Carajos
— ¿E-Elians? ¿Qué ocurre?
La voz de la pelirrubia lo sacó de sus pensamientos y pasó su mirada hacia ella. Lilly lo vio preocupado e inquieto, pero antes de que dijera una palabra más, el sonido de un helicóptero pasando cerca de ellos, la puso en alerta.
Abrió sus ojos de la sorpresa al escucharlo, por lo que, se sentó tapando su cuerpo con la camiseta grande del pelirrubio.
— Vístete cariño — le dijo y me dio un pequeño beso en su frente — Ellos están aquí...
La pelirrubia al darse cuenta de lo que sus palabras estaban tratando de decir, empezó a vestirse a la par con el pelirrubio que al igual que a ella, empezó a vestirse rápidamente. Solo fueron unos minutos que los dos ya estaban vestidos, sus miradas se reencontraron a la par como si estuvieran diciéndose millones de palabras a través de sus ojos.
El sonido del helicóptero los sacó de sus pensamientos.
— Debemos irnos ahora, pequeña — le extendió su mano y ella pasó su mirada a éstos.
A lo lejos se escuchaban otros helicópteros más y las sirenas de los vehículos de policía, acercándose más hacia ellos. La adrenalina surgió por todos sus cuerpos, por lo que, la pelirrubia extendió su mano para ser tomada por las largas manos del pelirrubio y las entrelazó.
El dolor de su cuerpo y su parte baja, desaparecieron al instante, que para su cuerpo solo existía la adrenalina que se escalando a medida que todos esos ruido de ellos se acercaban más. En la gran ventana que dejaba ver todo afuera, algunas luces de linternas se iluminaban a través de éstos.
Tenían que salir de ese lugar.
Elians, con su otra mano, tomó el arma que había utilizado anteriormente y la guardo atrás de su pantalón. Al instante empezó a caminar a pasos rápidos hasta la parte de atrás de la cabaña. Al llegar, intento romper las ventanas, pero grande fue su sorpresa al darse cuenta que las ventanas eran de vidrio resistente para golpes.
Carajos, no ahora.
Pasó al otro extremo de la cabaña hasta llegar a una puerta metálica debajo de ellos, no tuvo más opción que abrirla, soltando la mano de la pelirrubia para hacer la acción de abrir esa puerta, llevándolos a un sótano debajo de la cabaña. El pelirrubio tomó la mano de ella y la ayudó a bajar, la luz no llegaba a gran cierta parte del sótano, solo una parte por la ventana que estaba arriba.
Era la última opción.
Bunny, ¿Por qué no sales?
No se qué está pasando, Elians... Me siento débil.
¿Qué estaba pasando consigo mismo?
Atrajo hacia él una caja de madera y se subió en ésta para estar en la misma altura que la ventana. Giró la manigueta y la ventana se abrió, suspiró al ver que no estaba trabada y bajó su mano para que Lilly pudiera subirse en la caja. En el momento que iba sujetar su mano, la puerta de arriba de la cabaña se abrió fuertemente, escuchando un tremendo estruendo.
— Lilly...
El pequeño trance que había estado la pelirrubia, reaccionó al momento de escuchar su nombre. Tomó la mano de Elians y subió a la caja, acto seguido el pelirrubio se agachó.
— Sube en mi espalda, Lilly, rápido.
Elians le dio una mano para sostenerse y así pudiera subir en su espalda, por lo que, Lilly se subió en su espalda y tomó un poco de fuerza para salir por la ventana.
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La debilidad de un psicópata (Primera Trilogía)
Mystery / Thriller¿Quién creería que Lilly es la debilidad de un psicópata? Raro por naturaleza y la sociedad, pero un punto débil y sensible para Bunny. Antes de leer: Esta historia tiene temas sensibles y de +18, lean bajo su propia responsabilidad. 28/10/2021 🎖️...