Claro que se arrepiente de tomarse esa clase de confianza con extraños, pero Jeon tiene cierto desaire que le confunde, jamás ha sido esa clase de mujer que se tome el atrevimiento de contar sus más profundos pensamientos con extraños, sin embargo, sus palabras parecen fluir con facilidad en compañía del pelinegro. La confianza y emoción que le transmite el doctor es extraña.
– ¿Entonces extiendo la invitación a la familia Jeon?. – Lisa asiente tratando de enfocarse, solo quedan algunos días para el evento de beneficencia así que las invitaciones deberán ser enviadas lo más pronto posible.
Si bien, no tiene rostro por la vergüenza es totalmente consciente del peso e influencia que la familia Jeon otorgaría al evento. Anteponer sus sentimientos sería francamente poco profesional. Los Jeon son gurús en medicina, y es específicamente lo que busca.
– Hola princesa. – Jimin se adentra a la sala de estar mientras saluda cordialmente a Hye.
Al ver imponente y andrógina belleza no evita sonrojarse pues no es tabú la sexualidad de su organizador quien mantiene cierto flechazo platónico hacia su esposo.
– Llegas en buen momento Jimin, precisamente Hye está por enviar las invitaciones. – Lisa se limita a recibir con una sonrisa el beso en su mejilla.
Jimin ha llegado puntualmente a la cita que ha solicitado, Lisa necesita sincerarse y hablar directamente con su esposo.
Algún par de minutos después, Hye se despide de la pareja prometiendo otro éxito como cada año son los eventos bajo su nombre.
– Y bien, ¿te divertiste? – Lisa le pregunta pues todo el fin de semana Jimin se ha pasado fuera de la mansión por lo que asegura que quizás su esposo haya tenido más diversión de la que quiere evidenciar
Lo cual es inútil pues su sonrisa le delata y ese brillo en los ojos le hace entender que ha dado otro paso a la relación que mantiene con "su persona especial"
– Ha sido increíble, me sentí libre y sin preocupaciones por primera vez en mi vida. – se acuesta en el sillón más cercano a él mirando a su esposa.
– ¿Y tú Lili? ¿Has hecho algo diferente que pasarlo en la biblioteca? – preguntó reposando su cabeza con uno de sus brazos flexionados.
Lisa desvía la mirada del oji azul, algo que Jimin pudo detectar y que inmediatamente le hace colocarse en alerta.
– ¿Sucedió algo el fin de semana? – el tono preocupado solo la hizo sentir más culpable por no encontrar el valor necesario
No es un tema fácil de tratar y ella no sabe cómo el peligris podría reaccionar a una situación muy directa.
– Jimin yo... - se estuvo mentalizando los días posteriores a la conversación con el doctor, pero estar allí frente al hombre quien es su esposo ya era otro nivel. No tiene las agallas de ser egoísta, la situación entre ambos va en direcciones muy opuestas.
No puede encadenar a Jimin a una decisión que él no desea e incluso puede asegurar no piensa. Así que prefiere que el comentario de; "Jimin quiero un bebé" se entierre en lo profundo de su ser.
– Nada, solo decirte que seré patrocinadora de un orfanato". – le sonrie eliminando angustia en el rostro del peligris.
– Siempre tan amable y gentil. – sus mejillas fueron apretadas como un acto de confort
Del otro lado de la ciudad cierto pelinegro se encuentra con pensamientos perdidos mientras escucha a su mejor amigo discutir con su novio quien apenas se mantiene consciente.
Las palabras de la rubia de alguna manera le hicieron preguntarse si realmente ese matrimonio que vislumbra ser "perfecto" es real. Una mujer felizmente casada no desearía tener una "familia feliz", al menos no lo diría con melancolía en sus palabras.
– Tierra llamando a Jeon. – el chasquido del dedo hizo reaccionar al doctor quien ve al novio de su amigo estar sumergido en una gran cruda. – Te llamé hasta aquí porque eres doctor y mi mejor amigo. – HoseÓk arremetió contra el pelinegro quien suspiró y se abstuvo de rodar los ojos
A veces Hoseok es tan exagerado que no ve el por qué tuvo que recorrer toda la ciudad hasta llegar a su apartamento.
– Te lo dije Jung, no tiene nada más que deshidratación provocada por los vómitos. – mira al joven peli rosado dormir plácidamente como si él no tuviese que lidiar con los dramas de Hoseok.
– Solo ha bebido más de lo que puede soportar. – trata de tranquilizarlo.
El pelirrojo asiente mientras ve con algo de pena el cuerpo de Taehyung, su novio. No quería presentar al pelirosado de esa manera, de hecho, la identidad de este mismo aun era una incógnita para Jungkook. Claramente sus planes para presentarlo oficialmente se habían ido a la mierda por el corto fin de semana alocado que su Taehyung tuvo con el nuevo grupo de amigos que conoció.
– Lo siento Kook. – suspira largamente tratando de recobrar la compostura.
Todo lo que tuviese que ver con ese hermoso hombre de piel canela y ojos aduladores le hacía perder la cabeza, Hoseók está totalmente enamorado y solo por esa razón es por qué Jungkook asiente tratando de reconfortarle. Jeon es un buen amigo.
Ambos caminan hacia el exterior de la habitación mientras el ojigris decide no seguir manteniendo cierta incertidumbre.
– HoseOk. – le llama al contrario quien asiente y se dirige rápidamente a la cocina preparando un poco de café
– Sí, kook. – le extiende una taza.
– Sobre el matrimonio Park... - sabe que no debe hablar de ello, o de lo contrario su muy entrometido amigo empezará a crear teorías sin sentido en su cabeza. Pero es el único que podría proporcionarle esa información
– ¿Su matrimonio fue arreglado? o ¿tuvo interés de por medio?– Hoseók retira el rostro de su taza mientras se abstiene de reir.
– Creí que no te importaba los temas de la elite coreana– el contrario levanta los hombros.
– No lo hacen, solo curiosidad. – se excusa.
El pelirrojo se toma tiempo para pensar la respuesta, realmente ha pasado una mala noche a causa del exceso de fiesta de Taehyung.
– No, al menos no que se haya rumoreado. – se acomoda mejor en la silla de la barra que divide la cocina de la sala.
– De hecho. – mira su taza de café. – El matrimonio Park es de los pocos se han realizado por voluntades propias. –
Fue hace tres años que la elite estaba perpleja por la noticia y hasta ese momento todo parecía ser un cuento de hadas donde la pareja perfecta se enamoraba y vivía en su castillo.
– Te fuiste muy joven del país Kook para entenderlo, pero la mayoría esperaba ese matrimonio, los dos eran una clase de mejores amigos. – el pelinegro frunce el ceño.
– Lalisa Manoban y Park Jimin eran inseparables. – suspira. – Amigos de infancia, amigos de adolescencia toda su vida estuvieron juntos. No era de extrañar que Park desarrollara sentimientos hacia la princesa de hielo. – así era conocida la rubia por su carácter inquebrantable y personalidad poco expresiva.
– En fin, hacen una bonita pareja, ¿no te parece? –
"NO" Jeon quiso responder, pero solo ignoró el comentario.
Si lo que dice Hoseok resulta ser cierto entonces ¿por que razón la mujer se ha dejado ver de una manera anhelante? ¿Acaso no tenían la suficiente comunicación para comenzar una familia? De pronto, Jeon se dio cuenta que su curiosidad estaba sobrepasando limites que se prometió nunca irrumpir. Esos hermosos miel le hacían complicado seguir indiferente.