Feral Boys

L

"Toda mi vida he estado esperando por esto y ahora desearía que nunca acabe. Quiero matarte una y mil veces, babe".

George ve llegar a Dream con el rostro descubierto. Hay sangre por todo su traje e incluso su cara. Tiene una sonrisa siniestra y acelera el paso cada vez más.

—¿Q-qué te pasó...?

Dream lo toma de las mejillas y lo besa suavemente. Siente un sabor metálico en su lengua. Una caricia amarga. Mueve sus labios al ritmo de los de Dream y puede sentir la adrenalina correr por todo su cuerpo.

—Te amo, George —le susurra sobre sus labios lamiendo cuidadosamente la sangre que ha manchado a George.

—¿Estás bien? Estás sangrando —dice George con clara preocupación.

—Estoy bien. No es mi sangre, George.

—¿De quién es?

—Larga historia. ¡Todos los de mi grupo síganme! Tenemos aún mucho por hacer. Esto recién empieza.

Tic

Tac

Tic

Tac

Tic

Tac

El pitido empieza a perder su potencia hasta que se vuelve inaudible debido al sonido de los disparos. La poca luz hace que su campo de visión sea muy limitado, pero eso no evita que puedan apreciar a detalle la sangre que mancha todo el suelo. En cuestión de segundos aquella mansión se ha convertido en un cementerio. Cada vez hay más muertos que vivos.

Se escuchan jadeos de dolor que aumentan en cuanto Dream pisa los cuerpos moribundos de sus enemigos. Aquellas personas que en un comienzo parecían ser cincuenta, en realidad eran casi cien y no habían acabado ni por la mitad.

El sudor combinada con la sangre de Sapnap recorre su frente hasta llegar a sus labios. Se siente tan sediento y no solo de venganza. Está saciado de sangre, pero su organismo está pidiendo ayuda.

—Deberíamos parar un momento -dice George al ver el horrible estado en el que está Dream.

—Debemos continuar.

—Dream, por favor. Necesitas descansar un rato.

Nega con la cabeza y siente como con ese pequeño movimiento lo marea. La visión se le nubla y vuelve a la normalidad. Siente su cuerpo arder. Ha vivido en un infierno todo el tiempo y sabe que está volviendo ahí. Comienza a respirar por la boca al sentir que su respiración se le corta.

"¿Tan rápido te vas a rendir? ¿Eres un cobarde? Solo eres un niño, Dream. Un estúpido niño con sueños infantiles que no puede satisfacer. Un estúpido que arriesga aún cuando sabe que va a perder. ¿Qué vas a hacer? No puede hacer nada. No puedes proteger a todos porque eres débil. ¿Crees ser fuerte? Crees ser fuerte y estás llorando".

—No estoy llorando. ¡Basta!

—Dream, ¿estás bien? —le pregunta George al ver que está hablando solo—. Agárrate de mí. Chicos, ustedes avancen sin nosotros.

"El mundo estaría mejor sin tu existencia. ¿Crees que estás haciendo el bien? ¿Crees que la gente te va a alabar por ser un asesino? Eres un maldito psicópata con complejo de héroe. Huye y deja al resto en paz, eso sabes hacerlo bien".

—¿Un psicópata? ¿Por qué crees que soy un psicópata? Todos alguna vez hemos hecho mal aún cuando pensábamos que estábamos haciendo el bien. ¿Acepto que lo que hago está mal? No, pero tampoco te lo voy a negar. El mal ni el bien existe. No hago ni bien ni mal, solo soy una persona más tratando de cambiar el mundo.

—Dream, ¿estás bien?

Lo escucha reírse mientras se retuerce lentamente como si estuviera muriendo de una manera extremadamente lenta. Su risa cambia a una fuerte tos y lo ve escupir sangre.

—Mierda -lo escucha murmurar.

—Dream. ¿Me escuchas? Estoy aquí contigo. Soy George.

—George... ¿Por qué dices palabras que duelen?

—¿De qué hablas?

—Me estás lastimando. Eso no es bonito.

—Estás delirando, Dream.

—Yo te amo, George. No puedo soportar que me odies. ¿Por qué no me amas?

—Yo te amo.

Dream nega con la cabeza y se suelta del agarre de George para ir a un paso más acelerado.

—Dream, por favor, descansa. Estás muy mal ahora mismo.

—Van a matarnos. Vas a matarme.

—Nadie va a matarnos. Vamos a salir de esto juntos como prometiste.

Dream detiene sus pasos y se voltea para abrazar a George. George puede percibir el dolor en su llanto, el cansancio en su voz y la angustia en la forma que lo abraza. Dream no está completamente lúcido y lo sabe. Ha pasado un mes sin dormir bien y sin comer casi nada . Ha pasado un mes desgastando su cuerpo y ahora estaban viniendo las consecuencias.

—Llamaré a Callahan. El lleva el botiquín consigo. Veremos que podemos hacer contigo.

—No me dejes, usa el audífono.

George acomoda su cabello detrás de su oreja y apunta la luz hacia allí. Su oreja derecha, donde se suponía que llevaban el audífono, está sangrando.

—Se supone que la bala apuntaba a mi cabeza, pero solo rozó mi oreja. Supongo que debería estar agradecido de estar con vida.

—Mierda. Todo es mi culpa —dice Dream acercando su mano temblorosa a la oreja de George.

Limpia la sangre con su mano y George hace gestos de dolor.

—Quédate aquí. Ya vuelvo —le dijo después de dejarlo sentado en el suelo en una habitación vacía.

—George, por favor no te... vayas.

Cuando vives en un infierno estás acostumbrado a escuchar a los demonios murmurar. Cuando eres el dueño de ese infierno, los demonios hablan de ti. Cuando eres el creador de ese infierno, tú eres tus propios demonios.

"¿Solo? ¿Otra vez? Era algo de esperarse de alguien como tú. Nadie te quiere cerca. Asustas a todos. Les das miedo. Nadie querría estar con alguien con una mente tan retorcida. A nadie le gustaría estar con un llorón. ¿Por qué no vas a buscar a tu mamá? Oh, verdad. Ella está muerta como todos los que amas".

—George está vivo.

"Por ahora. ¿Por qué dejaste que se vaya solo? Ya no puedes protegerlo, Dream. Tu corderito será cazado por el lobo y tú no puedes hacer nada por impedirlo".

—George, regresa.

Dream intenta levantarse con todos sus fuerzas y lo logra. Abre la puerta y no puede distinguir muy bien la figura que está frente a él.

—¿George?

—Cerca. Soy su padre.

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