siquiera disculparte con palabras que no me sirven Jimin. – le condenó.

– Es obvio que no lo lamentas, por lo visto pasaste una magnifica noche mientras yo tuve que lidiar con tus padres. – esos intensos ojos miel le miran con reprensión. – ...Sola. – recalca la palabra

La señora Kim quien esta por entrar a la habitación se detiene abruptamente al escuchar el volumen de las voces dentro del comedor. Mira a sus empleados un tanto desconcertada por la situación, ellos también están confusos por la que parece una activa discusión. Es la primera vez que escuchan a la pareja alterarse de ese modo.

– Prometí que solo serían un par de tragos pero claramente se descontrolo y perdí la realidad. – Jimin se sentía muy avergonzado.

– No me importa Park, claramente te lo dije e incluso lo prometiste. Si tenías intensiones de beber y pasarla bien al grado de arriesgarte de esa manera debiste decírmelo y cambiaríamos la fecha. – soltó un poco furiosa la rubia. Su control se ha ido.

SECRET | LIZKOOKMINSOODonde viven las historias. Descúbrelo ahora