"Fuimos creados en el caso con el fin de destruir. En cuanto la guerra y la muerte colisionen, nuestros corazones formaron una sinfonía por fin terminada".
—Lo sé. ¿Qué era lo que querías decirme?
—Nada.
—¿Nada? Tú dijiste que querías decirme algo.
—Ya se me olvidó —dijo George tratando de evitar el tema—. ¿Qué quieres hacer después?
—Me gustaría salir a caminar lejos de aquí.
—¿Alguna razón en específico?
—Me gustaría tomarme un tiempo para encontrar un poco de paz en este caos. ¿Puedo preguntarte algo, George?
—Claro.
—¿Qué piensas del futuro?
—¿A qué te refieres?
—Sabes que en algún momento todo esto se acabará. No mataremos a nadie más, no más misiones, no más muertes. Cuando todo eso termine, ¿qué es lo que piensas hacer?
—No me gusta pensar en el futuro, pero me gustaría seguir contigo. Pase lo que pase, me gustaría estar a tu lado.
—A mí también.
Su comida llegó pronto y de rato en rato, George se fijaba en la expresión de Dream. A veces se veía más alegre y luego esa alegría desaparecía por segundos, como si no pudiera estar feliz del todo.
—Dream, estoy guardando algo desde hace un tiempo con el miedo de que tu perspectiva sobre mí cambie. Prométeme que no te alejarás de mí.
—¿Tan malo es?
—Un poco...
—Puedo soportarlo —dijo con seguridad.
—Mis padres fueron los que mataron a los tuyos, a los de Sam y a los de alguien más —Dream no cambió de expresión, solo siguió escuchando—. Los padres de los tres les debían dinero y no cumplieron con el plazo, por lo que hicieron... bueno, ya sabes lo que pasó. No estaba enterado de nada hasta el día en que caíste en coma. Tu computadora estaba encendida y alguien te había mandado un correo, al parecer es la tercera persona de la que no sabemos su nombre... —George soltó un suspiro, tratando de tranquilizarse—. Quiero que sepas que no soy como mis padres y antes de eso no sabía nada. Yo estoy solo de tu lado y de nadie más. Así que por favor, quédate conmigo, ¿sí?
—¿Por qué no me lo dijiste antes?
—Tenía miedo.
—¡¡Estuve buscando a los causantes de la muerte de mi familia desde los trece años, George!! ¡¡Tú lo sabías!!
—Perdón —dijo con voz temblorosa.
—¡¡Perdón nada!! ¿Por qué dices estar de mi lado si todo este tiempo haz hecho que todo sea mucho más complicado? ¡¡Si me lo hubieras dicho antes, ahora no estaría aquí!! ¡¡Estaría viviendo mi mejor vida en alguna parte del mundo!!
—Lo lamento, Dream, pero...
—¿¡Acaso no me ves, George!? ¡¡Estoy manchado!! ¡¡Hay sangre en mis manos!! ¡¡Soy un maldito asesino y has hecho que lo sea por más tiempo!!
—Cálmate, Dream, por favor. Aún tenemos tiempo.
—¿Tiempo? No me vengas a hablar de tiempo porque no lo entiendes nada —Dream limpiaba las lágrimas de sus ojos con desesperación, pero seguían saliendo más y más—. Estuve años en la calle tratando de sobrevivir. A los quince maté a mi primera víctima. A los diecisiete ya había matado veinte y cuando cumplí los veinte, la sufrí se multiplicó por cincuenta. Estuve nueve años de mi vida vengar la muerte de mi familia. Tenía a todo el mundo en mi contra, menos a mis amigos. Ahora no tengo a nadie, ni siquiera sé si te tengo a ti a mi lado. Otra vez estoy solo. No sabes ni un poco lo que es vivir lo que yo he vivido.
—Sí lo sé, Dream. Yo te entiendo.
—No es cierto. No me digas que entiendes, cuando nunca pasaste frío porque tuviste que dormir en las calles. No me digas que entiendes, cuando nunca estuviste más de cinco días sin comer. No me digas que entiendes, cuando tienes a tu familia con vida. No me digas que entiendes, cuando nunca te han deseado la muerte. No me digas que entiendes, cuando nunca tus amigos te han traicionado. No me digas que entiendes, cuando nunca has visto a un amigo morir y menos por tus propias manos. No entiendes nada por lo que he pasado. No entiendes lo que mis amigos han pasado. No entiendes nada. Por mucho tiempo has sido privilegiado y no sabes lo que es vivir como yo. No sabes cuántas veces intenté quitarme la vida, pero desistí a la idea, porque no podía dejar este mundo sin acabar con mi sed de venganza.
—Entonces déjame entenderte. Déjame saber de ti, Dream. Quiero conocerte cada rincón de tu mente, cada pedazo de tu vida y cada grieta de tu alma. Déjame saber de ti. Cuéntame si alguna vez estás cansado o estás feliz. Cuéntame todo, porque no te tengo miedo. Quizás mi vida no ha sido tan horrible como la tuya, pero mi alma también está dañado. Armaré el rompecabezas de tu alma con mis piezas para que por fin estés completo. Solo no me dejes.
—Una vez le dije esto a Alex. Eso se llama dependencia emocional, George. Yo no quiero que dependas de mi ni de nadie. Valórate un poco. Puedes amarme y querer saber todo sobre mí, pero si vas a dañarte a ti mismo con tal de verme feliz, te voy a decir que no es así como funcionan las cosas.
Una tercera persona se había tratado de comunicar con él. ¿Cómo sabía tanto? ¿Sabía incluso más que Sam? ¿Por qué nunca más volvió a contactarlo? ¿Quién era esa extraña persona y por qué había tanto misterio?
Revisó todos sus correos del último mes. No había dicho correo que había mencionado George. Tal vez lo había eliminado para que no lo viera.
Buscó en la papelera y había tan solo un correo.
De: BadBoyHalo
Un apodo. Si Dream estuviera en su posición hubiera hecho lo mismo. Eso significa que cualquier persona que fuera BadBoyHalo, no quería que su identidad fuera revelada.
35
Gran casualidad que justo este sea el capítulo 35.
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Feral Boys
ActionLa banda de crimen organizado más reconocida de Los Ángeles, Feral Boys, no son más que un grupo de amigos que dedican su vida a gastar su dinero en cosas extravagantes y a aniquilar personas igual de extravagantes. Sus vidas darán un giro inesperad...