*Aparecen canciones en este capítulo, como siempre les digo, me encantaría que las escucharán mientras lo leen, yo lo hice para poder escribir y meterme en la historia.
Ahora sí, a leer*Jules Davies
¿Qué es lo que pasa cuándo la tristeza invade a la mente y al corazón?DEPRESIÓN
La respuesta de muchos.
Al salir a la calle lo primero que miramos son personas caminando a nuestro al rededor, personas que vemos día a día. Pero ¿Alguna vez te has detenido a observarlas?
Tal vez ya lo sepas o tal vez no, pero, algunas de esas personas que caminan a nuestro alrededor son expertas en ocultar sus emociones, sus sentimientos.
Creo que jamás podríamos imaginarnos la cantidad de problemas que cargan encima día con día. O si las sonrisas que muestran son verdaderas.Mica siempre me decía que yo pertenecía a ese porcentaje de personas y... tal vez era así.
Algunos días habían pasado desde que revelé mi secreto a Martín. Quién no hizo más que darme todo su apoyo. Admito que me sorprendió la naturaleza con la que se tomó todo. Siempre creí que si me atrevía a contar esto a otras personas cercanas a mí, iban a juzgarme y terminar marchandose de mi lado, pero con Martín, comprobé que tal vez podría estar equivocada.
Juan Pablo había notado mi comportamiento raro pero no había pedido ninguna explicación, cosa que le agradecí profundamente.
El jueves por la tarde me encontraba con Mica, Juan Pablo y sus amigos - que ahora también eran los míos. Jamás creí que diría esas palabras MIS AMIGOS- comiendo hamburguesas en el centro comercial. Habíamos salido para poder despejarnos un rato de nuestros trabajos.
– Oiga ¿me puede traer otra hamburguesa por favor? – pidió Villa al mesero.
– Claro – respondió amable y fue hacia el local.
– ¿Es que tu no tienes llenadera? – preguntó Mica con una mueca de disgusto.
– Uhm – lo pensó – No – sonrió y guiñó el ojo.
El tema de la comida chatarra, las calorías, las azúcares y todo eso, era algo muy serio para Micaela. Era bastante obvio teniendo en cuenta que era modelo.
– ¿Te das cuenta de cuántas grasas estás metiendo en tu cuerpo? – preguntó.
– Soy bastante consiente de eso. Gracias por preocuparte, Mica – dijo limpiando las comisuras de sus labios con una servilleta.
Mi mejor amiga nos dedicó una mirada incrédula, la cuál todos respondimos con una sonrisita divertida.
– ¿Jules?
– ¿Si? - respondí metiendo una papa frita en la catsup.
– ¿No le dirás nada?
Negué con la cabeza divertida mientras metía la papa frita a mi boca.
– ¡Argh!
– Oh, vamos Mica, tu eras igual que él cuando éramos niñas ¿Que no lo recuerdas?
– ¡Shh! – tapó mi boca con su mano.
Isaza quien estaba a su lado soltó una carcajada.
– ¿Qué? ¿Mica comiendo grasas en exceso? – preguntó pero la pelinegra lo fulminó con la mirada en el instante en que bajaba la mano de mi boca.
– ¡Eso... Eso fue hace años! Ahora como mínimo como la mitad de hamburguesa – señaló su plato en dónde estaba la mitad.
– ¿Puedo comerme eso? – preguntó Martín.
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La Última Noche de Diciembre
RomanceJules perdió la esperanza de vivir hace tiempo. El pasado que carga la dejó rota y con pedazos incompletos, tal cosa la llevo a armar una barrera de acero entre ella y el mundo que la rodea. La música es el único latido débil que la ayuda a sobrevi...